|Al siguiente día| Durante todo el día, Noah no había sabido de qué manera mirar a ________________, así que durante las clases, se había mantenido en silencio prestando atención y copiando de la pizarra mientras _______________ daba ejemplos divertidos y sus compañeros reían. Al toque de la campana anunciando que las clases habían terminado, Noah tomo rápidamente su mochila y salió lo más rápido posible del colegio. Jacobo llego corriendo luego. - Noah, perdón, tenía que ir al baño -dijo Jacobo- No te preocupes, amigos. No iba a dejarte ni nada de eso -dijo Noah- Genial -sonrió Jacobo -¿Tu padre vendrá por nosotros?- No. Le pedí a mi chofer que el viniera -dijo Noah -así que andando- Ok -sonrió Jacobo Una limusina estaba parqueada frente al colegio y de la puerta del piloto, salió un hombre mayor con un buen traje de chofer. - Espera, ¿Nos...Iremos...en...eso? -dijo Jacobo- Si, ¿Por qué? -dijo Noah Todos volteaban a ver quien se subiría a esa limusina. - Es una limusina, es enorme y es...- Nos es enorme, le dije que trajera la pequeña -dijo Noah -así que vamos, apúrate- ¿La pequeña? ¿Llaman a eso pequeño? -dijo Jacobo- Si, cuando lleguemos a casa veras a la grande -dijo Noah- Esto está de pûta madre -sonrió Jacobo- ¡Vaya! ¡Qué lindo lenguaje, Jacobo! Ambos chicos se voltearon y vieron a Malia sonriéndoles. - Es tuya ¿Cierto? -dijo Malia mirando la limusina Noah asintió. - Quizá algún día debas...invitarme a tu casa también -sonrió Malia- Claro, estaría encantado que fueras -dijo Noah Malia le sonrió. - Y tú, gordito sabrosón -señalo a Jacobo, este rio -mi hermana mayor manda a decirle a tu hermano que le llame o si no cortaran, dice que le digas que es un irresponsable con su "relación"- No puedo creer que tenga que hacer esa tontería de mensajero -dijo Jacobo- Así es nuestra vida, a mi igual me toca de mensajera -dijo Malia- Bueno, ya que -se encogió de hombros -yo le diré, dile a tu hermana que no se preocupe por eso Malia asintió. - Vale -dijo Malia -entonces...hasta el lunes, chicos -les sonrió -diviértanse- Adiós Malia -sonrieron ambos y Malia se fue- ¿Tu hermano esta con su hermana? -dijo Noah- Si, se supone que si -dijo Jacobo- ¿Gordito sabrosón? -rio Noah- Si...esa...es una historia vergonzosa -se sonrojo Jacobo- Bien, me la contaras en el auto -rio Noah Se acercaron y le chofer les sonrió. - Buenas tardes, joven Malik y joven...- Weber -sonrío Jacobo- Y joven Weber -le sonrío- Buenas tardes, Tony. Antes de ir a casa, hay que pasar por la heladería -le dijo Noah- Como usted mande joven -sonrío Tony y les abrió la puerta Noah dejo pasar primero a Jacobo y luego se subió el. Tony cerró la puerta y fue a dar la vuelta para subirse como piloto, arranco la limusina y se fueron. - ¡Esto es increíble! -chillo emocionado Jacobo- Supongo que sí -rio Noah- ¿Puedo acostarme en el asiento de allí? -pregunto Jacobo señalando- Claro, hazlo -dijo Noah- ¡Sí! -sonrío Jacobo y se levanto justo en una curva, y Jacobo rodo por el suelo. Noah rio y Tony bajo la ventana obscura- ¿Todo bien allí? -pregunto- Si, todo excelente -rio Noah- Bien -dijo Tony y volvió a subirla Jacobo se estabilizo y se acostó en el asiento. - Que bobada -espeto Jacobo Noah rio. - ¿Te encuentras bien? -pregunto Noah- Si, eso creo -dijo Jacobo Noah rio. - Y bueno, cuéntame tu historia vergonzosa -dijo Noah- Ah...está bien, creo -dijo Jacobo Noah le subió un poco al aire acondicionado y le puso toda su atención a Jacobo. - Un día a Jessie, la hermana de Malia, no la dejaban venir a mi casa así que mintió que iba a ir por un helado con Malia, así que se la llevo -suspiro -cuando llegaron a la casa, en realidad no sabía que Malia estaba allí, normalmente, Jessie y Nelson se encierran en cualquier cuarto, y no sé que hacen, la cosa es que pensaba que estaba solo, en la sala, así que empecé a cantar «Soy un gordito sabrosón, son, son, son. Con mucho swag para disfrutar que te hará vibrar hasta el... -Jacobo se movió incomodo -hasta el calzón» -Noah parecía serio pero no aguantaba las ganas de reírse -al voltearme, Malia estaba parada detrás de mí, yo estaba en calzoncillos- ¿Usas calzoncillos? -pregunto Noah con un tono divertido- Si -dijo Jacobo -¿Tu no?- Prefiero los bóxers -dijo Noah- Yo no, son incómodos -dijo Jacobo- Creo que son más incómodos los calzoncillos -dijo Noah -pero ya olvidémoslo, sigue- Ok, ok -dijo Jacobo -Malia se rio mucho pero, ella siempre ha sido bastante creída y luego de eso me dijo que hiciéramos que no nos conocíamos, por eso cuando se presento conmigo...bueno, en realidad ya nos conocíamos- Oh -dijo Noah -que incomodo- Si, lo fue -dijo Jacobo -normalmente me pone notas en el casillero cuando me dice lo de su hermana pero...creo que le gustas y por eso se nos ha acercado Noah sonrío y luego, se puso serio. - Mejor...cambiemos el tema -dijo Noah y la limusina se detuvo, Noah abrió la ventana un poco -estamos en la heladería, ven vamos, puedes pedir lo que quieras- ¿Seguro? -dijo Jacobo- Muy seguro. Mi papá sabia que hoy estarías en casa así que me ha dado un par de billetes para tarros de helado así que ¡Vamos por delicioso helado!- ¡Vamos!
