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CHERIK

-Elik- llamo un pequeño castaño, de no mas de 6 años, a otro niño que aparentaba 9 años de edad.

-¿Que paso Charlee?- pregunto el cobrizo, volteando a ver al menor que venia agarrado de su mano, mientras comía helado.

-Tu jamas me vas a abandonar, ¿verdad?- pregunto con algo de inocencia.

-Siempre estaré a tu lado, lo prometo- le respondió de inmediato el cobrizo, pues aquel pequeño castaño era de las personas que mas quería en el mundo.

-Yo también estaré junto a ti siempre- hablo el menor con una hermosa sonrisa en el rostro, amaba pasar tiempo con su amigo, pero amaba aun mas saber que era muy importante para este.

Esa tarde una promesa quedo grabada en el viento y en el corazón de ambos niños, se suponía que eran los mejores amigos y que siempre estarían juntos pasara lo que pasara...

-*-25 años mas tarde*-

Un cobrizo se encontraba frente a la mejor escuela del país, o al menos el la consideraba la mejor, iba vestido de traje gris oscuro, con una playera blanca, zapatos negros y una singular corbata que combinaba con toda su ropa, estaba sumamente nervioso, pues hacia mas de 15 años que el no pisaba aquel lugar.

Las puertas de aquella llamativa escuela abrieron, y no dudo ni un segundo en seguir conduciendo hasta llegar a la entrada de aquella mansión, con forme iba llegando sus recuerdos de niños empezaron a llegar, la mansión se veía igual, pero no dejaba de pensar que todo aquello lo hacia sentir diferente.

Estaciono su auto lo mas cerca que pudo casi tropieza con unos niños al intentar abrir la puerta, no cabía duda que el ambiente ya era muy diferente.

-Buenas días señor Lehnsherr- el cobrizo saludo cortesmente al saludo- la entrevista se hará en el despacho que se encuentra al final del pasillo- señalo la mujer, el hombre le dio las gracias antes de irse con dirección hacia donde lo mandaron.

No necesitaba ningún letrero, ni mucho menos un guía, el conocía aquella mansión como la palma de su mano, aunque el ambiente era diferente, el lugar seguía siendo el mismo, así que no tardo en darse cuenta que el lugar donde le harían la entrevista pertenecía antes al señor Xavier... Brian Xavier.

-Buenos días, soy Erik Lehnsherr, vengo por la entrevista laboral- saludo ni bien entro, aunque la persona que le iba a hacer su entrevista se encontraba sentado de espaldas en una de esas curiosas sillas de oficina.

El lugar seguía como lo recordaba, con repisas llenas de libros, alguna que otra antigua decoración y la mesa algo desordenada, su mente no pudo evitar viajar al pasado y pensar en cierto castaño, "aunque parezca que es un desastre, el lugar esta perfectamente ordenado... o eso dice papá".

-Buenos días señor Lehnsherr, lamento el desorden, pero aunque el lugar parezca un desastre, esta todo perfectamente ordenado- Erik abrió los ojos sorprendido al escuchar esas palabras y aun mas cuando vio el rostro de la persona- veo que aun me recuerdas- .

-Yo... este...- el cobrizo estaba mudo, sabia que la escuela tenía el nombre de Xavier, pero no se imaginaba encontrarse a algún integrante de esa familia.

-Yo... este... ¿acaso esa es la manera de saludar a una vieja amiga?- pregunto con fingido resentimiento una chica de piel azul y cabello rojizo. 

-¿Raven?...- fue lo único que murmuro el cobrizo, esta al ver que este no reaccionaba se levanto de su asiento para ir a darle un abrazo.

-Te extrañe- murmuro la chica aun sin romper el abrazo.

-Yo también, pequeña, yo también- respondió el hombre, abrazándola al instante.

Recuerdos de un corazonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora