Inesperado Chocolate

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Pareja: Haru x Yamamoto    

Inesperado chocolate

No negaría que en esos momentos se encontraba un poco incomodo y mas por la mirada que le lanzaban todos sus compañeros, bueno no es que le importara aquello pero el hecho era que se trataba precisamente de ESE día, si San Valentín, no sabía porque pero siempre recibía demasiados chocolates y pues él no era como Gokudera que rechazaba sin ningún sentimientos los presentes, no, él no podía y mas al ver el esfuerzo que ponías las chicas al hacer aquel chocolate, claro el solo lo aceptaba por cortesía sin ningún sentimiento de por medio y la razón era simple, el no estaba interesado en ninguna más que solo ser su amigo. Aun no se había enamorado y sabía que aquel sentimiento le llegaría de golpe como esa sensación que tiene cuando esta por lanzar la pelota al bateador, solo debía esperar.

Sosteniendo su maletín lleno de cajas de chocolates se dirigió al campo de entrenamiento ya que no tenía nada que hacer, no tenía ningún plan con sus amigos, Gokudera había huido al saber que su hermana lo buscaba para entregarle un chocolates y Tsuna saldría con su novia, se alegraba por el aunque nunca pensó que estaría con aquella joven azabache tan distinta a él o incluso a Kyoko, no lo negaría se sorprendió que su amigo castaño estuviera con otra persona que no fuera la peli naranja, el siempre creyó que ellos de alguna manera terminarían juntos pero parece que el destino te daba sorpresas, aun podía recordar las palabras que le dijo Tsuna cuando le pregunto el porqué había dejado de amar a Kyoko – ‹‹yo creía estar enamorado de Kyoko-chan pero cuando la conocí pude saber que el amor se sentía de una distinta manera, estoy seguro que lo sabrás cuando veas a esa persona›› – después de decir aquellos su amigo se había sonrojado a tal extremo que parecía un semáforo para después ponerse nervioso por lo que le habia dicho, Tsuna siempre era sincero con él, por eso sabia que sus sentimientos hacia la azabache eran verdaderos, por unos momentos deseo tener ese mismo sentimiento.

Detuvo sus pensamientos cuando escucho un fuerte ruido, dejo su maletín en el suelo y fue corriendo hacia la bodega, se quedo quieto cuando miro a una joven castaña en el suelo mientras recogía los bates que había hecho caer, no pudo evitar reírse un poco y mas al ver como un pequeño trapo estaba en su cabeza, se acerco a ella para posicionarse a su misma altura y poder quitarle el objeto sorprendiéndola.

– Yo, Haru – la saludo con su habitual alegría, veía como la castaña se sonrojaba ante su acercamiento, su sonrisa se agrando ante este hecho –  ¿Qué estás haciendo? 

– Y-Yamamoto-san, H-Haru está buscando una pelota – de cierta manera le gustaba que estuviera nerviosa aunque ahora se preguntaba el porqué estaría buscando una pelota y mas en Nami chuu.

– Ya veo entonces te ayudare, es mejor que la busquemos entre ambos así tardaremos menos en encontrarla – dio una ligera carcajada al escuchar su típico "Hahi" mientras sus ojos se abrían por la sorpresa para después verla un poco dudosa aunque al final acepto "de acuerdo-desu~" – y de qué tipo es tu pelota.

– Una pelota de béisbol-desu~ –  y aunque fue un susurro, el pudo escucharla se coloco de pie mientras se remangaba su chompa.

Y comenzó la búsqueda, después de un determinado tiempo no encontraron nada, lo más raro era que no había ninguna pelota, y como si la iluminación hubiera hecho acto de presencia recordó algo – jajaja Haru hoy habrá entrenamiento así que las pelotas deben estar en el campo de entrenamiento.

– ¡Hahi! – la vio salir apresuradamente de la bodega mientras él la seguía no tardo mucho en alcanzarla – Haru debe encontrarlo antes de que lo destrocen – no entendía a que se estuviera refiriendo ya que si era una pelota era imposible que se destrozara y tal como había dicho ahí se encontraban, ahora la cosa era encontrarla.

– ¿Y cómo es la pelota? – no era como si no supiera la forma de una pelota de beisbol, pero esperaba que esta tuviera un distintivo que los ayudara.

– ¡Hahi! La pelota de Haru es... –  Veía como su cuerpo se tensaba para después temblar y ponerse nerviosa además de en que ningún momento lo miro – Yamamoto-san lo reconocerá cuando la vea-desu~ –  si ella le aseguraba eso entonces estaba seguro que la reconocería, habían demasiadas pelotas como para que pudiera saber de cual se trataría y fue entonces que una llamo su atención, esa pelota brillaba con la luz del sol, se preguntaba cómo era posible y solo cuando la sostuvo en su mano lo descubrió, no se trataba de una pelota normal, aquello era un envoltorio de color blanco con líneas rojas que le daban ese aspecto, un pequeño lado esta rompiéndose y vio que el interior era de un café claro, lo acerco a él y sintió el olor a chocolate, así que a eso se refería cuando dijo que lo reconocería.

– ¡Haru! – la llamo y al verla voltear se la lanzo con suavidad (algo que no era común en el cuándo se trataba de lanzar una pelota) el chocolate con forma de pelota.

La joven castaña lo agarro mientras daba pequeños gritos de alegría –  ¡lo encontramos! – se alegraba por ella aunque se preguntaba para quien seria, y sus respuestas fueron respondidas cuando la vio lanzar el chocolate hacia él, sus ojos se abrieron en sorpresa mientras lo atrapaba – es para Yamamoto-san.

Empezó a reírse como si tratara de una conversación normal – oh entonces debo suponer que esto es una declaración – su mano libre se encontraba detrás de su cabeza mientras se despeinaba, mientras un ligero rubor se apoderaba de sus mejillas, veía como la joven se acercaba a él y agarra con delicadeza la mano que sostenía el chocolate para después mirarlo fijamente con sus mejillas totalmente sonrojadas.

– A Haru le gusta Yamamoto-san – declaro a la vez que el sonrojo se expandía hasta sus orejas, Yamamoto solo se quedo callado mientras la miraba, una pequeña sonrisa se asomo en su rostro, una muy distinta a la que siempre portaba su rostro, ya que esta contenía un sentimiento mucho más profundo, se acerco a ella lentamente para después depositar un pequeño beso en la frente de la joven y luego darle un abrazo, con una sonrisa boba plasmada en el rostro.

Porque ahora entendía a lo que se refería Tsuna.

Nunca imagino recibir aquel chocolate y menos con esa particular forma, ahora debía encontrar la manera de rechazar chocolates que le darían el siguiente año ya que el solo tenía pensado aceptarlo de una persona.

Un inesperado chocolate que le dio un home run a su corazón.

Ya que estaba enamorado por primera vez.
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cielo di primaveraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora