Harry envolvió en sus brazos a un adormilado Louis, quién estaba recostado sobre el gran pecho de su novio. Harry lo miraba y no podía creer que esa preciosura de chico era suyo. Él no creía que esa cosita pequeña de ojos azules, recostado sobre él sea completamente suyo. Deslizó su mano por las mejillas coloradas y algo infladas que tenía Louis y que lo hacia ver como un pequeñito, y acaricio con suma delicadeza su rostro. Harry sonreía deleitado con la gran hermosura y suavidad de su rostro. Tenía un tono de piel parejo, lindo a la vista y, por experiencia propia, sabía muy bien que su cuerpo era muy suave.
A Harry le volvía loco cada vez que veía a su pequeño novio con anteojos mientras escribía cosas en su cuaderno y mordía la parte de atrás de su lápiz, según el se veía sexy y a la vez adorable. Y así era. Harry se lo decía y Louis terminaba cubriendo su rostro de lo rojo y avergonzado que se colocaba. Harry lo abrazaba y lo apretaba con sus brazos mientras reían.
-Hmm…- Louis soltó un pequeño ronroneo y se acomodó nuevamente sobre su novio.
-Eres irreal, Louis...- Susurro Harry más para él que para su novio que ya estaba casi dormido.
A Harry le encantaba cuando hacia calor, ya que podía ver a su novio en ropa interior y apreciar su redondo y hermoso trasero en sus apretados boxers. Además que también podía ver su adorable barriguita, que a él no le gustaba y se tapaba con sus brazos cada vez que andaba sin remera, pero a Harry le encantaba, la adoraba y sí por él fuera la acariciaría el resto de su vida. Louis tenía momentos en los que se acomplejaba de su físico, pero para Harry, Louis, era, es y será siempre hermoso. Harry amaba las hermosas curvas que se le hacían a Louis a los costados de su cuerpo y en la parte baja de su espalda, lo hacían ver delicado y él adoraba eso.
Su sonrisa…
Sus ojitos achinados…
Su finita voz…
Sus berrinches…
Su melodiosa risa…
Su cabello muy bien cuidado…
Sus pequeñas manos…
Sus mejillas infladas y con un leve tono rosa…
Sus gemidos al hacer el amor…
Su cuerpo desnudo…
Todo…
Harry amaba todo y no cambiaría nada de su pequeño novio
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