maratón 1/?

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Trompetas sonaron por los pasillos del palacio real de Eraklyon, señalando la llegada de su amado príncipe.

Los aldeanos y gente del pueblo acudieron a la plaza principal, justo fuera de las puertas del palacio, en espera de que su príncipe atravesara la gran puerta de piedra con su princesa a su lado. No estuvieron decepcionados, porque él se precipitó en una ráfaga de cascos y banderas, una belleza rubia sentada detrás de él en el caballo blanco con los brazos envueltos firmemente alrededor de su cintura. Las personas vitorearon. Su príncipe era tan valiente, tan noble, y una vez más, victorioso.

Las puertas se abrieron, y el príncipe y su escudero se remontaron en los confines del palacio. Todos los sirvientes se habían alineado en los escalones de la entrada para saludar a su amo, cada uno se inclinaba al pasar junto a el, con su princesa a su lado. Eran una pareja tan pintoresca, tan justa de cabello y piel, ambos fabricados para la vida real. No podría haber sido un mejor partido.

-Veo que su viaje fue un éxito.- comentó su padre jovialmente cuando la pareja entró en la sala principal. Sus padres estaban sentados en sus tronos, sonriendole. Estaba feliz de haberlos hecho sentir orgullosos.

-Haz encontrado la torre, derrotado al dragón, y trajiste de vuelta a la princesa, del mismo modo que te propusiste hacer- estuvo de acuerdo, sólo se estremeció ligeramente cuando gran parte de su padre cayó sobre su hombro, sacudiéndolo.

-No podría estar más orgulloso de ti, hijo mío- dijo su padre, y el príncipe Sky asintió, un poco nervioso bajo toda la tensión. En su lugar, optó por quitárselo de sí mismo y colocarlo en alguien que parecía estar desesperada por llegar a ella.

-Madre, Padre,quiero presentarles a la princesa Diaspro de Isis, mi futura esposa.-

Diaspro se adelantó y dio una profunda reverencia, casi cayendo al suelo a los pies de los Reales. -Es un honor conocerlos, Majestades.-

-El honor es nuestro, princesa - el Rey Erendor extendió la mano para tomar las manos de Diaspro, llevándola hasta estar junto a ellos.

-Va a ser una princesa bienvenida a nuestra familia- la Reina Samara pavoneó - Una pareja encantadora. ¡El reino entero va a celebrar!-

-Una idea maravillosa, querida -el Rey Erendor acordó, llamando al pregonero. -Que se decrete de inmediato que mi hijo, el príncipe Sky de Eraklyon, ha regresado a casa con seguridad, y con su futura esposa. ¡Tal ocasión requiere una celebración!-

La alegría se desbordó por los pasillos, todo el mundo parece un hervidero con la perspectiva de una nueva princesa y una fiesta.

-Usted dos serán yn matrimonio oficial en el final de la semana, ¡dentro de seis día!- el rey anunció, y el chisme corrió a través del personal para el horror de Príncipe Sky .

-¿Tan pronto?- dijo, sin saber si es que  estaba listo para contraer matrimonio tan rápidamente con una mujer que era prácticamente una desconocida para él. Claro, él la había rescatado que se case con ella ... con el tiempo. O, al menos eso era lo que él había asumido.

-Bueno, ¿por qué no? Usted se aman, ¿verdad? Entonces no debemos esperar más.-

-Pero Padre...-

-Oh querido silencio- su madre lo interrumpió, pellizcando sus mejillas. -No se ajusta a un príncipe tener pies fríos.-

-Creo que es una idea maravillosa- dijo Diaspro, prácticamente radiante ,ella se colgó de él como una sanguijuela.

-Ve, al menos, su esposa, es sensible,- dijo el Rey Erendor, otra carcajada que sale de sus labios. -Relájate Sky. No tienes nada de qué preocuparte. Al final de la semana, usted se casará, y pronto después de eso, sera rey. Es todo lo que siempre quiso.-

Él no tenía el corazón para corregir a su padre y decir que todo era lo que su padre alguna vez ha querido para él. El hombre no lo escucharía de todos modos. Estaba demasiado centrado en sus caminos, y no le dejó hablar de su salida de éste. Si su padre dijo que iba a casarse en seis días, luego se iba a casarse en seis días. Bien podría resignarse a ese hecho ahora.

-Sí padre. Tienes razón, como siempre.-

- Hijo mío- su padre le abrazó la espalda, contento de su vuelta alrededor. -Ahora, vamos a hablar de la logística de esta boda ...-

El Príncipe Sky dejó escapar un suspiro desenvainado y pesado. Esto definitivamente no era como él se imaginaba a su gusto.

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El Cuento De Un Dragón (Bloom)(Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora