Omma Jin || Namjin MPREG

Capitulo 14

Narra Min YoonGi 🐺

Todavía no puedo creer que me he rebajado tanto, cuando siempre he sido un chico decidido e impenetrable.
No puedo dar crédito a la razón por la cual estoy peinando mi cabello para lucir atractivo y además me rocío el perfume más varonil que encontré en mi tocador. Estoy esforzándome por verme bien, algo fuera de lo normal.

Tendré una cita con Jimin.

Él me ha propuesto lo siguiente: le daré una oportunidad para demostrar que sus sentimientos hacia mí son reales. Saldremos, tal vez quiera ir al cine o a comer, actuaremos como si fuéramos unos tórtolos adolescentes, porque también quiere intentar enamorarme.

Es un tonto, ya lo ha logrado desde hace mucho tiempo.

Pero, mientras tanto, yo continuaré serio e indiferente, como lo he hecho todo, este tiempo. No quisiera caer en sus encantos y que al final, sea sólo un juego para tratar de seducirme y terminar lo que empezamos el otro día.

Ninguna relación comienza con la seguridad de que durará para siempre, eso se descubre con el tiempo y con las experiencias que la pareja va adquiriendo.
¿Es acaso que yo no acepto a Jimin por miedo a fallar? ¿A que nos separemos en cualquier momento?

Así es.
Mi orgullo es más grande que mi corazón, que mis sentimientos.
Haber sido engañado en el pasado me enseñó a no creer en las personas ni en lo que prometen.

Todo termina de un día para otro. Igual que mi atracción hacia él, tal vez mañana me deje de gustar.

Pero si no quiero nada con Jimin ¿Por qué acepté salir con él?

Cuando decidí que mi aspecto era el indicado, salí de la habitación y fuí hacia la de Jimin, que estaba a tres puertas alejada de la mía, toqué con los nudillos y esperé.

- Jimin-ah...

- Pasa, hyung -contestó.

Yo dudé. ¿Y si está desnudo en la cama con la luz apagada y velas aromáticas por todos lados, y un par de pétalos de rosas cubriéndole los pezones?

Abrí la puerta y por fortuna lo encontré vestido, llevaba un pantalón rojo entallado, Converse negros, una camisa blanca y tirantes marrones. Se veía al espejo mientras ponía argollas en las perforaciones de sus orejas, todas plateadas y del mismo tamaño.

- Ya casi estoy listo -dijo apenas me vio entrar.

No contesté, saqué mi celular y revisé Instagram.
De reojo, noté como Jimin tomaba un poco de bálsamo humectante con su meñique y se lo untaba poco a poco en los labios, recorriéndolos en toda su extensión apenas con la punta del dedo, luego los frotó entre sí e hizo un pico al final.

Maldito niño coqueto.

- Vámonos, hyung -dijo sonriendo y volteó a verme.

~❤~

Ya en la plaza, ambos teníamos lentes de sol y un cubrebocas para pasar desapercibidos, Jimin veía a todo su alrededor intentando decidirse sobre qué haríamos primero.
Al final, una cafetería de dos pisos con ambiente vintage llamó su atención.
Subimos a la planta alta del lugar y ocupamos una mesa que estaba bastante alejada de las demás, justo junto a la baranda del balcón y bajo una gran sombrilla de lona.

Me quité los lentes y bajé el cubrebocas hasta mi cuello, Jimin me imitó.

- ¿Ya has venido aquí antes? -preguntó revisando el cuadernillo del menú

- No ¿Tú si?

- No, pero RapMon hyung me dijo que los pasteles son muy buenos.

Leí también el menú.
Estar con Jimin en una cita me tenía demasiado nervioso y angustiado, y todo empeoraba porque debía actuar con seriedad, por lo que mi apetito no era muy grande. De hecho, mi estómago estaba revuelto.