16. La Verdad

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*Unos minutos antes*

Annily se levantó de golpe, sobresaltada, con pequeños fragmentos de pesadillas atormentandola. Parpadeo rápidamente para aumentar aquello horrible que su mente reproducia. Miró a su alrededor, y se sintió desorientada: se encontraba en un sitio al que no recordaba haber ido, y que tampoco nunca antes había visitado, estaba tallado en piedra y el piso se podía sentir húmedo.

Se sentó, sus ojos desconcertados pasaron del inmenso cuerpo de una enorme serpiente a un Harry, con la túnica empapada de sangre, y luego al cuaderno que éste llevaba en la mano.

—Potter…, ¿Que ha pasado? ¿Donde estamos? ¿Que es todo esto?

—Estamos en la Cámara de los Secretos, te explicaré todo después, solo puedo decirte que ha terminado todo bien —dijo Harry, tomando el diario para enseñarle a Annily el agujero quizás hecho por el colmillo que él tenía en la otra mano —. Ryddle ya no existe. ¡Mira! Ni él ni el basilisco. Vamos, Annily, salgamos…

—¿Ryddle? ¡Él es Voldemort— anuncio escandalizada.

Harry la tranquilizó.

—¿Eso es de un basilisco? —pregunto Annily horrorizada al ver el gran cadáver.

—Ya no puede hacernos daño, está muerto al igual que Ryddle —volvió a explicar Harry.

—¿Voldemort murió?

—Es algo muy complicado de explicar ahora, hay que salir primero de aquí.

Un Fénix los estaba esperando, revoloteando en la entrada de la cámara. Harry ayudo a Annily a ponerse de pie. Dejaron atrás el cuerpo retorcido e inanimado del basilisco, y a través de la penumbra resonante regresaron al túnel.

Se oyeron cerrarse las puertas tras ellos con un suave silbido. Tras unos minutos de andar por el oscuro túnel, se escuchó un distante sonido de piedras siendo aventadas.

—¡Ron! —gritó Harry, apresurándose —. ¡está bien! ¡La traigo conmigo!

Oyó que Ron daba un grito de victoria, y al doblar la última curva vieron su cara que asomaba por el agujero que había logrado abrir en el montón de piedras.

—Bien —dijo Ron— He logrado abrir un agujero lo suficientemente grande para que puedan pasar... ¡Vamos, dejame ayudarte!

Ron extendió uno de sus brazos para ayudar a Annily a pasar. Annily lo tomó, y Ronald la ayudo a subir entre el montón de piedras hasta el agujero.

—Casi no le ha hecho nada —añadió Harry— Un moreton en la frente, y la cortada del brazo... es un corte muy profundo.

Ya del otro lado, Annily se tocó la frente, evidentemente le dolía cuando lo hacía, mientras que en su antebrazo estaba la cortada con sangre seca a su alrededor. Lucía demasiado mal.

—Se pondrá bien, Madame Pomfrey la ayudara —dijo Ron, examinándola— Todo ha pasado. ¿De dónde ha salido ese pájaro?

El Fénix había pasado por el agujero después de Annily.

—Es de Dumbledore —dijo Harry, encogiéndose para pasar.

—¿Y cómo has conseguido esa espada?— dijo Ron, mirando con la boca abierta el arma que brillaba en la mano de Harry.

—Se los explicaré cuando salgamos —dijo Harry, mirando a Annily de soslayo.

—Pero… — intento Ron

—Más tarde —insistió Harry.

Annily estaba tan confundida, las pesadillas la hacían confundirse con lo que había pasado en la realidad. No recordaba absolutamente nada, solo tenía un recuerdo de haber luchado con Ginny, que estaba poseía por Voldemort. Pero después de ahí había una laguna negra de recuerdos.

The Half Blood Princess (Harry Potter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora