Trouble | Lukesse | MCSM

trouble XVII • Aiden y Petra [Parte 3]

»Petra, me gustas.
Axel [5:54pm].

✔✔«

[...]

-¿Nos vamos? -Aiden le sonrió a su quedante.

-Sí.

Aiden era nuevo en esto. Nunca había logrado expresar sus sentimientos de la manera que lo estaba haciendo con la peliroja y tenía miedo de ir demasiado rápido o demasiado lento en su relación.

Así que sólo se limitó a tomar la mano de la chica y entrelazar sus dedos.

-¿A dónde vamos? -la chica sonrió.

El castaño no tenía nada en mente, la verdad, era que no había preparado nada.

Y se puso nervioso.

-La verdad... -con su mano libre rascó su sien, mirando hacia otro lado-. No he planeado nada.

-Vaya, qué sincero.

Subieron al auto de Aiden, y se quedaron ahí, sin decir nada.

Y el ambiente se tensó. Petra comenzó a pensar que quizás todo era una trampa para humillarla. El extraño comportamiento del castaño y que de un día para otro la tratara demasiado bien como para que alguien lo creyese, era totalmente inesperado.

-Aiden... -le llamó y este inmediatamente la miró a los ojos, incitándolo a hablar con la mirada-, ¿qué planeas?

-Ye te dije que no tengo nada planeado para esta noche...

-No, no -le interrumpió y miró al frente-, es que, me tratabas mal, me molestabas y ahora me invitas a salir y te comportas como si realmente fuese una persona importante para ti.

-¿Insinuas que...?

-No he terminado. No sé si te estás vengando por algo que habré dicho o hecho, en verdad, pero si es así, te pido que pares. No quiero...

-Petra... -trató de detenerla.

-Ilusionarme con algo que puede no ser real y que al final me va a last...

-¡Basta! -Aiden golpeó el volante de manera tan fuerte que al fin logró captar la atención de la peliroja, además de que se escuchó el resonante sonido del claxon-. Nada de esto es como lo estás pensando.

-¡Claro que sí! Lo sé, porque tú sabes que le gusto a Axel y él es el mejor amigo de la persona que tú odias -le acusó, recordando el mensaje que el pelinegro le había enviado minutos atrás-. ¡Dios, era tan obvio! -salió del auto y caminó hacia la entrada de su casa.

-¡Petra, nada de esto tiene que ver con Axel, en serio!

-¿¡Y por qué querrías estar conmigo!? -aunque no fuese creíble, la peliroja no creía que algún chico quisiera estar con ella.

-¡Porque en verdad me gustas! ¡Es en serio! ¿Cómo quieres qué te lo demuestre? -el castaño tomó la cintura de Petra, deteniéndola-. ¡Escúchame!

-¡No tengo qué escuchar!

-Por favor, Petra -la abrazó, apegándola a él-. Hace tiempo que no me sentía bien conmigo mismo, no me di cuenta de ese vacío hasta el momento en que supe que me atraías -susurró en su oído-; me siento bien, sólo si estás conmigo. Sólo si somos un nosotros.

Hasta ese momento, Petra decidió confíar en él.

Haciendo oficial su relación.

Y eso, no resultaba del todo un problema.