Compañera (Minho Y Tú)

Capítulo 5

Minho me dedico una última mirada antes de salir corriendo al laberinto. Newt miraba como su amigo se iba hasta que desapareció de su vista, volteo hacía mi y me dedico una sonrisa.

—¿Gustas comer? Sartén ya debe tener algo, así que hoy comenzarás con Winston.

Caminamos a la cocina y nos sentamos alegremente a charlar mientras comíamos, poco a poco todos se fueron levantando. Newt me contaba anécdotas sobre los habitantes.
Había pasado el rato y mi cuerpo anelaba estar limpio.

—He...Newt..¿Me puedo..he..bañar?—Solte timida.

—Sí, ven.

Me llevo de nuevo a la finca y subimos los escalones ya no tenía tanto miedo de caer, entramos al cuarto. Newt busco unas cosas frenéticamente para luego bajar y dejarme plantada aquí como tonta. Al llegar Newt con una bolsa es sus manos me las extiende.

—Tienes todo lo que puedas necesitar eso creo, ayer vino junto a ti en la caja y Asumimos es tuyo.—Ya estaba revisando cada cosa de la mochila había dos sostenes deportivos, un royo de vendas, un cepillo de diente, jabón, un tubo de dentífrico y ropa ancha. Newt me miró un rato y se fue cerrando la puerta y dejándome sola.
Seguí rebuscando en la ropa y había unas cuantas cosas de mujer como ropa interior, Etc. Lo que me llamo la atención fue una nota.

Todo esto es para ti, te mandaremos suministros especiales para ti.
-A.P

Me tenía desconcentrada la nota, metí todo en su lugar me la puse al hombro y busqué a Newt pero no lo encontré en ningún lugar hasta que pensé en Nick. Lo busque frenéticamente hasta encontrarlo junto con un chico que recuerdo haberlo visto con Gally quizás sea Constructor el chico era rubio, también lo vi anoche cuando enterraron a Justin.

—¿Qué pasa Sca..Leo? —Habló Nick, el chico se me quedaba mirando extraño como una mezcla de odio y fascinación.
Me acerqué a su oído y le susurre.

—No encuentro a Newt y quiero darme una ducha.—concluí y me separe el chico se notaba confuso.

—Bien ¿te dieron la bolsa?—moví la mochila en señal de si—Ben, acompaña al nuevecito a darse una ducha y sigues con tu trabajo y no espies. —Dicho esto Nick se retiró.

—Cómo sea, me llamo ben y tu eres Leo ¿Verdad? —Asentí—¿No hablas? —Negué—excelente.

Me condujo hasta una cabina donde había unos tanques con agua. Me quite la ropa y la enganche en un clavo que sería un intento de percha, tenía un sostén deportivo negro, me lo quite y había una venda blanca alrededor de mi pencho hasta ahora no me daba cuenta lo apretada que estaba, me la fui soltando hasta que mis pechos dieron un respiro ¡Qué sensación ni más gloriosa! Lo colge junto a mi ropa y seguí desvistiendome, tome una jarra y deslice el agua sobre mi.
Ya había terminado de bañarme y lavarme los dientes, quizás no a todos les mandas estas "cosas especiales" guarde todo devuelta y me puse un sostén deportivo y otra camisa pero los mismos zapatos y el mismo pantalón.

Cuando termine salí y vi a Ben sentado en el piso jugando con un palito y la tierra. Me aclaré la garganta para llamar su atención y el abrió los ojos como plato, quedo en shock unos segundos se levantó y quedo frente a mi mirándome atento por mi parte estaba asustada de su reacción ¿Hice algo malo?
Me miró detenidamente el pecho luego subió y bajó la mirada.

—¿E..eres..una chica? —su pregunta me había aturdido no sabía que contestar miré mi pecho y se notaba más que ayer quizás por que no me puse la venda que los apretaba.—Eso no tienes que responderlo ¡es obvio que lo eres!—Gritó las últimas palabras y le tape la boca haciendo que callara.

—Por favor, no le digas a nadie o me ira muy mal. Newt,Nick y Alby me mataran ¿Puedes?—Lo miré con mi cara más triste para convencerlo pero solo recibí una sonrisa de parte de él. Aunque hizo algo que creí imposible en esta situación. Me abrazo.

—Shuck, shank creí que me estaba volviendo loco, esos pensamientos de que eras el chico más lindo del área me estaban volviendo loco.—Me soltó para mirarme a la cara, la cual estaba atónita por sus palabras.—Me alegra tanto que seas una estúpida chica.

—No soy estúpida.

—Claro que no lo eres, es una expresión.—Sonreia Ben—Ahora vamonos, pero tapete tus ejems—Miro mis pechos y luego a mi —¡Claro! Si es que quieres ocultarlos, usa esto —puso la mochila entre mis brazos y la abraze parecía que sólo sostuviera una bolsa y no estuviera ocultando algo—Perfecto.

Caminamos así un rato hasta que a Ben se le aflojó la boca y comenzó a hablar sobre todo tipo de temas, desde su trabajo hasta su razones de ser odiado. Llegando a la finca Newt aparece con cara entre enojado y asustado.

—¿Qué pasa?—Hablé yo.

—¡Leonardo! —Gritó Newt al darse cuenta de que hable.

—Él ya conoce mi "secreto" —Hice comillas con los dedos sin dejar de sostener la bolsa.

—Nick me pidió que la acompañara a bañarse, juro que no la espie ni por un segundo.—alzó su mano derecha en forma de juramento—Lo que la delató fue que se le notaron sus ejems y fue hay cuando la vi, le sugeri que usará la bolsa como escudo para protegerse.

Newt resoplo —Bien, Shank desde ahora también tendrás que cuidar a Scarlett y no dejar que haga otra Garlopada como hoy, confiaremos en ti y en cuanto tú—Me señalo—¿Por qué no me buscaste?

—Lo hice pero no te encontré y recurrí a Nick y Nick a Ben.—Explique.

—Bien, yo mejor me voy.

—Necesito un favor Newt, ven—Lo tome de la muñeca y lo subí hasta la habitación y me quite la mochila de enfrente. Newt pareció también notarlo ya que me miró y luego desvío la mirada apenado.—¿Sabes por que ayer no se notaban tanto? Por esto—saque la venda— esto aplastaba mis pechos hasta más no poder, pero no puedo ponérmelo sola necesito...necesito tu ayuda—desvie la mirada penada, ya que eso implicaría desnudar mi torso frente a él.
El asintió sin mirarme, le di la espalda y me quite el camisón junto con el sostén le pase la venda a Newt y el seguía con la mirada desviada aunque agradecía eso.

—No te tocaré...no de una forma fuera de la de ayuda. —volvió a posar si vista en mi, pero en mi espalda comenzó poniéndola venda desde atrás hacía delante y en una equivocación Newt rozo su manos con mi pecho izquierdo lo que yo solté un pequeño gemido por su tacto el de inmediato me soltó he hizo que la venda se cayera.

—Lo siento enserio, no quería, fue un accidente—se explicó Newt.

—Lo sé, solo hazlo rápido es incómodo.

Newt tomo la venda del piso y siguió con lo que había quedado esta vez con extremo cuidado.
Ya había terminado yo me vestí y al voltearme veo a un Newt tan rojo como tomate.