ELLOS VAN A LAMENTARLO #1 (Yandere Boy)

Eficiente

- Hola, Adrien - Dice mi padre cuando entré en la limusina.

- Hola, padre - Respondo sentándome.

- Al parecer tuviste un accidente - Acto seguido toma un sorbo de agua.

- Así parece, ¿Te lo dijo Marinette?

- En efecto, es muy agradable.

- Lo sé - suelto un suspiro.

- Estás saliendo con ella ¿Verdad?

- Si.

- Interesante - Presiona un botón para cerrar la ventanilla que nos conecta con la cavidad del conductor. La limusina comienza a avanzar.

- ¿Cómo te sientes?

- Como si ella fuera lo más valioso de mi existencia.

- Hablaba del accidente ¿Estás bien?

- Oh, si, solo fue un pequeño golpe, Marinette me ayudó a llegar al hospital.

- ¿Y ya sabes que lo ocasionó?

- No.

- ¿Recuerdas algo en particular?

- No.

- ¿Cuando pasó estabas con Marinette?

- Si. En las dos ocasiones - Suspiro.

- ¿No has pensado que podría ser la culpa de esa chica?

- ¿¡Qué!? Claro que no

- Es mucha coincidencia - Da un último sorbo a su vaso y la limusina se detiene, salimos y me dirijo algo confundido pero sobre todo ofendido Marinette jamás haría eso, ella es tan perfecta, linda y amable, no le haría daño ni a una mosca.

Suena mi celular.

- ¿Si? - Contesto.

- Hola, modelito - Reconosco esa voz de inmediato, era la chica del hospital - Hoy comienzas.

- ¿C-comienzo? - Digo confundido por supuesto que sé de que habla, pero ¿justo ahora?

- ¡Lo dejamos en claro, eres mi asesino! - Su tono de voz se vuelve tosco.

- Ok ok - Intento calmarla, ella suspira muy profundo.

- Bien, ¿Conoces a Mattew Leffië?

- No.

- Perfecto, vive en la 5 y 7 de la calle Libertad, su casa es color rojo. Lo quiero muero para mañana.

- ¿Qué? ¿Es tu ex o algo así?

- Eso no te incumbe.

- Vamos, el chico va a morir, no divulgaré tus secretos raros.

- Es mi padrastro. Ex padrastro. Dejó a mamá, le juró que ella sería la ultima mujer a la que amaría tanto. Que así sea.

- No te preocupes, lo será - Cuelgo y me escabullo a la cochera.

Pensándolo bien, creo que iré caminando. Tomo un cuchillo de la cocina y lo escondo en un saco grande y acolchonado que paso a ponerme. Salgo por la puerta principal, ¿Por qué me preocupo? Nunca hay nadie.

Me dirijo a la calle y localizo la casa. Toco la puerta.

- ¿Quién es? - Pregunta un señor tras la puerta.

- La pizza - Respondo sin pensar.

- Yo pedí ninguna-- No termina su frase ya que mi cuchillo es ochavado en el lado derecho se si garganta. El hombre con sus últimos alientos retrocede e intenta tomar lo primero que tenga a la mano para lanzármelo, yo solo avanzo a su ritmo aun con mi mano en el cuchillo incrustado, toda la sangre se resbalaba por sus hombros y él seguía horrorizado, no logra tomar nada y comienza a poner los ojos en blanco, suelto el cuchillo y el sujeto cae ensangrentado y muerto al piso. Lo miro detenidamente, estaba solo en ropa interior, tenía un boxer de color azul, y un manga cero blanco, ahora todo estaba cubierto de sangre, claro, sus ojos sin vida apuntaban al techo, de su boca salía micha sangre y sus dientes amarillos le daba una apariencia desagradable. Comienzo a rodear al cuerpo. En definitiva no estaba en forma. Me asomo a la puerta algo nervioso.