aunque tenga que encerrarte

propiedad de un bastardo

Sasuke apretó los puños con fuerza, era consciente de que tarde o temprano se enterarían de la existencia de su familia pero no esperaba que aconteciese tan pronto, si Sai era él culpable de esto lo pasaría muy mal...

- ¿Cómo te enteraste? – preguntó Sasuke tratando de mantener la calma

- estuve revisando los registros familiares – dijo el patriarca de los Uchiha – tu hermano por fin contraerá nupcias con Deidara dentro de un mes, por ello revisé los registros, me llevé una sorpresa no del todo grata – al fondo seguían escuchándose murmullos – quiero conocer a Sora y a Eiji Uchiha

- tres meses después de que Naruto cumpliera un año de muerto…¿no te parece una falta de respeto? – preguntó Sasuke, hubo unos instantes de silencio antes de que Fugaku contestara, por otro lado Sai se había salvado

- tú te casaste dos meses y medio después de que tu mejor amigo muriera y me llamas a mi irrespetuoso – respondió el más viejo notablemente enojado, Sasuke guardó silencio – además los Namikaze Uzumaki concedieron su permiso para las nupcias de Itachi, debo decirte que ellos también se sorprendieron mucho al saber que estabas casado…

- yo no comparto mi cama con nadie llamado Sora – dijo Sasuke interrumpiendo a Fugaku, era cierto, la persona con la que compartía su cama era alguien llamado Naruto – fue un matrimonio por intereses, el buscaba dinero y yo buscaba un primogénito, mantenemos el matrimonio pero él se fue desde que Eiji nació y espero que no vuelva

- Sasuke… - escuchó la voz de su madre, ahora si lo sabía con certeza, el celular estaba en altavoz, en ese momento un pikachu gigante entró en el despacho con Eiji en brazos, Sasuke le miró por unos instantes mientras la línea se mantenía en silencio, después de lo acontecido con Sai tenía la confianza de que Naruto no le abandonaría, el mismo Sasuke puso el celular en altavoz dejándolo en su escritorio frente a el mientras Naruto se sentaba en el sillón frente al escritorio a escuchar en silencio – hijo queremos que regreses… - la voz de Mikoto Uchiha sonaba suplicante

- ¿para qué? – preguntó Sasuke de forma seca

- queremos que asumas la vicepresidencia de la empresa, me jubilare y Itachi tomara la presidencia – fue lo que dijo Fugaku, Sasuke apretó los dientes furibundo

- con once años asumí la presidencia de la empresa familiar y la llevé a su máximo apogeo volviéndola de las más importantes del mundo – Sasuke empezó a reír, Naruto dejó a Eiji en el sofá y empezó a quitarse el disfraz de pikachu – ¿y ahora me pides que seda a un cobarde que desapareció y no tuvo idea de nada por varios años aquello por lo que sacrifiqué parte de mi vida? Siempre me has dicho que los Uchiha somos una familia orgullosa y que debíamos cuidar eso que nos hacia Uchihas…y ahora vienes tú y pisoteas mi orgullo solo por darle los favores a Itachi – las personas al otro lado de la línea se mantenían calladas, Naruto dejó el disfraz de pikachu y volvió a cargar a Eiji para caminar a donde Sasuke estaba, el rubio llevaba puesto un suéter color naranja y unos jean oscuros, estaba descalzo a causa del disfraz – ¿te estas burlando de mí?

- ¡Sasuke! – fue lo que dijo su padre sorprendido por las palabras de su hijo menor – sin importar las circunstancias no permitiré que le faltes el respeto a tu hermano mayor – dijo Fugaku con voz seria, Naruto llegó donde Sasuke solo para sentarse en las piernas del mayor aún con Eiji en brazos, el azabache le abrazó por la cintura y enterró la cabeza en su cuello inhalando el aroma del doncel para calmarse, podía escucharse sollozos al otro lado de la línea, le reconoció fácilmente, era Deidara, “¿acaso era idiota?” pensó Sasuke, nada de lo que estaban hablando daba para llorar, hasta el mismo Naruto se encontraba tranquilo

- hijo no es para que te lo tomes a mal – habló esta vez Mikoto – solo queremos conocer a tu familia además sabes que el mando siempre lo hereda el primogénito, es tradición

