El Cuento De Un Dragón (Bloom)(Editando)

Capítulo 5

-¿Podemos por favor descansar? Hemos estado caminando durante horas, - El príncipe Sky hablo detrás de Bloom, exhausto.

Eso era cierto; habían estado caminando sin parar atravesando los bosques, luego de su encuentro con los lobos. Le siguieron horas y horas de caminar a paso rápido, el príncipe se apuraba para mantenerse al frente con Bloom mientras ella caminaba hacia adelante sin mirar atrás. Horas de silencio, en las cuales Bloom se negó a hablar con el príncipe, no estaba segura de lo que iba a hacer. Una parte de ella estaba dispuesta a desempeñar el papel de amigos. Una parte de ella todavía estaba herida por sus duras palabras, y deseaba que ese sentimiento se detuviera. Era desagradable sentir cosas. Ella nunca había tenido este tipo de problemas antes, y estaba molesta por decir lo menos. Por lo general, disfrutaba jugando con su presa; por lo general podía convencerse de que los extranjeros y los viajeros no significaban nada para ella. Todavía estaba tratando de averiguar por qué este príncipe era tan diferente, y hasta que lo hiciera, era mejor no hacerle caso para que accidentalmente no hiciera su condición peor.

Pero Bloom no podía pasarlo por alto esta vez. Podía oír la calidad tensa en las palabras del príncipe, y su oido reforzado podría escuchar una pequeña respiración entrecortada de parte de él. Un poco más de tiempo en este calor, moviéndose tan rápido, e iba a morir de un derrame cerebral. No es que su muerte no fuera su objetivo final, pero no era así como quería que sucedieran las cosas. Por alguna razón, ella no quería dejar pasar el momento. Por lo tanto, ella se detendría.

Utilizó su visión para explorar el área por delante. El sol se ponía poco a poco, y pronto sería la noche por lo tanto tendrían que detenerse de todos modos.

-Hay un valle más adelante. Podemos parar allí por la noche-, dijo Bloom, sin siquiera mirar sobre su hombro para asegurarse de que el príncipe podía oírla.

-¡Finalmente, la mujer habla!-el Príncipe gritó al aire, inclinandose hacia adelante para descansar brevemente sus manos sobre las rodillas, tratando de obtener la última gota de fuerza que necesitaba para llegar al valle. -¿Está realmente tan molesta conmigo por salvar su vida que se niega a hablar conmigo?-

Bloom puso los ojos en blanco, luchando contra el impulso de decir algo sarcástico como respuesta. Típico de los hombres, necesitan gratificación por hacer algo, ella no causó el problema en primer lugar, no era su culpa que él atrajera la atención de los lobos y ella podría haber manejado muy bien la situacion por si misma; lo había estado haciendo durante años, y su presencia no la convertía de repente en una dama en apuros.

Sin embargo, el príncipe Sky debe de haber interpretado su silencio como más desprecio, porque lo oyó suspirar más fuerte, diciendo: -Ya estamos otra vez, ¡negándose a reconocer que existo! Yo podría colapsar en algún lugar, y usted ni siquiera se molestaria en mirar.-

-Guarde su aire, Alteza. Lo necesitará para llegar al valle - Bloom respondió con sequedad, perdiendo su paciencia y moviéndose más rápido para estar más lejos de él.

- Cuanto desprecio- el príncipe Sky comentó, a pesar de que parecía divertido, y también orgulloso de negarse a tomar su consejo y no permanecer en silencio. -Dime, ¿Qué he hecho para ofenderte?-

-Usted no ha hecho nada para ofenderme - Bloom respondió con cansancio, pensando que si ella finalmente cedía, entonces él finalmente se callaria. -Sólo que no veo ninguna razón por la que tengamos que hablar, y además me gusta el silencio.-

-Bueno, no puedo hablar por usted, pero por mi parte, me gustaría llegar a conocer más acerca de la mujer que salvó mi vida.-

-No hay nada que saber- dijo Bloom, sin revelar nada al igual que de costumbre.