Ven a mí, amado profesor [Terminada]

Capítulo 7

Capítulo 7: La ladrona.

—Stan ¿me veo operada? —pregunte agobiada.

Frunció el ceño.

—Si ni siquiera te has operado. —Rio.

—¿Me veo falsa?

—No lo eres.

—¿Y soy hueca?

Se atraganto con la comida.

—Buenoooo. —Alargo la O—. Depende en que punto lo ves. —Sonrió nervioso.

Apoye mi cabeza en el brazo, suspirando.

—¿Por qué preguntas esas cosas?

Hice una mueca triste.

—Pues es que... —dudaba en decirle.

—Darío. —Interrumpió.

Sonreí forzosa.

Suspiró molestó.

—Te dije que no le hagas caso al subnormal de Darío —expresó molestó.

—Pero si lo dijo es porqué soy así —defendí.

—Nada que ver, seguramente te tiene envidia o tiene ese concepto estúpido de las celebridades —expresó convencido.

—De todas formas, haré mucho ejercicio para quitar mis arrugas y lo hueca —dije levantándome.

—Pero... —Soltó tratando de pararme.

[...]

1 mes después.

NARRADOR OMNISCIENTE.

—Chicos, en verdad tenemos que dejar de salir por las noches —dijo Sara, tratando de convencerlos.

—Nuestro papá te mata si te ve. —Aclaró Hanna.

—Ya. —Soltó berrinchuda—. Me veo una secuestradora subiendo por el árbol.

A lo lejos se escuchaba unos pasos acercarse.

—Creo que es papá —dijo Nico, asustado.

Abrieron los ojos como plato mientras Sara trataba de buscar un lugar para esconderse.

—¿Por qué carajo no tienes un armario en condiciones de esconderme? —susurró ella, miedosa.

El pomo de la puerta se movía poco a poco.

»Estoy muerta«, pensó.

Se miraron entre sí y luego miraron a la ventana, estaba claro donde se iba ir.

—¡Hanna, ábreme la puerta ahora! —Exclamó Darío un poco alterado.

Fue Sara hacia la ventana rápido, tratando de ser lo más cuidadosa. Se encontraba en la orilla, a lo cual se agarraba con algunas ramas para no caerse, mucho no iba a aguantar así que decidió bajar hasta que...

—¿Qué hacen aquí? —Entró Darío.

Abrió Sara nuevamente los ojos como platos sorprendida al escuchar su voz, atónita como estatua quedo.

Rieron nerviosos.

—¡Papi! —Grito Hanna, abrazándolo.

—Repito ¿qué hacen aquí, en vez de dormir? ¿Por qué tienen la puerta con seguro?

Hubo un silencio por unos segundos. Y Hanna empezó a sollozar.

—Hanna.

—Papá, seguramente te vas enojar, pero esto tiene una explicación.