- y pueden seguir con su tradición, llegados a este punto no le veo ningún problema pero quiero dejarles claro que no tengo intención de regresar – habló Sasuke con voz fría ya más calmado, la presencia de Naruto le estaba ayudando a controlarse

- Sasuke – el mencionado pudo sentir como Naruto tembló al escuchar esa voz, el azabache no pudo hacer más que abrazarle a modo de ruego silencioso para que no dijera nada y se mantuviera callado, aun así la voz de Minato Namikaze caló hondo en el doncel – entiendo que la muerte de nuestro hijo te haya afectado tanto pero estoy seguro que él no hubiera deseado que te separases de tu familia – Naruto miró a Sasuke a los ojos asintiendo, afirmando lo que Minato decía, el mayor acarició la mejilla del rubio

- algo que Naruto nunca supo es que yo ya no siento apego hacia mi familia – dijo Sasuke, Naruto seguía mirando a su marido a los ojos dándole a entender que se lo imaginaba – quizá cuando era niño pero ahora no

- ¿tanto amaste a mi bebé? – esta vez fue Kushina quien habló  

- le amo y le seguiré amando – respondió Sasuke mirando a Naruto a los ojos, este se sonrojó

- gracias muchas gracias… - se escuchó llorar a la pelirroja al otro lado de la línea, también se pudo distinguir claramente como Minato la consolaba, el rubio sintió las ganas de llorar y decir el nombre de su madre pero se contuvo – pero no puedes seguir persiguiendo un imposible…

- por eso me casé tan pronto con aquel que según los registros se llama Sora Uchiha – respondió Sasuke, Naruto entendió el doble sentido y apoyó la cabeza en el pecho de su marido, Eiji les miraba atento – podrían por favor apresurarse, estoy bastante ocupado – avisó Sasuke con voz fría

- al menos déjame conocer a mi nieto – pidió Mikoto

- te enviaré una foto – respondió Sasuke de forma puntual – cuando crezca posiblemente lo envié de visita

- gracias hijo – dijo Mikoto con la voz temblorosa - ¿vendrás al matrimonio de tu hermano?

- tales cosas no me interesan – dijo Sasuke

- Sasuke al menos podrías decirnos ¿dónde estás? – pregunto Itachi, Sasuke rió

- hasta que te dignas a hablar… - dijo el azabache apretando los dientes – tu desapareciste durante varios años huyendo de tus obligaciones y aún hoy desconocemos el paradero que tuviste durante esos largos años y ahora vienes a preguntarme a mi donde me encuentro, cruzas limites, al menos yo no dejé nada pendiente – Itachi se quedó callado, en ese momento Sasuke escuchó como Deidara empezaba a llorar aún más fuerte – por favor calla a la rubia…

- ¡a mi me puedes insultar cuanto quieras pero no permitiré que te metas con Dei! – respondió Itachi casi gritando

- hasta que por fin el primogénito irresponsable sacó los dientes – dijo con burla Sasuke

- ¡Sasuke basta! – le regañó Fugaku

- a mí nadie me manda a callar…ni tú, ni mi madre, ni Itachi – respondió con una voz peligrosa y fría que le erizaría la piel a cualquiera – en vez de estar perdiendo el tiempo vallan a ascender a Itachi al puesto que usurpó y festejen ignorando el luto – en ese momento Naruto le dio un golpe suave a Sasuke en la cabeza y este se calló, entendió que se estaba dejando llevar demasiado por su ira, durante unos instantes reinó el silencio – llámenme para asuntos más importantes – dijo el azabache para después colgar

- no te gusta hablar de tu pasado así que no preguntaré – dijo el rubio, Sasuke solo pudo abrazarle con cuidado, Eiji se había quedado dormido en los brazos de Naruto – pero parece que tendremos que comprar un saco de boxeo – Sasuke asintió en silencio, se quedaron unos instantes ahí – voy a acostar a Eiji…

Naruto se levantó de las piernas de Sasuke para ir a los sofás, sacó de la mochila azul que siempre llevaba consigo unas cuantas mantas, Sasuke se puso de pie y se acercó a su pequeño esposo tendiéndole las manos dispuesto a sostener al bebe mientras el acomodaba el sillón para acostarlo, Naruto agradeció el gesto y le entregó él bebé para empezar a acomodar las mantas y almohadas de manera que él bebé no pudiera caerse

