Capítulo 4

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Dedico este capítulo a @Everrfk ♥



Amelia.

Corrimos, bajamos las escaleras y al encenderse las luces...mi madre...en un charco de sangre...era la peor escena que pude ver...me quedé allí paralizada...con mi mundo totalmente detenido...tratando de acomodar las cosas en mi cabeza...

¡Amelia! ¡Llama a emergencias! Gritaba mi primo, yo escuchaba todo tan lejos, tan bajo... Mi mente, mi cuerpo...yo no reaccionaba al ver tanta sangre...

¡Amelia! Gritó él una vez más...Hasta que por fin...¡había reaccionado!

Tomé el teléfono y llamé a emergencias, tratando de contener mi llanto.

Narrador.

Se fueron los tres en la ambulancia, al llegar al hospital Amelia comenzó a gritar y llorar sin compasión, tenía tanto miedo al ver la figura de su madre alejarse, en una camilla, con tubos y un respirador...de allí dependía su vida...

Amelia se quedó sentada en la sala de espera en tanto su primo traía unos bocadillos y refresco...pero ella no quería estar sentada...

Comenzó a escabullirse para entrar a los pasillos de la sala de traumatismos, ya que allí se encontraba su madre, pero se encontró con algo aún más interesante...

Al llegar al frente de la sala donde estaba su madre, una chica en silla de ruedas le dio un gran susto...

No deberías estar aquí –Le dijo Emiliana-

¡Ay! –Gritó sorprendida Amelia-

Shh ¿estás perdida? -Le preguntó-

No es que... mi mamá...-trató de explicar-

Ooh...comprendo –Le respondió algo triste-

Oye...yo te conozco... ¡tú eres la chica que salió gravemente herida de la casa de la calle Stanford!

¿Tú fuiste la que llamó a emergencias? –Preguntó sumamente sorprendida-

Pues...yo...ah...si –respondió ruborizándose un poco-

Gracias...literalmente te debo la vida –Dijo Emiliana dándole un abrazo-

Oye –respondió ruborizándose aún más- yo... yo sólo marqué el número en el teléfono...que... ¿qué tanto es eso?

Para mí –se separó de ella y mirándole a los ojos terminó su frase- mucho

Bueno...fue un placer haberte ayudado... ¿cómo te llamas?

Me llamo Emiliana ¿tú cómo te llamas?

Mi nombre es Amelia.

Hey, creo que deberías irte.

-Amelia dio un vistazo a la sala, dio un suspiro- Si... tienes razón.

Tu mamá de seguro está en buenas manos Amelia.

Si...adiós Emiliana y...gracias.

Al alejarse y llegar al ascensor estaba allí...

Helen estaba esperándola allí....

Ay cariño-Dijo ésta dándole un fuerte abrazo- supe lo de tu mamá

Helen al abrazar a Amelia miró al frente, estaba Emiliana allí, petrificada, viendo a la mujer de sus pesadillas abrazando a la chica que le salvó la vida, quería gritar, quería advertirle...Pero ni un susurro salió de su boca.

Helen, pasó su mano por el hombro de Amelia y junto a ella tomó el ascensor...

Emiliana tomó aire y sólo pensaba en Josh, tomó muy fuerte las ruedas y fue en busca de Josh.

Josh estaba un poco mejor, de a poco iban sanando sus costillas fracturadas, ahora por lo menos podía estar sentado, en ese momento su madre estaba trabajando y el estaba viendo la tv.

Emiliana se encontró a su padre por el camino, pero ella sólo le dijo que iría al baño y que no necesitaba ayuda, sentía que el corazón se le iba a salir, la adrenalina fluía a toda velocidad a través de su cuerpo, sus manos temblaban y sudaba a cántaros...

Josh ¿estás despierto?

¿Emiliana?

Josh...está pasando algo de nuevo...

Espera... ¿cómo algo de nuevo?

Sus rostros palidecieron...

Tenemos que llamar a los doctores...tu...tú debes irte –Josh comenzaba a retorcerse tratando de hacer algo útil-

Shh Shh Josh, tranquilo, no es con nosotros...

¿Y con quién?

Con la chica que nos salvó la vida....hay que devolverle el favor

Habitación 999Donde viven las historias. Descúbrelo ahora