Me quedé en definitiva sola cuando Derek, mi hermano, murió. Mamá estaba ahí pero sabes que pasar tiempo con ella... no es lo mío. En definitiva, ella no entendía una mierda sobre lo que se siente perder a un hermano, y yo tampoco entendía ni la más mínima mierda sobre lo que se siente perder a un hijo. La distancia entre nosotras no dolía, pero sí la manera en la que eso agrababa la pérdida.
La casa nunca se sintió tan oscura. Sin Derek, sin papá, ahora también sin ti.
Todos estaban lejos, pero yo tuve que quedarme en el mismo lugar de antes como si me fuese imposible escapar de esta ciudad.
Pero estabas ahí. No físicamente, claro. Enviabas mensajes. Llamabas a cada rato. Todavía recuerdo dejar el teléfono a un lado mientras lloraba para escucharte hablar a ti, buscando la manera de calmarme.
Gracias por eso. Por estar cuando nadie más sabía cómo hacerlo.
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Gonna get better
Short Story«No entiendo por qué crees que no soy feliz con nuestro paraíso, si sabes que sólo te quiero a ti»