Después del primer amor.

Te amo.

Antes de abrir la puerta, Alex me detuvo y me tomó de la mano llevándome hasta el banco que estaba en el patio de mi casa, me miró a los ojos y me dijo:
“Mery, ya hace bastante tiempo que estamos juntos, y quiero que sepas que eres lo mejor que pudo pasarme, que nadie jamás había llegado a quererme y a hacerme sentir de la misma forma en la que tú lo haces. Eres un ser increíble, lleno de luz y de alegría, siempre estás ahí para hacerme sentir mejor, siempre me levantas el ánimo cuando mi mundo se derrumba. Perdona amor mío, perdona si te suena a pasteladas, pero quiero hacerte saber lo mucho que me importas, después de haberlo pensado tanto, creo que es un buen momento para decirte que te amo, de verdad, te amo y te quiero con cada latido de mi corazón...”
En ese momento, me quedé sin palabras, el amor de mi vida me estaba diciendo que me amaba, y no pude evitar que mis mejillas se sonrojaran demasiado, y entre abrazos y sonrisas, le respondí:
“Lo que me acabas de decir, es lo más lindo que me has dicho hasta hoy, ya sabes lo mucho que te quiero, y sabes que siempre estaré aquí para levantarte cuando te caigas. Tú eres mi niño, y yo te voy a proteger siempre, porque tú lo has hecho conmigo, también has estado en todo momento atrás de mí, me has regalado los mejores días y meses de toda mi aburrida vida, y aunque no he sido la mejor del mundo, tú has hecho mejor mi mundo, y debes saber con certeza, que te amo, que te amé desde el primer momento que tus labios rozaron los míos, te amé desde la primera vez que tomaste mi mano, dándome la paz que necesitaba, te amé desde la primera sonrisa, desde la primera vez que hicimos el amor, te amé desde que supe que cambiarías mi vida para siempre.”