☁Mi Ángel Guardián☁

Capítulo 9: "Te amo Ángel"

Nota mi presencia y me observa detenidamente a lo lejos. Parecía de unos 17 años pero no se desde hace cuánto tiempo.
Se empieza a acercar.
-¿Quién eres y qué haces aca?
-Se que eres un vampiro- sé, que actúo esa cara de sorprendido.
-No existen, y por lo tanto no soy uno.
-Lo eres, vos me mordiste en el cuello hace un mes cuando dormía-miró hacía abajo como si estuviera pensando.
-Mi casa esta aquí cerca, dentro del bosque. Sería más seguro hablar allí.
-Hablemos aquí. Entonces admites ser un vampiro, ¿No?
-Hablamos en la casa. Camina-ordeno.
Me quedo parada mirando, se da cuenta de que no lo sigo y para de caminar. Me mira y me indica con la mano que camine. El no era quien para ordenarme que hacer y que no.
-Yo caminaré alejado, a unos 50 metros de vos, así me tendrás vijilado angelito.
Era lo que se dice peligrosamente bello.
Dudo, porque no se si hay más vampiros en la zona pero sigo mi instinto y asiento.

Caminamos durante 15 minuntos hasta que llegamos.
Intenté no admirarlo a sus espaldas mientras caminabamos, tal vez sentía mi mirada o algo así.

Era una mansión. Totalmente pintoresca de ladrillos y con techo de tejas. Debía ser muy antigua pero así y todo estaba en perfectas condiciones.
Llegamos a la puerta principal y abrió la puerta para que pueda pasar.
-Gracias-no respondió.
Si fuera humano diría que era un antipático, pero no lo era.

Se sentó en un gran sofa y palmeo a su lado para que yo me sentara. Pero no lo hice.

-Y bien... ¿Por qué me buscaste?-Dijo en un suspiro.
-Porque tal vez tengas información que necesito.
-Esta bien, escupelo-dice para que empiece a interrogar.
-¿Los Lidgude tienen algo que ver con que me mordieras?
-Si.
-¿Son amigos...?-digo y temo a que la respuesta sea si.
-No.
-¿Te dieron algo a cambio?
-No.
-¿Entonces accediste a matarme porque si?
-No.
Ya me exasperaba pero en cambio, el estaba relajado en el sofa respondiendo tranquilamente.
-¿Me vas a intentar matar de nuevo?-digo sin que mi voz tiemble.
-No.
-¿Y qué es lo que te detiene?-Desafio.
-Que no quiero hacerlo.
-¿Por qué no? Si ya lo hiciste por nada a cambio y sin un nexo con ellos.
-Porque no fue a mi voluntad-dijo enderezandose en el sofa y poniendose tenso.
Sus hermosos ojos verdes penetraron los mios y sentí electricidad.
-¿Cómo?
-Me secuetraron e intentaron convencerme de matarte y a cambio darme más poderes. Yo no acepte y entonces utilizaron control mental para obligarme.
Estaba en mi cuerpo y pensaba como siempre, pero no podía controlarlo-dijo perturbado.
-Debió ser horrible-digo bajando la mirada aunque el siga mirándome fijamente.
-Perdón por pensar...
-No hay problema, entiendo-entendiendo y todo su expresión seguía siendo neutra.
-Y, cuando te secuestraron, antes de que dijeras que no, ¿te dijeron algo de su venganza?
-No detalladamente pero algo del solsticio de invierno, del infierno y de mayor poder. En esa fecha atacarían.
-Estan más informados... Me llevan demasiada ventaja.
-Ellos serían como un humano tratando de matar una pequeña hormiga.
-Debe haber alguna manera... Perdón seguro tienes cosas que hacer-digo sacudiendo la cabeza.
-No me molestas, ayudarte es lo menos que puedo hacer-dice y esos ojos... No.
-Es que no te quiero molestar y además no te conozco y no se si es un plan de ellos-digo con miedo.
-Tienes razón, no tienes porque confiar a no ser que...
Y sacó una bolsa llena de un polvo violeta.
-Es un polvo que conecta a un angel en tierra con el cielo. Es como si tu espíritu estuviera allí arriba, y nadie te ve, ni los Lidgude...-Dice levantando las cejas juguetonamente.
-¿Cómo se que es real?-Digo fría, no pensaba seguirle el juego.
-Muestraselo a tu bruja y después ven cuando funcione.
-¿Cómo sabes de mi bruja?
-Tu sola no me podrías haber localizado, se necesita un hechizo y no eres una bruja.
-Esta bien ¿Y cómo es que me vas a ayudar?
-Como ya te proporciono lo del polvo y por lo tanto la información que necesitas, pensé en ayudarte a pelear o crear alianzas.
-¿Quién dijo que necesito ayuda?
-Eres una novata y te enfrentas a algo muy grande. Eres fuerte pero no tanto.
Iba a decirle que era fuerte y mandarlo a la mierda pero tenía razón.
-Esta bien, me parece bien-digo sin poder disimular lo terca que soy.
Me mira y noto que su boca se curva un poco, tal vez una sutil sonrisa.
-Alto ¿Por qué tenías el polvo?
-Supuse que vendrías y desconfiarías de mi.
-Inteligente de tu parte-digo frunciendo el seño y mirando a otro lado pensativa.
-¿Te ofrezco algo para beber?
-Recuerda que todavía no confío en vos-digo sonriendo mientras lo miro.
Si, sonrió. Una sonrisa hermosa.

Me abre la puerta y salgo.

El sale y se queda en la entrada conmigo.

-Estaremos en contacto si es que eres confiable.
-No te decepcionare.
-Más vale-digo y empiezo a caminar.
-¿Cuál es tu nombre?-grita por la lejanía.
-Kylie Mayers, ¿y el tuyo?
-Owen, Owen Walker-dice y sonrie.

Doy media vuelta y si sigo caminando.

Owen...

Miro el reloj y noto que pase una hora y media con el.
Quería confiar en el pero no debía hacerlo hasta que me probara que era confiable.

Llegué al auto luego de atravesar el bosque y procurar estar alerta por cualquier adversidad.

Abro la puerta del auto y me siento atrás.
-¿Y bien? ¿Dijo algo?-dijo Stefan ansiosamente.
-Hablemos en la casa, aquí no es seguro.
-Tienes razón, vamos-dijo Marina y arrancó el auto. La expresión en el rostro de Stefan era graciosa. Estaba entre indignado y ansioso, que es igual a un Stefan movediso que no paraba de moverse en el auto. Dejaba caer sus brazos desganadamente y me miraba haciendo puchero. Es tan gracioso.

Llegamos a la casa de Stefan y su mamá no estaba, así que podríamos hablar sin tener que estar pendientes de que aparezca.

Nos sentamos en el gran juego de sillones y les conte toda la imformación que me brindó Owen.

-Bien, no se nada sobre el Solsticio de invierno y como influye en los poderes o el infierno o todo eso. Pero podemos usar Google-dice Marina, una abuela moderna que usa internet.
-Yo busco-dice Stefan y saca su Iphone 7 plus.
-Bien... haber... listo.
Solsticio de invierno en las sombras.
Se trata de una festividad clave. Si bien el Solsticio es solo el 21 de junio, en las sombras este empieza el 20 a la noche y acaba el 21 a la noche. Es el día más oscuro del año. Una noche en la que cualquier angel puro puede unirse a Satanás y arrastrar a quien quiera al infierno. Además de obtener grandes poderes.

Stefan quedo con la boca abierta y la mirada perdida luego de leer.

-Nos estamos enfrentando a algo de verdad muy grande-dice Marina preocupada.
Yo no podía ni hablar del miedo.

-Todavía no sabemos si el vampiro dijo la verdad...-Apenas logró decir.
-Dame el polvo, veré si es de verdad.
Empezó a hacer cosas con las manos sobre el polvo.
-Es real. Usalo, cuanta más información mejor.
-¿Cómo funciona?
-Te pondré un poco con agua y te la tomarás. Para nosotros estarás durmiendo pero en realidad tu alma estará en el cielo.

En ese instante caí en todo lo que estaba pasando, todo tan rápido. No había llegado a procesarlo totalmente. Ángeles, Arcangeles, brujas, magias, Satanás, vampiros, que mi alma se desprenda de mi cuerpo para espiar al enemigo, y el hecho de no ser más una humana.

Era mucho. Pero valía la pena. Siempre vas a valer la pena Stefan. Y aunque el miedo intenté apoderarse de mi, te juro por mi vida que lucharé. Porque ahora, mi único propósito en la vida eres tú.

Bebí del vaso y me recosté.
Lo único que llegue a ver antes de quedar dormida fue a Stefan tomándome de las manos, y como sus ojos negros dejaban caer un par de lágrimas.
Y en su boca una sonrisa.
También escuché algo en un tono coqueto pero triste.
"Te amo Ángel"

Este capítulo se lo dedico a @xxChiarMuttixx y aportar ideas cuando la historia se empieza a poner complicada. Sin vos no hubiera podido. Gracias por tu apoyo incondicional y por ser mi unica fan.

❤SAnOniMA❤