A los pocos minutos, me separé de su miembro, lamí mis labios saboreando su sabor. Harry todavía sostenía mi pelo en el puño de su mano. Me obligó a mirar hacia arriba y sin esperar más aplasto sus labios contra los míos. En un beso duro y exigente, que correspondí encantada.
Harry deslizó su lengua dentro de mi cavidad bucal, iniciando una guerra entre ellas. Agarró mi labio inferior con sus dientes tirándolo, gemí y el gruñó en respuesta, volviendo a besarme con fuerza.
Una voz alejada nos hizo separarnos, estiré mi cabeza hacia la derecha y Harry giró su cabeza. Los dos estábamos atentos a las palabras del director.
-Lo están haciendo muy bien, pero necesito acción. -Dijo apoyando sus codos en el escritorio delante de él. Los dos asentimos con la cabeza entendiendo a lo que se refería.
Harry giró su cabeza hacia mí y yo lo miré subiendo mi mirada hacia él.
- Harry. -Le llamó el director haciendo que apartáramos las miradas y dirigirlas hacia él.
-¿Qué? -Le preguntó.
-¿Te sabes algunas posturas del Kamasutra? -Le preguntó el director mirando-le a él.
Harry asintió con la cabeza ante su pregunta.
-En tus manos está. -Le habló el director quién pasó las manos por detrás de su cabeza.
Harry suspiró y se volvió a girar hacia mí. Le miré sin levantar la cabeza. Cogió mi hombro izquierdo con una mano y la otra la llevó hasta mí cintura.
-Date la vuelta. -Exigió.
Ella le hizo caso y se dio la vuelta bajo su mirada. Ella todavía estaba de rodillas sobre el sofá y su trasero apoyado en sus pies. Harry retiro el pelo de ella llevándolo hacia su izquierda.
Y se acercó a su oído.
-Abre las piernas y levanta este bonito culo. -Al decir las últimas palabras le dio una palmada en uno de los cachetes del trasero.
Ella gimió en respuesta. Mordió su labio inferior mientras hacia lo que Harry le había ordenado. Ella al hacer lo que le había pedido él apoyó sus dos codos en el inició del respaldo del sofá.
Harry se retiró un poco hacia atrás mientras observaba el trasero de la chica. Sonrió de costado. Y se acercó a ella. Pasó una mano por su cintura y la tiró un poco hacia atrás.
Él giró su cabeza hacia el director.
-¿Y los condones?
El director sin decir ninguna palabra señalo una mesita al lado del sofá. Harry dirigió su mirada al lugar que señaló y se apartó de ella. Cogió uno de la pequeña mesa y los rasgó por la mitad. Tiró el envoltorio al sofá y lo deslizó sobre su miembro.
Nuevamente la agarró por las caderas y dirigió su miembro a la entrada de su vagina. Y con una sola embestida se deslizó dentro de ella. Ella sin esperarlo se incorporó hacia delante por la impresión mientras lanzaba un gemido ahogado.
Harry se deslizó fuera de ella y volvió a embestirla con fuerza. Ella tuvo que morderse el labio para no volver a soltar uno de sus fuertes gemidos.
Harry mientras la penetraba con rapidez se acercó a su oreja.
-¿Te gusta nena? -Le susurró con la voz ronca.
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