Era el último día de estadía aquí en Miami, y la recepción me había llamado porque según alguien quería hablar conmigo.
Estaba media asustada porque no tenía familia aquí en Miami, pero era lo de menos, así que baje rápidamente y me paré frente a recepción.
–Buenos días, me dijeron que alguien venía a verme–hablé seria y la chica asintió.
–Dejó un recado para usted, la dirección de un starbucks a unas cuadras de aquí. Dice que es urgente–me habla la chica y yo suspire.
Solo debía ir al puto starbucks para saber quien era el misterioso ser humano. Decidí caminar en la dirección que me habían dado en un papel.
Al llegar veo que está vacío y sonrío. Me compro un frappe con caramelo extra, esperando al chico o chica que me se suponía que debería estar aquí.
Una hora después molesta, decido llamar a Mía, solo porque iba a esperar unos minutos más, y me iba a entretener hablando con mi mejor amiga.
–Hola pedazo de perdida–habla en la línea Mía.
–Buenos días a ti también Mia–me reí y ella soltó su carcajada.
–Dios mío Alejandra nos tenias preocupados, debías haber llamado desde ayer.–me dice y yo suspiro.
–Jack y yo fuimos a Miami Beach ayer, no tuve tiempo para llamar a nadie. Debo disfrutar el calor de Miami, recuerda que New York ya está en modo infierno–le dije riendo y ella quedo en silencio.
–¿Como así me llamas?–pregunto y yo suspire nuevamente.
–Un chico extraño me dejo una nota de una direccion en un starbucks, y no se aparece por aquí. Llevo una hora esperándolo y nada.
–Ándate de ahí, ten cuidado Ale, recuerda quien está en esa ciudad-puedo verla fruncir el ceño y sonrío.
Me gusta que la gente se preocupe por mi.
–Eso haré Mia, solo espero que no sea un tipo de broma.
Narrador omnisciente.
Alejandra seguía hablando con Mia, pero la primera decidió salir del Starbucks, pero que error cometía.
El micro de Mexico estaba esperándola, ella no lo conocía ni un poco, pero el si por fotos y todo. Alejandra paro en un callejón para botar el envase del frappe y luego iba terminando si conversacion con Mia.
–Bueno te hablo cuando esté en el hotel, este callejón da miedo.
–Espera debo decirte algo–dice Mia.
Luego de eso le tapan la boca a Alejandra con cloroformo, haciendo que se desmaye y el celular caiga al suelo, partiéndose pero aún valía.
–¡Alejandra! ¡Dime que esto no es una broma!–Grita Mía y el micro agarra el celular y le responde.
–Esto no es una broma querida–dice con su voz ronca y termina la llamada.
**
Jack.
Mi celular comienza a sonar y me levanto un poco desconcertado. Estaba plácidamente dormido y ala gente se le ocurre llamarme, veo que el cuarto estaba vacío, Alejandra
Debió haber salido a caminar un rato.
–¿Bueno?–dije con mi voz ronca.
–Que ronquita esa voz brother, veo que te desperté de una siesta lo siento– se ríe Marcus desde la línea.
–Oh dulce Marcus, dime rápido o cortare–hablé serio y el volvió a reír.
–Pues tengo malas noticias, el micro de Mexico ese volvió a amenazar a papá solo porque el no quizo hacerle un trabajo, entonces, secuestraron a Alejandra. Era eso o moría tu mama, mi mama y la nueva novia de mi papá. Pero no te preocupes prometo que estará bien.
Escucho eso y las lágrimas de coraje salen por doquier, como odiaba a ese hombre.
–Yo conozco a Alejandra es terca, no querrá comer y le harán daño. ¿El micro de Mexico ese mandará a sus escoltas?–pregunto con voz quebrada.
–Si, a uno, chuta oye, mi hermana está jodida–veo que le pone seriedad a todo.
–Ella no sabe que tiene un hermano más además de Chris ¿verdad?
–No, solo Chris sabe de mi, pero jamás le dijo porque traería mas problemas. Alejandra es curiosa y querría conocerme, y ahora lo hará pero dudo contarle que soy su hermano.
–Bueno me avisas todas las novedades, ahora Alejandra me odiará ya que no podré hacer nada, pero bueno, mantenla a salvo y dile que no sea terca Porfavor.
–Eso haré, hasta luego– se despide para luego cortar.
Y así era, Marcus era el mayor de los hermanos McCabe, Alejandra su apellido real era McCabe, solo que se lo cambio a Campbell por que así es el apellido de James y según ella el apellido de su papá biológico estaba sucio. Lo que no sabía era que el era una persona buena, solo que le tocaba hacer todo para cuidarla.
Yo sabía que este secuestro repentino haría que Alejandra y yo tengamos problemas, pero no me importaba, era la muerte de tres personas y una de ellas era importante para ella. Si le dijeran el porque ella se entregaría sin ningún problema, la conozco.
Ahora no se que con que cara recibiré a mis amigos y los familiares de Campbell.
Llegue finalmente a NY, y pude ver a lo lejos que Mia estaba como loca corriendo de un lado a otro para buscar a Alejandra, Tommy no tenía su mejor cara y Chris se atragantaba las uñas muy nervioso.
–¡Donde mierda esta Alejandra Jack!–me grita Mia y yo solo suspiro con tristeza.
–La secuestraron amigos–hablé con la voz cortada y si estaba triste.
Ella tiene algo que me pone feliz con solo verla, y ahora que no está cerca mío no veo la hora de verla de nuevo, se que será en un buen tiempo. Pero, la veré yo lo sé, papá y Marcus harán un trabajo con éxito y dejarán libre a mi bebe.
–¡Como dejaste que pasara pedazo de escuincle!–grita Chris enojado.
–¡Ella salió sin decirme nada, se fue y no regreso más!–grito el doble que el.
Mia se tira en los brazos de Tommy llorando y el solo mira un punto fijo serio.
–Llamaré a Marcus–dice Chris enojado y se va a la cafetería.
Solo quería llegar a mi casa y recibir la llamada de Marcus diciéndome que es una broma, y que Alejandra ya sabe la verdad. Pero yo sabía que eso no iba pasar, eso solo pasa en los cuentos de niños.
Porque en la vida real, las historias no tienen nunca un final feliz.
***
hola mis amores
Los invito a pasarse por mis dos historias nuevas:
NARCOTRAFICANTE
no es la típica adolescencia.
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