Prácticamente muertos

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Al salir de la tienda, la rodeé para no cruzarme con Shane de nuevo y no tener que darle explicaciones ni ciertas, ni falsas. No iba a encubrir más Lori diciendo que la que esperaba un bebe era yo, pero tampoco iba a airear el secreto por ahí.

Andé en dirección de la parte trasera de los establos y dejando atrás la casa me senté detrás de un árbol para que nadie pudiera dar allí conmigo hasta que no se hubiera dado por finalizado el tema del bebe.

Me quedé allí sentada con las piernas cruzadas viendo la puesta de Sol y como poco a poco, el bosque se iba oscureciendo. Con la poca luz que quedaba, empecé a levantar la costra de la herida que me había hecho afilando mi cuchillo, la cual había curado Daryl.

En mi mente se dibujo su cara, el como me había defendido de Shane la última noche del campamento, la noche en el Centro de Control de Epidemias, cuando casi nos besamos en el bosque buscando a Sophia y como me llevó en brazos hasta la cama de la autocaravana, la cara de Andrea al salir de su tienda esa mañana.

Al recordar ese acontecimiento, volví a sentir el mismo coraje que varias horas antes, provocando que arrancara la costra de un tirón, dejando la piel irritada. No sabía porqué me molestaba tanto que Daryl estuviera con Andrea o con cualquier persona. Él no era nada mío, al igual que yo no era nada suyo.

Envuelta en mis pensamientos, no me di cuenta de que la noche fue avanzando hasta que ya estaba bastante cerrada. Cuando decidí que ya era bastante tarde, me levanté para ir hacía la granja de nuevo, pero de pronto escuché ruidos más internados en el bosque. Puse mi mano en el cinturón en busca de mi pistola, pero no estaba allí. Entonces recordé que se la había dado a Carl para que se la quedara él para después coger una para mi, pero con todos los acontecimientos de la tarde se me pasó hacerlo.

Cogí mi cuchillo del otro lado de mi cinturón y me acerqué a la fuente de los ruidos, para averiguar si era un caminante, pero estaba tan oscuro que apenas veía mis pies. Aún así seguí andando hacía delante hasta que me choqué con alguien y ambos acabamos en el suelo.

- ¡Joder! - se quejó la voz de Daryl.

- ¿Estás bien? - pregunté yendo hacia él para ayudarle a levantarse.

- ¿Se puede saber dónde cojones estabas y porqué no has dicho que te ibas? - inquirió ignorando mi pregunta y dejándose ayudar.

- No quería que Shane supiera dónde estoy, además ¿desde cuando te importa dónde vaya? - dije recordando que estaba enfadada, apoyé su brazo sobre mis hombros y empezamos a andar hacía la granja

- ¿Porqué? ¿No es el padre de tu hijo? - preguntó tajante.

- No - contesté secamente.

- ¿Entonces soy yo? - preguntó parando en seco.

- Daryl, no estoy embarazada - sentencié - Lori lo está, simplemente la estaba encubriendo y se me ha ido un poco de las manos.

Hizo ademán de seguir andando, pero no habló.

- ¿Pensabas volver en algún momento?

- Cuando alguien gritara mi nombre - admití.

- Es peligroso que vayas por ahí sola.

- Sé cuidarme sola, Daryl.

El silencio se volvió hacer presente, pero al llegar a los establos hable:

- Lo has escuchado antes ¿no? A Maggie y a Shane - dije andando con su brazo todavía sobre mis hombros.

- Sí, luego salí para hablar contigo pero nadie sabía donde estabas.

FIGHT THE DEAD FEAR THE LIVING - Fanfic The Walking Dead - Daryl DixonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora