Quarterback.

Cap. 12: "Todo por ganarte a ti"

Entre bromas y risas, los minutos habían pasado volando; y al darme cuenta, estábamos estacionados frente a un antiguo café.

Al bajar del coche, mis ojos simplemente se iluminaron, aquel pequeño café estaba iluminado con bombillas recicladas; ni hablar de su interior, el cual estaba adornado con enredaderas de jazmín. Volteé a ver al chico que me acompañaba; Alex tenía una pequeña sonrisa que lo hacía ver tierno de alguna u otra manera.

Tras haber ordenado nuestros cafés, nos sentamos en una de las mesas del lugar, cerca de aquellas increíbles enredaderas. Estaba a punto de hablar, pero Alex me tomó por sorpresa al comenzar la conversación.

—Bueno Summers, no suelo venir aquí con ninguna chica, así que siéntete afortunada—.Murmuró con aquella bella sonrisa en su rostro; pensaba continuar hablando, por eso no lo interrumpí. —Dime qué hace una chica como tú, en las garras de West.

Me había tomado unos minutos para encontrar las palabras adecuadas para definir aquello, pero no sabía cómo hacerlo.

—No estamos juntos, ni siquiera lo conozco. No sé quién te habrá dicho semejante cosa, pero detesto que mientan de esa manera. West es solo un tonto que piensa con lo que tiene entre las piernas.

Y dicho aquello, Alex largó una carcajada contagiosa y audaz; hubiera criticado su burla, pero la mesera nos había traído nuestras bebidas. Pensaba continuar con mi reclamo, pero el chico de ojos grises, me detuvo con aquella mirada tan profunda.

—Puedo asegurar que lo que dices es cierto, Lía. Ese idiota ha estado detrás de cada una de las chicas de su instituto; y no veo por qué deberías ser la excepción. Deberías tener cuidado con él, y si te molesta, dile que eres muy amiga de Morgan. — Dicho esto, el muchacho me guiñó uno de sus ojos. Aquel chico sería especial, lo presentía.

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Sin darme cuenta, había pasado unas dos horas en aquel café con Alex. Simplemente parecía como si el tiempo no corriese cuando estaba a su lado. El muchacho hacía bromas constantemente y lograba sacarme unas cuantas preguntas de vez en cuando. Obviamente, también aproveché las oportunidades, para poder conocerlo un poco más; tenía una hermana mayor, llamada Ruthie; un perro llamado Ogon, y vivía junto a sus dos padres: los conocidos doctores Morgan.

Me había llevado hasta casa, y por supuesto agradecí aquel gesto con un pequeño beso en su mandíbula, para después agregar:

—La pasé genial hoy, Alex. Fue lindo poder conocerte al menos un poco más. Y siento que no hubieran ganado el partido.

—No te preocupes por el partido, linda, habrá otro el próximo viernes. Espero vayas a verme, te traeré una de mis camisetas.— No pude evitar reír ante aquel comentario, pero asentí con la cabeza, antes de bajarme del auto.

—Te diré algo, Morgan. Solo si ganan el próximo partido, podrás tener mi número y otra cita conmigo, ¿Qué dices? ¿Aceptas el reto? — Propuse de una manera audaz, mordisqueando mi labio inferior debido al nerviosismo.

—Oh claro que acepto el reto, Summers. Ve preparada para una bonita velada luego del partido, es claro que haré todo por ganar; todo por ganarte a ti.

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HOLIS, SE QUE ME ODIAN, SE QUE LES ROMPI EL CORAZÓN.

He vuelto luego de un largo tiempo, quiero que sepan que fue un año muy dífici para mi, y que he tenido mucho en qué pensar. Sé que el capítulo es corto, pero el próximo será mejor.

¿Quieren saber algo? Me enteré hace unos días que mi pareja estaba con otra, así que agarrense porque la inspiración ha vuelto a mi. He estado triste y llorona, y no sé como superar esto, ¿Consejos?