Mientras Inglaterra duerme.

Capítulo 11

-Es una pena que nadie nunca te verá así. Este lado tuyo es sólo para mis ojos, para mi, sólo yo puedo verte así- dijo, pero todo se sentía tan bien, siguió metiendo su polla dentro mío, hasta que...

-¡Ya regresé!- dijo Eve entrando, me quité el antifaz, lo miramos, él gritó y salió de la habitación, me asusté, quería morirme. Me alejé de Sebastian y me caí de la cama. -James- dijo, agarré la sábana y la enredé alrededor de mi cintura. -James, escucha...- decía Sebastian, me senté en una esquina sin luz, Sebastian se volvió a poner los calzoncillos y el pantalón. -Oye, fue sólo... un accidente- dijo acercándose a mi. -Nos miró- dije. -No sabíamos cuando volvería, fue un accidente- dijo y me abrazó. -Oigan- dijo Eve desde afuera de la habitación. -Qué pasa?- preguntó Sebastian. -Ya puedo entrar?- dijo, me puse rápidamente mi ropa interior y mi pantalón. -Sii, ya puedes- dijo Sebastian. Eve, entró, todo se sentía incómodo. -Me daré una ducha- dije y entré al baño con ropa limpia en mis manos.

Sebastian.

James entró al baño, yo me senté con Eve en el sofá, no se atrevía a mirarme. -Eve, qué tanto miraste?- pregunté. -De verdad quieres saberlo?- dijo. -Sii- -Miré cuando estabas sobre él, follando... ¡Mis ojos se quemaron!- -Oye, está bien, la culpa fue mía, no sabía cuando ibas a regresar- -No pudieron esperarse hasta regresar a casa?- -No- dije sonriendo. -Sebastian, ahora todo se volverá incómodo, ya quiero volver a casa - -Fue sólo un accidente, un descuido- -Hoy dormiré en el sofá- -Bien, si eso te hace sentir un poco mejor, está bien- -Sólo prométeme algo- -Claro, qué es?- -No lo vuelvan a hacer en mi presencia- -Lo prometo- -Que no se te olvide- -Sii- dije. Finalmente se arregló.

James.

Era ya más noche, Eve durmió en el sofá, Sebastian había hablado con él, nadie decía nada. -James, puedo dormir contigo?- dijo Sebastian parado a lado mío. -Tienes tú cama- dije mirándolo. -Es que, yo quiero estar contigo- -Ya cállense- dijo Eve desde el sofá y nos lanzó una almohada. -Lo siento- dijo Sebastian y regresó a su cama. -Parece que no puedes tener suficiente, Sebastian- volvió a decir.

La semana fue rápida, volvió la confianza, y regresamos a Inglaterra, íbamos saliendo del aeropuerto británico. -"Obeshchay, chto ne budu nichego govorit', prosto byt' sredi trekh"- dijo Sebastian sin apartar la mirada del frente, hablaban en ruso. -"Da, ya obeshchayu"- dijo Eve igual. -"Eto byl neschastnyy sluchay, nedosmotr"- -"Da, ya ponimayu, ya yasno"- -"YA govoryu vam na russkom yazyke, tak chto on ne budet slushat' "- -"YA znayu, no eto to, chto on uzhe znayet"- -"Khorosho. I ya ochen' vdokhnovleny, ya mogu nachat' pisat' "- -"YA dumayu, chto tol'ko imeya seks vdokhnovlyayet vas"- dijo Eve y ambos rieron. -Bien, vallamos hasta donde está mi auto- dijo Sebastian. Caminamos hasta el estacionamiento, y subimos a su auto, yo me senté al frente con él, y Eve en el asiento trasero.

-Cómo Eve aprendió los mismos idiomas que tú?- pregunté. -Durante esos 4 años le enseñé, es muy bueno aprendiendo- dijo. De alguna manera, yo también quería aprender, pero no los que él ya sabe, quería aprender idiomas nuevos para ellos.