Capítulo 5.

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Para que comprendan les daré un resumen. En 2011 me fui a vivir a París por unos meses por cuestiones del trabajo de mi padre. Mis padres todavía seguían juntos para entonces. Tuvimos que quedarnos en el lujoso departamento del amigo de mi padre por dos semanas, obviamente yo estaba en total desacuerdo pero mi opinión se la pasaron por los calzones. El amigo de mi padre tiene una familia que la conforman su esposa y sus dos guapísimos y franceses hijos gemelos Amaury y Paul, dos años mayores que yo. Como en cualquier caso, el amor entre jóvenes nació entre Paul y Luciana. Derramaban toneladas de miel a dondequiera que iban: La escuela (nuestros padres se pusieron de acuerdo para meternos a mis hermanos y a ellos en la misma escuela), el parque, la plaza, el centro comercial, las tiendas, restaurantes, cafeterías y básicamente cualquier lugar en el que pusieron un pie, dos, más bien dicho. Como dicen, París es la ciudad del amor.

Mis padres se divorciaron en Francia y por ende era una etapa dura para todos, Paul me ayudó mucho a soportar el divorcio de mis padres pero todo se complicó cuando yo tuve que volver con mi madre a San Francisco, lo intentamos a larga distancia y estaba funcionando, los dos seguíamos tan enamorados como nunca. Cuando conocí a Carolina ella decía que nos parecíamos a Danny Zuko y Sandy Olsson (Protagonistas de la película Vaselina).

Mi padre decidió quedarse a vivir en París  y asociarse con el el Señor Fantin, padre de Paul y por eso yo tenía que viajar allá muy seguido con mis hermanos y obviamente, mi padre aprobaba mi relación con el hijo de uno de sus mejores amigos. Eso duró dos años y mi padre sufrió un infarto al corazón y murió. Quedé devastada ante la situación. La última vez que fui a París, mi padre me heredó su enorme casa y a mi hermano Ánibal le dejó la empresa y con ella un departamento que tenía en Dubai, ya que Miriam no era su hija propiamente, no le pudo dejar nada. Esa última vez en París descubrí a Paul engañándome con su mejor amiga y mi situación sentimental estaba peor, estaba rota por todos lados. Él afirmó que había estado completamente enamorado de mí pero que también lo estaba de su mejor amiga y que ya no podía ocultarlo más. 

Los años pasaron y no he vuelto a pisar París, pero la casa sigue siendo mía y con ella todas las riquezas que mi papá obtuvo en Francia y el mundo.

Me hice mejor amiga de Carolina y después novia de Philip y hasta entoces mi vida es plena y feliz.

Tan Ligeras Cómo el Humo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora