Peachtree/ Árbol de duraznos

XIV: Recontruyendo una noche. Segunda parte.

Cuando el profesor terminó de señalar las primeras indicaciones de la competencia, un silencio rotundo se apoderó de la enorme sala de clases. Aun así noté un pequeño brillo en los ojos de mi nueva amiga, creo que de alguna forma le apasionaba la idea de quitarle el puesto de ayudante al tal Robert, después de todo, según Kristen, él se lo había arrebatado primero.

Pero Kristen no era la única que parecía emocionada con la competencia; un chico que me parecía bastante familiar, también lo estaba, si no me equivoco su nombre era Steven, su cara lo decía todo, y no pude evitar notar como miraba a Kristen. La chica de lentes, de apellido Black, parecía tranquila, y se limitaba a mirar al profesor. Y finalmente el falso David; no podía estar segura, pero parecía como si estuviese fingiendo no conocerme, tal vez debería seguirle el juego.

Seguramente era la única que se encontraba inspeccionando las reacciones de mis compañeros, pero no podía evitarlo, tenía esa maldita manía de analizar todo lo que sucedía a mí alrededor. La verdad no tenía ni el más mínimo interés en competir, de todas formas mi estadía en esta ciudad era temporal.

— Profesor, me siento muy feliz de que me haya considerado para el concurso, de verdad es fabuloso, pero no quiero participar, siento que estoy quitándole una oportunidad a algún estudiante que lo merezca más que yo, y pueda aprovecharlo, ya que usted sabe, yo estoy acá de intercambio... y es temporal... y bueno— no alcancé a terminar mi excusa para abandonar el concurso, el profesor me miró.

— No se preocupe, no hay problema si es que quiere abandonar el concurso, pero me gustaría recordarle que no es sólo por la ayudantía, si no que también todo lo que hagan será evaluado y podrán conseguir buenas calificaciones. Por otra parte, si bien tengo entendido que su estadía es temporal, eso eventualmente podría cambiar, señorita _ (tn) ese tipo de cosas son impredecibles y es mejor no especular sobre ellas, además sea donde sea que esté una carta de recomendación no le viene nada mal, es por eso que le pido que lo piense detenidamente y me responda dentro de una semana.

Todo lo que el profesor me había dicho era cierto, pensarlo un poco más no tenía nada de malo... ¿no es así?... además tenía la sensación de que Kristen quería matarme; o eso parecía cuando exprese que no quería ser parte de la competencia.

—Gracias profesor, lo pensaré muy bien.

—Eso espero— sonrió— ahora debo irme chicos, suerte y anímense, sobretodo tú Nicholas, confío en tus capacidades, pero no sé que te ha pasado últimamente— le señaló con el índice y se marchó de la habitación.

— ¿tú estás loca, no es así? —Me recriminó Kristen— me limité a mirarla— no puedes dejarme compitiendo sola, por favor, acepta la invitación al concurso, será fantástico... ya verás— exclamó mientras su mirada me suplicaba insistentemente.

La verdad siempre he tenido un problema de voluntad, o de carácter, no lo sé. Lo que sí sé, es que ese maldito problema me impide decir que no. Siempre ha sido así, y en razón a los últimos acontecimientos, debo decir que lo detesto.

—Está bien Kristen, pero no pienses que me esforzaré— mi tono de resignación fue completamente ignorado por Kristen.

— ¡Maravilloso! —exclamó sin una pizca de compasión por mis pocas ganas.

Miré a mí alrededor; Robert estaba sentado en el escritorio del profesor mientras hablaba con la chica de gafas y Nick hablaba con el otro chico. Kristen me miró.

—Espera acá un momento— señaló con una sonrisa en su rostro. Se dirigió hacia donde estaba Robert.

—Serás desplazado, te ganaremos, no importa si soy yo o _ (tn) —señaló Kristen ante la mirada atónita de todos— serás pisoteado por una mujer— siguió— qué tristeza que tu racha haya durado tan poco— río. Robert la miraba tranquilamente.