aunque tenga que encerrarte

imprescindible

Laura su secretaria personal estaba sentada a su lado ayudándole a organizar los informes, su tío Itachi seguía ahí, sentado, sin hacer nada, solo haciendo montón y calentando el sofá, Eiji ya le había dicho de forma suficientemente directa que se fuera pero o Itachi era un retrasado incapaz de entender algo tan simple o lo hacía de forma intencional para acabar con su paciencia volátil, al parecer su secretaria era consciente de su estado pues trataba de distraerlo con los papeles que contenían los ingresos de los últimos días, justo en esto se estaba concentrando, era lo que más le importaba, aún así seguía viendo por el rabillo del ojo a su odiado tío quién sacaba del bolsillo su celular y lo revisaba, notó aquella cara extrañada y preocupada, el niño escuchó el audio proveniente del celular del mayor, parecía ser un video

A medida dicho video avanzaba supo de qué se trataba, mencionaban el nombre de su tío peli teñido al comienzo por lo que no cabía duda, el estúpido de su tío Itachi había puesto el audio a todo volumen permitiéndole escuchar la entrevista, aún así, Eiji se hacia el desinteresado del tema, era la mejor postura a tomar pues el solo quería ver como se desarrollaban los sucesos, al final del video Itachi volvió a guardar el celular en el bolsillo de su pantalón y se levantó marchándose a paso rápido, una sonrisa se dibujó en el rostro de Eiji Uchiha Namikaze al ver la expresión adolorida de su tío Itachi  

- Laura – la mencionada prestó atención a su pequeño jefe – llama a Zabuza y dile que quiero la cabeza de esta persona en mi escritorio para ya mismo – dijo el niño señalando el nombre del dueño del banco norte de Konoha, aquel hombre insatisfecho por no haber conseguido riquezas de la corporación estaba buscando sabotearle y era algo que Eiji no toleraba – llama a mi chofer, voy a salir…

- como usted diga – dijo la mujer haciendo una reverencia – señor Eiji ya es bastante tarde, en caso que el señor Sora llame preguntando por usted ¿Qué razón debo darle?

- dile a papá que estoy en una reunión importante y él no hará más preguntas – respondió Eiji

…

- ¡DEI! – el mencionado se giró sorprendido, se encontraban a un par de calles de distancia de la mansión Uchiha

- ¿Itachi? – Deidara se mostraba confundido y preocupado al ver a su marido llegar de aquella forma, corriendo hacia el con una expresión trastornada - ¡¿Qué sucedió?! – en poco tiempo ambos quedaron frente a frente, aún así Itachi no podía mirar a Deidara a los ojos, desviaba la mirada constantemente sin saber cómo empezar a hablar, Itachi quería conocer bien lo que pensaba Deidara, aquella entrevista no era suficiente para el, pero al ver a aquel rubio preocupado por el, sosteniéndole de los hombros escrutándole en busca de una respuesta a su ahora deplorable estado, trato de calmarse, ser puntual, alargar esta situación seria perjudicial para él y para su larga relación, sentía que ellos tenían algo muy bonito que no quería tirar a la borda pero aún así se sentía traicionado pues ¿Por qué no había sido honesto con él? 

- ¿Por qué quieres ser infértil?... ¿Por qué me dijiste que no podías tener hijos? – el tono que usó Itachi fue calmado, aún así se notaba lo abatido que estaba por la situación, Deidara ante las preguntas no pudo hacer más que dar dos pasos atrás en estado de shock buscando procesar la información, por un momento al rubio se le paso por la cabeza fingir que era mentira, fingir que algo así no había sucedido y que el de verdad era infértil, pero había un problema, Itachi no dudaría de el de aquella forma, debía tener una prueba contundente de lo que estaba haciendo a sus espaldas, si le estaba haciendo frente él asunto ya era algo que no se podía negar o dar otra explicación             

- a estas alturas ya deberías saber que soy un cobarde… - empezó a decir Deidara con la cabeza gacha y apretando el bolso entre las manos – solo quiero ser feliz junto a ti…tengo miedo a los cambios – las lágrimas empezaron a emanar de sus ojos azules los cuales no podían ver a Itachi por miedo a la expresión del mayor y a esos ojos que le recordaban lo cruel que había sido – tengo miedo al dolor, porque lo experimente mucho cuando estuve en manos de…ellos – la primera lágrima resbalo – mi padre doncel y mi abuela murieron al dar a luz y eso me aterroriza… Itachi no tengo más razones, solo no quiero sentir dolor…¡solo quiero dejar todo eso e irme a mi propio paraíso! L-lo siento – se disculpó tartamudeando cuando su semblante se rompió y cayó presa del llanto, se cubrió la cara con ambas manos