- por un momento pensé que hablarías pidiendo ayuda… - dijo Sasuke mas como un susurro mirando al pequeño Eiji dormido en sus brazos

- dije que no te dejaría dattebayo tenme más confianza – dijo Naruto terminando de acomodar las almohadas para después tomar a Eiji y acostarlo, el pequeño bebé dormía plácidamente, Naruto sonrió y fue al escritorio a buscar el celular de Sasuke

- confió en ti solo… tengo miedo – lo último Sasuke lo dijo más bien como un susurro, Naruto regresó con Sasuke y se puso de puntillas, aún así tuvo que atraer a Sasuke hacia el para que el alto azabache se inclinara un poco y así poder depositar un beso en la frente del mayor

- ese es un miedo infundado ttebayo – dijo Naruto para después con el celular de Sasuke tomarle una foto a Eiji y empezar a teclear en la pantalla

- ¿a quién le estas enviando la foto? – pregunto Sasuke sentándose en el otro sillón

- a Mikoto- san – respondió Naruto para después sentarse al lado de Sasuke – se veía con muchas ganas de ver a Eiji…por cierto Suigetsu te envió un mensaje – Naruto le pasó el celular al azabache, este lo recibió y abrió el mensaje para leerlo rápidamente, se trataba de un mensaje muy corto y preciso

“David Medina acepto la propuesta”

- ven – Sasuke dejó el celular en la mesa más cercana y rodeó a Naruto por la cintura para atraerle hacia él, Naruto se dejó hacer y también le abrazó con una sonrisa en el rostro – Naruto…

- ¿Qué sucede Sasuke? – preguntó el rubio cerrando los ojos para sentir mejor las caricias que su marido le daba a su cintura

- dime que no me abandonaras… - pidió Sasuke mirando los ojos azules con suplica – júralo

- pero teme si tú sabes que… – Naruto fue interrumpido

- aún así necesito escucharte decirlo – susurró Sasuke

Naruto le regaló una sonrisa maternal a Sasuke que le miraba suplicante y triste antes de sentarse a horcajadas sobres las piernas del azabache, lo abrazó por el cuello y unió sus labios con los contrarios en un beso tierno, un roce de labios bastante dulce sin segundas intenciones de por medio que demostraban el amor puro del rubio hacia su marido, se separaron al poco tiempo sin querer hacerlo, el rubio juntó su frente con la de Sasuke, ambos sintieron como sus respiraciones chocaban con la otra, Naruto volvió a sonreír de forma dulce y tranquilizadora

- te juro que jamás me separare de tu lado Sasuke ya que yo te pertenezco – dijo Naruto acariciando las mejillas de Sasuke quién no pudo evitar sonreír aliviado, aquella ultima parte el rubio la agregó sabiendo que era lo que Sasuke en verdad buscaba, el azabache era muy posesivo, el decirle que se quedaría a su lado no serviría para calmarle, hacía falta hacerle saber que él era su dueño – yo soy tuyo Sasuke… - susurró el rubio notando el efecto que aquello causaba en el azabache, Sasuke estaba sorprendido, se quedó un rato con los ojos bien abiertos para después mostrar una sonrisa que ni el mismo Naruto había visto, por primera vez Sasuke se veía realmente feliz, el doncel sintió como el mayor le abrazaba con fuerza enterrando la cabeza en su cuello

- gracias Naruto… - susurró Sasuke con un notable tono aliviado, Naruto sonrió y empezó a acariciar los mechones azabaches con delicadeza y cuidado maternal – de verdad gracias… - volvió a susurrar el azabache abrazándole más fuerte, Naruto se había dado cuenta de lo que en verdad necesitaba aunque él no se lo había dicho y había acertado, lo que Sasuke de verdad buscaba era que el rubio fuese suyo por completo, ahora que por fin lo había logrado se sintió por fin liberado

- yo que dije que jamás le pertenecería a ningún varón y mírame ahora…declarándome propiedad tuya…bastardo… - susurró Naruto algo indignado, Sasuke rio abrazándole