Mi vida... entre Creepypastas

Capítulo 12: No es humana

- ¿Sabes, linda?

Ya era la millonésima vez que Eyeless me decía eso, desde que me había sorprendido en la cocina hasta que me había tirado a su cama. 

- ¿Qué...?- jadeé. Me di cuenta de que si no preguntaba, lo que me ocurrió por decir "No" a Slender podría repetirse. Pero ahora con Eyeless.

Me volvió a embestir antes de responder a su propia pregunta.

- Si tus ojos fueran de cristal, los  tendría siempre encima- sonrió perverso. 

Otra embestida.

- ¿P... Por qué...?- volví a preguntar. Otra embestida.

- Ese brillo, como dos piedras de jade, en forma de iris ocular... Nunca había visto unos ojos así. Son de coleccionista. 

Otra embestida. Luego silencio. 

De repente, en la última embestida, mis manos volaron solas para clavar las uñas en la espalda de Eyeless, provocándole un estremecimiento. De inmediato las retiré y me tapé el rostro, temerosa.

- Lo... Lo siento... Ha... Ha sido sin querer, lo juro... 

- ¿Qué ha sido eso?- me asombré de que su voz saliera tan aguda. Aguda... ¿por miedo?

- ¿Qué...?- me destapé el rostro. Cuando mis ojos verdes se encontraron con los suyos, apartó la mirada de inmediato. 

Se deslizó fuera de mí y me hizo vestir rápidamente. 

- ¿Qué pasa, Jack?- ya me estaba poniendo nerviosa.

- No... No te me acerques...- se apoyó con una mano en la pared y con la otra me señaló para detenerme-. ¿Te hice daño?

- ¿Qué? Jack, me estás asustando...- mi voz temblaba.

- Que si te hice daño, Luna.

¡Alto, alto, alto! ¿Me había llamado por mi nombre y no "linda"?

- N... No...- contesté. No estaba segura.

- ¿Sí o no?

Ahora sí que se le notaban los nervios en la voz. Parpadeé asombrada.

- ¿Qué te pasa?- estiré una mano hacia él, pero abrió la puerta y salió de la habitación, yendo casi corriendo a la cocina. 

- Haz la cama. No te me acerques. No quiero hacerte daño.

Vale, esto ya daba grima.

Fruncí el ceño, me acercé a la mesa de la cocina donde él estaba apoyando la cabeza sentado en una silla y me situé por el otro lado, frente a Eyeless.

- Jack, ¿qué pasa?- exigí saber-. ¿Por qué te has comportado así de repente?

- Vete a hacer la cama- había recuperado su tono severo. Me estremecí. 

- Jack, dime qué...

- ¡Aléjate de mí!- gritó levantándose de golpe. Yo me hice dos pasos para atrás y apreté los puños. Al catar este gesto, Eyeless retrocedió una zancada. 

- ¡Jack!- protesté. Me estaba enfadando-. ¡Por favor, dime qué pasa!

- ¡No te acerques!- me señaló de nuevo, como manteniendo una distancia establecida entre nosotros.

- ¡Acabas de violarme y de pronto te comportas así! ¡Quiero una explicación!- grité. 

- ¿Se puede saber qué ha pasado entre vosotros dos?- interrumpió la voz de Jane-. Jack, ¿qué le has hecho?

- ¡No es humana, chicos! ¡Luna no es una simple humana! ¡Es el juramento que hizo Katherine Von Trevor hace 300 años!- chillaba Eyeless, histérico. 

- ¿Qué hablas? ¿Quién es esa Katherine?- me sentía confundida.

- ¡Luna no es humana!- repitió Jack-. ¡Ella es la reencarnación de Bloody Moon!

Todo el mundo, yo inclusive, compusimos una mueca de espanto. 

N/A: En la foto, los ojos de Luna, color verde jade.