Explicaciones.

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—Maya—susurre.—, Maya—dije, esta vez subiendo más mi tono de voz.—, ¡Maya! ¿Que... que pasó, a que se refiere?  

"Cuando vuelva, estaremos juntos, lo prometo." 

—¡Andlina! ¿que sucedió?—no se si su reacción de sorpresa es por la desesperación en mi voz, o porque en este momento estoy sentada en el piso llorando en silencio. Incluso Karan viene.

—¿¡A que se refería, que quería decir!?—le grito, desesperada.

Karan me toma por los codos para ayudarme a levantarme, pero yo no quiero que haga eso, yo quiero que me expliquen a que rayos se refería Cam. No coopero, creo que Karan ya lo esperaba pues no lo noto hacer esfuerzo. Todo lo contrario, me carga con tanta facilidad que tengo que asegurarme de que no soy una simple bolsa de huesos. Karan es muy fuerte,  aunque no lo parezca. Me deja sobre el sillón y Maya se pone a mi lado. Karan se queda de pie, frente a mi, como si en cualquier momento fuera a caer y el a recogerme antes de azotar contra el suelo. La mano de Maya acaricia mi rodilla como si fuera a darme una horrible noticia.  Tengo miedo de que en serio sea una horrible noticia. 

—Andlina... A Cam le, a Cam le ofrecieron una gran oportunidad, increíble, era técnicamente imposible de rechazar, hasta que enfermaste...

—Yo no enferme, fue solo...

 —Si enfermaste, desde meses atrás estabas mas pálida, mas delgada, mas débil, mas frágil, te movías con tanto cuidado, como si tuvieras miedo de caerte en cada paso que dabas. Parece que nunca lo notaste. Tu madre y yo hacíamos lo que podíamos, intentamos que no te dieras cuenta, no queríamos preocuparte. Te dábamos vitaminas, medicamentos, por suerte nunca lo notaste. Por un momento estuviste estable, incluso parecías mejorar, luego pasó... el incidente, y fue como si todo lo que hicimos estos meses se fuera a la basura...—me explico mamá An, Paulina estaba detrás de ella. Ambas intentaban no llorar.  

—¿Que? No, están mintiendo. Eso, eso no tiene sentido. ¿como no notaria que estoy enferma? La simple mención suena ridícula.  

Sabia que An no mentía. ¿Por que mentiría? No tendría sentido eso. Volví a llorar, pero se sentía tan ajeno que apenas lo noté. ¿Como no me di cuenta de que estaba tan débil, de que estaba, muy probablemente, muriendo? Volteo a ver a Maya, no me atrevo a mirar a mis madres. Sin embargo An va y me pone su mano en mi hombro.

 —...Cuando Cam se entero de que enfermaste pospuso todo, pidió a los productores que lo esperaran un poco mas. No quería perder la oportunidad de grabar una película como...

 —¿Película?—pregunto sorprendida. Karan asiente. En este momento me siento culpable.

 —...Si, le ofrecieron ser el coprotagonista de una película increíble. Pero, repito, enfermaste y el no quería irse, pero tampoco abandonar esa oportunidad. Así que esperó. Luego te recuperaste, y sintió que era el momento de despedirse. Y luego llego la estúpida zanahoria y arruinó todo.

—Cameron solo necesitaba verte salir del hospital antes de irse a Canadá. Necesitaba asegurarse de que ya estuvieras mejor. Necesitaba despedirse.—dijo, por fin, Karan.

Cameron... se fue a Canadá. ¿Cuando llegara? No se. Depende mucho de la película, podría durar desde un año, hasta tres. No puedo, no puedo esperar tanto. Por fin nos arreglamos, lo pude besar. Le gusto y el me gusta. ¿Por que pasan estas cosas? Me dan mas ganas de llorar, pero me parece tan estúpido querer sollozar por un chico en lugar de por mi salud. 

[***]

No se cuando se fueron Chris y Alex. Igual no me importa mucho. An y Lina fueron a comprar algo de comer. Karan esta en la sala jugando con Gaby, parece que se llevan bien. Maya esta a mi lado, sentada. Y yo estoy tirada en el suelo, con las piernas dobladas de mi mejor amiga a mi lado. Tampoco se cuanto llevo aquí, tirada, o cuando se fueron mis madres, o cuando se pusieron a jugar con mi hermana. Es como si tuviera lagunas mentales. No es la primera vez que sucede. 

Se que en lugar de estar deprimida, lamentándome de mi mala suerte y salud, debería, al menos, intentar sonreír, mostrarle a mi familia y a Maya que estoy bien, que no deben preocuparse. Sin embargo solo lo pienso, no hago nada al respecto. Soy un asco, y no se si tengo las suficientes razones para odiarme y herirme mentalmente.

—¡Niñas, bajen, la comida ya esta!—escucho a mamá llamarnos. 

Maya se levanta mas rápido que yo. Me extiende la mano para ayudarme. La acepto. No quiero comer, no tengo apetito, creo que si como algo lo vomitare. Pero se que An no me dejara saltarme la comida, al menos no hasta ver que lo intente. 

—Vamos. Según las películas, la comida siempre ayuda.    

Intento sonreír ante el comentario de Maya, y la sigo.


¡Hey! Un pequeño aviso; después de este capitulo, los demás serán mas cortos pues no habrá mucho que hacer o decir. Al menos hasta que Cam regrese.

Ok, bye, bye.

  

La amiga de Maya.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora