¿Me estás viendo el culo?

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Pov. Jade:

Mi cuerpo encajaba perfectamente en el suyo, en aquel momento éramos dos almas completamente unidas, mi corazón era suyo, hoy veía todo con más claridad, en aquel instante, teniéndola a ella a mi lado de aquella manera, supe cuánto puede llegar a sorprenderte el corazón, como el amor jamás tiene un límite. Siempre supe, que con ella nunca tendría suficiente, y eso, cada día, me hacía poder amarla más, nada de lo que ella hiciese podría hacer cambiar mis sentimientos, este día había sido perfecto en todos los aspectos. Todos pensamos en algún momento lo genial que podría llegar a ser encontrar a tu alma gemela. Pero nadie dijo que "Esa alma gemela" debía de ser exactamente como tú, Perrie era todo lo opuesto que yo y solo con ella pude llegar a entender, lo absurda que aquella frase podía llegar a sonar.

Cuando amas a alguien, y es realmente reciproco, no importa cuanto haya en común, cuanto quieras o cuanto desees de alguien, porque nadie es perfecto, lo único que importa es aprender a amarse a uno mismo, para así aprender a amar cada defecto de la otra persona, en mi caso, yo me enamoré de una mujer mala, mujer que hacía todo y más para mantener su corazón frio y aislado del calor, alguien que no sabía cómo sonreír, con secretos que, a cualquier persona medianamente cuerda, le harían alejarse, una mujer cual jamás pensé poder llegar a amar. Pero nunca hay que decir nunca, porque ahora mismo, esa mujer "tan mala" estaba acostada a mi lado, abrazándome como si fuese el último caliente contacto humano que fuese a sentir junto su piel, ella, había hecho que aquella frase... fuese completamente insignificante, porque no necesitas un alma gemela, cuando se tiene un polo opuesto en tu vida, porque el bien no puede existir sin el mal, y el mal no puede existir sin el bien. Y pese a que Perrie en aquel momento era el mal, en este mismo instante ella estaba siendo todo lo bueno que yo llegué a necesitar.

–Te amo Perrie –, susurré contra sus labios. –Te amo hasta no poder decir basta...

–Yo también te amo pequeña, –. Posó un delicado beso en mis labios, mis ojos se cerraron involuntariamente al volver a sentirla después de aquellos largos minutos.

Sentí un enorme alivio en el cuerpo. Sentir su cuerpo desnudo junto al mío, el calor que emanaba su piel y el dulce aroma que desprendía, hacía que todos y cada uno de mis músculos se relajasen junto a los de ella.

Todo el miedo que sentí al escuchar a mis amigos hablar sobre "Una primera vez" se redujo en nada cuando todas sus caricias y besos empezaron a transcurrir, ella transmitía una fuerte confianza en mí, como si mi personalidad cambiara de forma radical. Perrie me hizo el amor, me hizo sentir amada.

Aun con la respiración agitada, traté de dejar que mis pensamientos fluyeran con tanta intensidad, y me dispuse a dormir, junto a ella.

Pov. Perrie:

El odioso sol me despertó golpeando con más fuerza que el día anterior mi rostro. Traté de incorporarme, pero en seguida noté a la hermosa niña que había sobre mi pecho, durmiendo serena. Estiré mi brazo tratando de alcanzar el teléfono, Jade murmuró algo cuando lo intenté así que volví a la misma posición. Enfoqué mis ojos en el reloj que había al otro lado de la habitación, forzando mi vista que estaba nublosa a culpa del sueño, las doce del mediodía. No era tan tarde después de habernos dormido casi a las cinco de la mañana.

Sonreí al recordarlo, Jade hizo de aquella una noche perfecta. Con ayuda de ambas el miedo se esfumó y simplemente dejamos que todo sucediera, Jade fue más mía que nunca la noche anterior, ella nunca se rindió conmigo, haciendo de mi alguien mejor, Jade era el amor de mi vida y a día de hoy seguía sin ser consciente de lo afortunada que era por ella estar a mi lado. Ella consiguió que le hiciese el amor cuando anteriormente solo era una noche y al día siguiente yo ya me había marchado antes de que la otra chica despertase. Miré a Jade desde arriba, contemplando su belleza.

I'm in love with a dirty | Jerrie thirlwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora