4. El trato.

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—Malfoy despierta.

El rubio entreabrio los ojos para encontrarse con la cara de su amigo Theodore.

—¿Que quieres Nott?—preguntó medio dormido, mientras se resfregaba los ojos con las palmas de las manos.

—Es hora de ir a clase, llevó más de media hora tratando de despertarte ¿qué ocurre contigo?

Draco se sentó en la cama y miro alrededor de la habitación; sus otros compañeros ya no estaban, y claramente sabía que se había quedado dormido. Sólo recordaba haberse dormido tarde, sus pensamientos lo habían llevado hacia el insomnio.

—Maldición..—se puso el pantalón apresuradamente. No tenía ninguna gracia llegar tarde a una clase de Snape. Sobre todo él, que siempre llegaba temprano a todas las clases no quería perder ese ritmo.

—¿Que ocurre contigo?—repitió su amigo, sentado en su cama. Draco observó como Theodore ya estaba peinado, vestido y seguramente ya habría desayunado.

—Me dormí tarde— respondió rápidamente, la camisa blanca logró entrar por su cabeza despeinando su cabello, se lo arreglo pasándose la mano y acomodando su cabello hacia atrás— Ya sabes..

—¿Granger?—Miro a su amigo como quien mira a un loco. Nott no tardó en largar una carcajada.

—¿De que hablas?

—No soy idiota Malfoy, yo ya lo sé.

—Cállate—Ordenó, su amigo sonrió al escucharlo, Malfoy resultaba ser muy orgulloso cuando quería pero esta vez no iba a hacerle la contra, se quedaría callado, ya suficiente tenía su amigo por despertarse tarde y perderse el desayuno.

—Haz algo con esas ojeras— aconsejo mientras salía de la habitación hacia la sala común, seguido de cerca por su amigo rubio que no dejaba de refresgarse los ojos—Y lávate la cara ¿quieres?

No tuvo tiempo para el desayuno, como el temía. Tuvo que ir a clase sin comer nada, llegó justo antes de que el profesor entrará por la puerta y haga callar a todos. Se sentó en los asientos de adelante a lado de Pansy, que parecía encantada por tener al rubio sentado con ella. Malfoy estaba consiente de que el trío de oro estaba tan sólo a unos pocos bancos de él. Escuchaba sus murmullos y la risa de Ron. Y la voz de Hermione regañando a sus amigos, "puede llegar a ser muy mandona" pensó mientras revolvía la poción en su caldero distraídamente.

—Malfoy.

La voz del profesor le hizo volver a la tierra y dejó de agudizar el oído para escuchar la voz de Hermione, casi se avergonzó de eso. Miro al profesor que estaba parado delante de ellos y lo miraba sin expresión en su frío rostro.

—¿Si?—preguntó algo sobresaltado.

—Te hice una pregunta Malfoy.

Esta vez si se avergonzó. Miró de reojo a Pansy para que lo ayudará un poco pero ella no se dio ni cuenta.

—¿Puede repetirla?

El profesor resoplo y se acercó más a Malfoy.

—Presta más atención Malfoy, deja de volar en tus estúpidos pensamientos.

Tragó en seco y trato de aclararse la garganta.

—Si profesor—respondió, casi tan serio como Snape.

En cuanto se alejó, escucho la voz chillona de Pansy casi aturdiéndolo.

—¿Que te sucede?—Preguntó mirándolo—Estas desconcertado Draqui.

—Sólo estaba concentrado en la poción—mintió, ignorando por completo lo de Draqui, ni siquiera lo notó.

—Esta bien..—Aún así, Pansy lo miro con sospecha, sabía que el no solía actuar así de raro. Pero no hizo ninguna otra pregunta sobre eso, sin embargo noto las ojeras que estaban debajo de los ojos de su amigo—¿No dormiste bien?

"Mi" sangre sucia [Dramione] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora