Di vueltas por la cama, no podía dormir, no podía hacer nada que no tuviera que ver con ella, maldita sea, la quería, por que tenia que ser esto tan difícil? Por que no podía caer como las demás, no, no de esa forma.
Quererme o desearme por lo menos como las demás chicas.
Estaba derrotado, habia sentido lo que por años hice sentir a las chicas, te lo mereces Harry, pensé. Pero ella no se merecia la palabra que le habia dicho “Zorra” tenia que disculparme por eso. Pero ahora no, ella tenia cosas que asimilar, al igual que yo también ¿Estaria loco si dijera que estoy dispuesto a que me use con tal de estar con ella?
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No habia podido cerrar mis ojos en tres largas horas. Esto iba a ser horrible. ¿Cómo podía si quiera verlo a la cara? Las clases se renaudaban hasta el lunes y apenas era miércoles ¿Qué iba a hacer? ¿Hacer como si un hubiese pasado nada? Pero el me odia, lo vi en sus ojos, seria mejor irme de aca, pero no podía regresar con mis padres, no por esto, quería ver a Louis, podría quedarme con Perrie algunos días, claro! Si ella accediera a eso. Eran las 4 aporoximadamente cuando me vencio el sueño y mis pensamientos se convirtieron en nada.
La luz del dia me encandilaba, aun seguía con esa camiseta vieja y gris de anoche, aun sentía el aroma de Harry entre mis sabanas, joder.
Al parecer el no quería sexo, solamente, esperaba algo de mi, pero yo no podía ofrecerle nada, no lo quería, me atraía pero solo era eso, no lo “amaba”, lo quería, como a un amigo, como a un hermano. No podía y no quería quererlo mas de lo que ya lo hacia.
Me metí a la ducha, sentía como el agua caliente pasaba por todo mi cuerpo haciéndome estremecer, las caricias de Harry anoche las podía sentir de nuevo. Me estaba torturando, yo sola, sabiendo que jamás pasaría de nuevo.
Sali del baño y me puse algo cómodo, no tenia intención de salir a alguna parte. Afortunadamente no había señales de vida de ninguno.
Me prepare desayuno y me sente a ver la televisión, prepare algo de comida para los chicos, ya eran mas de las 4 de la tarde y ninguno aparecia.
Tome mi celular y llame a Perrie
- Tenemos que hablar – sollocé ¿Por qué lloraba?
- ¿Qué pasa? ¿Estas bien? ¿Quieres que vaya para allá?
- No, ire a tu casa, los chicos no están
- Esta bien, te espero aquí, tranquila ____
- Estoy en 15 en tu casa
Limpie la lagrima que había logrado salir. No podía llorar por un chico que no valía la pena.
Fui al closet y tome una chaqueta seguido de unos pantalones y mis vans. Salí del cuarto para toparme con la mirada de Harry, era diferente, todo era diferente.
- Hola Harry – sonreí –
- Hola – siguió caminando hasta perderse tras cerrar la puerta de su cuarto.
Suspire y mordí mi labio, no puedes sentirte asi ____ no has hecho nada malo. ¿Debía ir a buscarlo? Tome mi celular y teclee un mensaje “Ya estoy bien, mañana iré a buscarte para ir de compras, de paso te cuento todo, te quiero, gracias amiga” guarde mi celular en el bolcillo, acomode mi chaqueta y camine al cuarto de Harry.
Llame dos veces, pero no respondía, iba a tocar por tercera vez y este abrió.
- ¿Qué? – bufo
- ¿Estas enojado?
- ¿Deberia estarlo?
- No lose, es solo que tu