Nevermind

17

La puerta comenzó a sonar con desesperados golpes provocando que ambos nos separemos rápidamente con cierto rubor en las mejillas por parte de los dos.
- Creo que iré a tender- dijo Niall tímidamente mientras yo asentía con la cabeza. Un esbelto joven apareció al otro lado con otro mas detrás de el. El que iba adelante; un chico de cabellos castaños, realmente atractivo, con hipnotizantes ojos color café, ¿y que puedo decir del moreno? Tenía una hermosa sonrisa en todo su rostro, y unos ojos miel que arropaban todo lo que se movía; esbocé una sonrisa.
- Te agradezco que hayas venido Liam.. De verdad- dijo Niall. Al parecer el castaño se llamaba Liam, y al parecer también, era doctor o algo por el estilo.
- Descuida hermano- respondió con una voz ronca- El es Zayn..- presentó al chico de atrás.
- Hola- nos saludó a ambos tímidamente con la mano. Le sonreí divertida a el y a Liam. Luego Liam volvió a girar su rostro hacia Niall.
- Y bien… - alzó las manos- ¿Cuál es el problema?
- Es su hermana- le explicó Niall señalándome- Tiene un problema grave.. ¿sabes? No hay tiempo para contarte toda la historia, porque es larga, pero necesito que la veas en este mismo instante..
- Por supuesto..- asintió mientras seguía a Niall hacia la habitación y yo me quedaba sola allí con Zayn. El moreno tenía la mirada puesta en mi, y no quería girar el rostro para encontrarme con sus ojos; nunca había tenido el valor de hacerlo con cualquier otra persona. Nunca me enseñaron a saludar a quien no conozco; a sonreír a quien me sonríe en cualquier ocasión. Era una de esas personas que tenían que aprender todo nuevamente. Que tenían que levantarse de un golpe, después de una enorme caída.
- ¿Qué hay?- musitó finalmente. Lo miré; su sonrisa se desprendía de lado a lado mostrando una hilera de dientes blancos y perfectos.
- no mucho- me encogí de hombros- ha sido un día realmente extraño.. 
- ¿ha pasado algo malo?- frunció el ceño acercándose mas a mi en aquel sillón. Pronto lo tenía en frente.
- Algo así- admití- La chica que esta en la habitación- suspiré- es mi hermana… Ella esta realmente mal ¡y todo es mi culpa!- deje caer mi rostro entre mis manos mientras una lagrima comenzaba a caer. Sentí su brazos acariciando mi hombro intentando darme consuelo y tranquilidad.
- tranquila.. Tranquila.. No llores- me pidió con una voz de compasión.- seguro que no es tu culpa.. Estoy seguro que tu no le harías eso a alguien
- No me conoces- lo miré.
- Podría hacerlo..- musitó- ¿me quieres contar lo que pasó .. O prefieres que sea algo personal?- lo miré. Nunca le había contado la historia a nadie, hasta que hablé con Niall, y las cosas habían salido bien hasta ese momento. Si no se lo hubiera dicho quizás nunca hubiera encontrado a mi hermana, y quizás ella hubiera muerto allí. Supongo que debía abrirme mas a las personas; era la razón por la cual salía herida. No le daba a las personas el tiempo de conocerme, ni a mi el tiempo de conocer a las personas. 
- Cuando niña tuve una infancia linda- sonreí- jugaba con ella, hacíamos castillos en la arena, las muñecas eran nuestras amigas, hasta que mi papá se quedo sin empleo- le conté con lujo y detalle, el parecía escuchar atento todo lo que decía, Abriendo los ojos de vez en cuando. Nuevamente podía sentir como si estuviera volviendo al pasado y viviendo aquello. El nuevamente me ponía una mano en el hombro para intentar calmarme; pero era imposible, el solo pensar que mi hermana estaba allí completamente herida, sin haber comido hace quizás cuanto tiempo, llena de golpes por todas partes, y marcas, y cicatrices, pensar que la había decepcionado, había echo algo que nunca debí haber echo, la había decepcionado completamente, era el ejemplo excelente de una mala hermana, me sentía como en el final trágico de la película en el que todos se tapan los ojos para no llorar de la pena.
¿Y que pasaba si no se recuperaba? ¿Qué si nunca podía volver a levantarse? ¿Qué pasaba si realmente estaba mal? ¿si tenían que llevarla al hospital? ¿si le pasaba algo mas? ¿si tenía algún tipo de enfermedad?
- Todo estará bien… Lo prometo- musitó cuando terminé de contarle la historia. Sus ojos color miel me hipnotizaban provocando que una leve sonrisa saliera en mi rostro. La puerta del cuarto donde estaba mi hermana se abrió provocando que me levantara rápidamente.
El rostro de Niall apareció en la puerta seguido por el de Liam. 
- Liam ya tiene los resultados- suspiró mirándome.