No es la primera vez que esto pasa, ya estoy cansada de no poder hacer algo al respecto. ¿Como hago para frenarlo? ¿Como puedo decirle que deje de hacer lo que hace? No hay forma de hablar para que deje de hacerlo. *PUM*. Se escuchó nuevamente ese golpe seco contra la pared. Y no solo se escuchaba una vez, sino varias veces seguidas. No lo soportaba.
Me puse auriculares y escuché música tranquila, movía mis pies al ritmo de la música. "La puta madre". Puede escuchar el grito de mi hermano Hernán. Está pasando por un momento horrible. Lamentablemente cree que todo se lo merece, estoy segura que no es como el dice. Está siendo muy duro con el mismo. Pero ¿Por qué? Es una buena persona, es amable y respeta a los demás.. Bueno, eso era antes, y no lo que es ahora. Habla mal, insulta siempre a todos y por todo. Cambió muchisimo, antes hablaba. Ahora ni eso.. ¿Que le esta pasando?
Me saqué los auriculares, salí de mi pieza para hablar, o intentar hablar con el. Toque la puerta de su pieza y no respondía, ni siquiera abrió la puerta.
- Por favor, abrime!
- Déjame tranquilo, nena.
- ¿Tranquilo? No estas tranquilo, estas muy nervioso.
- No estoy nervioso! *Gritó*
- Hernán no me pienso ir hasta que abras la puta puerta!
- Déjame ¿No entendes? *Gritó*
Lo intenté, quise hablar con el. Pero no le importó una mierda. Fui a hablar con mi mamá sobre esto, pero no hubo caso. Ella estaba pendiente de su trabajo como siempre. "Se trata de tu hijo ¿Acaso no te importa?". Le dije, pero seguía mirando sus cosas.
Escuché otro golpe, venía de la pieza de Hernán por supuesto. Ya tengo bien en claro que fantasmas no son.. Me sentía mal por no poder ayudarlo, pero el tampoco se deja ayudar. Lloré porque me pone mal todo esto, mi hermano es un psicópata de mierda. Mamá esta siempre pendiente de su trabajo y no sabe lo que pasa en esta casa. Papá tiene otra familia y solo nos manda plata para comprar lo que queramos, a mi hermano y a mi.. Por supuesto.
Me quedé en la cocina, estaba preparando la merienda hasta que escuche que alguien estaba por abrir la puerta. Entró Hernán, me miro y dijo "¿Que miras?" Y se sentó en una de las sillas mientras se servía café en su taza.
- No me hables así, Hernán. ¿Que te pasa?
- No me pasa nada! -Tomó su café-
- Por favor, te quiero ayudar!
- No necesito tu ayuda, ni la de nadie.
- Estas mal, Hernán!
Se levantó de la silla y me agarró el cuello. "Yo no estoy mal, no vuelvas a decirme algo asi ¿Escuchaste?". Me puse a llorar, nunca me había tratado así. Estaba asustada, ya no conocía a mi hermano.
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Problema Psicológico
Short Story¿Por qué sera que no podemos aceptar ser lo que somos? ¿Por qué nos lastimamos a nosotros mismos? Hernán, un chico de 21 años que se golpea, sufre por amor y odia su vida. ¿Por qué es así? Cada uno tiene que amarse, luchar por lo que quiere, si eso...