- La castaña se viene conmigo - abrazo a Rebeca y subo con el hombre al coche - muy bien guapa, antes de vender mercancia, tengo que probarla - el coche se pone en marcha - cuando lleguemos, te probaré - agarra uno de mis mechones y lo pasa por deba...
Hace más de tres meses que Matías me pidió matrimonio, hace cuatro meses me enteré de que estoy embarazada y tres años junto Matías.
- Princesa - sonrío al escuchar ese apodo - ¿en que piensas? - acaricia mi cintura suavemente.
- En nada, la verdad - lo abrazo, sientiendo los latidos de su corazón en mi mejilla - ¿qué nombre quieres para nuestro bebé? -
- Había pensado en algunos -
- Dímelos - besa mi cabeza.
- Está bien - se acomoda - si es niño, me gusta Etienne - lo miro con curiosidad - es francés, significa corona - asiento - y si es niña, me gusta Keyla, de origen griego - acaricia mi pelo.
- ¿Qué significa? - pregunto curiosa.
- Bella - susurra con una sonrisa en el rostro - ¿te gustan? - asiento.
- Son preciosos - beso su pecho desnudo - ¿qué quieres comer? -
- No se por que, pero hoy me apetece comer en un restaurante - asiento - pero antes ... - me eleva en el aire y me coloca a horcajadas de él.
- Jajaja - beso sus labios sin prisa, me separo un poco y lo miro a los ojos - te amo -
- Yo más mi niña - me abraza - yo más - besa mi hombro.
~Meses después~
- Matias, ¿puedo ir al centro comercial? - pregunto con cara de niña buena.
- Claro, pero iré contigo - se levanta de la cama, se viste y me abraza con una sonrisa en sl rostro.
Salimos de casa, nos subimos al coche y conduce hasta llegar al centro comercial, donde hay mucha gente entrando y saliendo. Bajamos del coche y, literalmente, lo arrastro conmigo a unas quince tiendas.
- Amor - lo llamo con voz de niña.
- Dime - contesta con voz algo agotada.
- Tengo hambre - suspira - me apetecen fresas con nata - asiente. Caminamos hasta llegar a una especie de heladería, pedimos fresas con nata y, mientras esperamos, siento algo líquido caer por mis piernas - Matías -
- ¿Qué pasa? - pregunta.
- El bebé - abre los ojos como platos, me coje en brazos como princesa y empieza a correr conmigo en brazos hasta llegar al coche, arranca y nos lleva a toda velocidad al hospital, donde nos atienden rápidamente.
~Horas después~
PDV.: Matías
Cuando Ángela dijo "el bebé", la traje al hospital. Entré con ella a la sala de partos y dió a luz a mi pequeño Etienne, pero después de que Ángela haya visto a su hijo, se sentía muy cansada y me echaron fuera de la habitación, por lo que aproveché para llamar a la familia dándoles la noticia y ahora estamos todos esperando a que nos permitan pasar a verla.
- ¿Y cómo se llamará? - pregunta mi madre emocionada.
- Etienne - sonrío al igual que ella.
- ¿Le pusiste el segundo nombre de tu padre? - asiento - le gustará mucho la noticia -
- ¿Sigue en Francia? - pregunto curioso.
- No, ya llegó, pero tenía una reunión y dijo que llegaría lo antes posible - asiento.
- Familiares de Ángela Torres - dice el doctor.
- Nosotros - decimos mi madre y yo al unisono.
- Ya pueden pasar a ver a la paciente - sin dar un gracias, corremos por el pasillo hasta llegar a su habitación.
- Hola hermosa - sonrío.
- Hola - contesta ella sonriente.
- ¿Dónde está mi nieto? - pregunta mi padre entrando por la puerta.
- En la cuna - digo. Se acerca a la cuna, sonríe y coje a su nieto en brazos.
- Es precioso, como su abuelo - le da besos en la mejilla haciendo que Etienne sonría - ¿cómo se llama? -
- Etienne Smith Torres - dice Ángela sonriente. Mi padre sonríe, se acerca a Ángela con Etienne en brazos y la abraza.
- Es precioso - susurra mamá.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.