Nos separamos de Avery y fuimos a unos metros.
-Qué ocurre?- Prometí hacer como si nada pasara, y eso haré.
-Sobre lo de ayer... se que dijiste que harías como si nada, así que yo igual, para poder terminar las tutorías y poder ser amigos, okey?
-Okey, ahora puedo irme?- Dije señalando a Avery.
-Ese es tu compañero? Digo, si, ve tranquila, te veo en el almuerzo.
-Adiós.- Me despedí de Kendall y fui con Avery.
-Lo siento, el era Kendall, es Mariscal de campo en el equipo que voy a mostrarte más tarde y somos... amigos. Ahora vamos a nuestra clase.
La primer clase era música.
-Bien, Avery, te daré unos consejos, en la clase de música, jamás mires a los ojos al profesor, ni hables, ni cantes, ni nada que el no te pida que hagas, no suspires siquiera.
-Okey, gracias, eres muy buena guía.- Dijo guiñando el ojo y sonriendo, no podía negarlo, Avery era muy lindo y tenia un carisma muy bueno, me agradaba, esperaba ser su amiga en el futuro.
Podía ver como todas las chicas lo miraban y el estaba tan tranquilo escuchando la clase, no podía entenderlo, era tan diferente a Kendall, si el estuviera acá, ya estaría coqueteando con la mitad de ellas. Pero Avery era tan diferente, podría estar rodeado de chicas y solo se concentraría en lo esencial, era genial, verdaderamente genial.
La clase terminó y Avery y yo salimos para dirigirnos a la próxima.
Llegamos al salón de la siguiente clase y paso exactamente lo mismo, las chicas babeaban y el ni se inmutaba, no lo entendía.
Paso lo mismo en cada clase que tuvimos hasta el almuerzo.
-Bien, este es el comedor. La comida no es muy buena pero la fruta fresca, espero que no te intoxiquen.- Le dije mientras veía como ponía comida en su bandeja.- Repito, espero que no te intoxiques.- Dije señalando a su bandeja.
-Y tu porque no comes?
-Por nada, últimamente no tengo apetito. Vamos con mis amigos.- Dije sonriendo para que olvidara el tema.
No es que no tuviera apetito, pero no podía comer nada antes que pasen dos horas que tome una pastilla y tome una antes de la ultima clase, para el estrés.
Llegamos a la mesa y ahí estaban Sam y Sophie.
-Hola chicos! Este es Avery, mi compañero de guía.
-Hola.- Dijeron al mismo tiempo.
-Y Avery, estos son Sam y Sophie, mis mejores amigos.
-Ya le presentaste a Kendall?- Pregunto Sam. Más inoportuno no podía ser. Podía ver el odio en sus ojos y como me miraba, como si ya lo supiera todo. Mire a Sophie.
-Lo siento! No pude contenerme, tenia que contarselo! Pero mira lo bueno, no esta enojado!
-En serio no estas enojado?
-No, al principio me molesto que no me llamaras en el momento pero se me paso, además, tenemos un invitado, no hablemos de temas horribles.
-Tiene razón.- Dijo Sophie.- Y dinos Avery. Qué te parece la escuela? Eres guapo, seguro ya se te lanzaron una que otra chica.
-Sophie!- Dijimos Sam y yo a la vez.
-Déjenla, contestando a tu pregunta, la escuela esta bien, y hablando sobre lo otro, si, no puedo negarlo y tengo testigos, no dejan de intentar violarme con la vista, pero no me importa, no podrán tenerme así porque si, yo no soy de los que literal se prostituyen por una mirada.
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Porque te amo, Esperanza.
Short StoryEsperanza, de 16, estudia en Dakota del Norte, le va muy mal en matematicas y gracias a ello el destino la cruzará con el chico que a estado molestandola desde los 13 años. Solo queda esperar y ver que ocurre al final.