Querido diario: Cintia y yo nos hicimos grandes amigas porque teníamos muchas cosas en común. A pesar de hablar siempre conmigo nunca dejó de trabajar, no porque yo no le haya pedido que deje sino que ella no quería porque tenía un bebé, el que debía mantener y aparte quería ahorrar para poder irse a vivir donde estaba su mamá que era en otro país. Un día ella llevo a su bebé llamado Ángel a mí casa para que yo lo conociera. Era hermoso. Un gordito de dos años y medio, ojos verdes que transmitían tanta ternura y paz que era imposible no quererlo, de pelo color castaño claro, súper blanco y con unos cachetes que daban ganas de morderlos. Yo estaba enamorada. Como sabía que lo llevaría yo le había comprado unos cuantos juguetes, entonces ella lo dejo jugando y nosotras nos fuimos a sentar en el sofá. Estábamos hablando de todo, cuando ella dijo que quería contarme algo, le dije: "te escucho." Me contó que cuando ella era adolescente sus padres se separaron. Su mamá se fue con su nueva pareja y ella decidió quedarse aquí con su papá. Pero al tiempo su papá se volvió alcohólico lo cual siempre le traía problemas. Por todo lo que sufría con su padre, en ese momento no vio otra solución y ella comenzó a tomar. Un día que estaba un poco borracha, un señor la siguió todo el camino desde que salió del bar a su casa, como la vio en ese estado y sola, ese hombre la violo. Al tiempo ella se enteró que estaba embarazada a sus 18 años. Al principio del embarazo lo odiaba y quería abortar pero nunca se animó. Ese bebé fue creciendo en su vientre y cuando lo sintió moverse por primera vez se dio cuenta que lo amaría con locura. Cuando dio a luz le puso de nombre Ángel porque sabía que Dios se lo había mandado para que su vida cambiará de ser oscura, a ser una llena de ternura, inocencia, risas, paz y sobretodo amor. Y me dijo algo que hasta el día de hoy recuerdo. Lo que dijo fue que ella creía que a pesar que pasen muchísimas cosas malas, Dios siempre regala motivos para ser feliz; sea una persona o un animal, pero es algo o alguien que pone en tú vida porque sabe que te ayudará dándote fuerzas cuando creas que ya no puedes... Entonces pensé en Ingrid que sin ser familia siempre estuvo para mí. Cuando mamá no estaba por trabajar o porque se fugó, cuando Francisco me odiaba, cuando Sebastián me engañó y en muchas ocasiones sean malas o buenas y me di cuenta que nunca le había agradecido o si quiera le había dicho cuánto la quería. Desde ese momento empecé a pensar y a creer que es verdad lo que ella me dijo. Cada vez que le pedí a Dios que me diera fuerzas para seguir, estaba Ingrid que hacía que cambie de energía... Una vez vi un película que decía que siempre le pedimos a Dios grandes milagros, pero no nos damos cuenta que él todos los días nos está regalando pequeños milagros, que tal vez casi ni los percibes, pero una vez que te das cuenta de ellos, cambian tú vida por completo...
Estuvimos hablando por mucho tiempo, luego ella y su gordo se fueron... Entonces me di cuenta que Ingrid no había bajado desde que Cintia había llegado. Le prepare la comida y se la lleve a la cama. Cuando entre ella me miró, sonrió y me dijo: "¿Sabías cocinar?" Le pregunté que le pasaba y me dijo que se había sentido mal, pero que no era nada importante. Me preocupe y le tome la presión, la cual estaba perfectamente. Me dijo: "Te lo dije. Ahora dame tú comida así la pruebe." Se la di, hizo cara rara, luego río y dijo que estaba rica. Entonces aproveche, le di las gracias por lo que hace e hizo por mí y le dije cuanto la amaba, ella solo me dio un gran abrazo y me dijo que también me amaba...Los años pasaron, cumplí 26 años y los festeje con Cintia, su niño e Ingrid. Cuando abrí los regalos en esos había un sobre en el cual mire que había dentro y allí se encontraban dos entradas para ver a nuestro cantante favorito, mire a Ingrid y ella dijo: "Me enteré que venía y pensé que te gustaría ir." Yo solo me levanté y le di un gran abrazo...
Me voy que debo preparar la maleta, me voy a la casa de la playa. Luego sigo... Saludos Soledad...
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Soledad (EDITANDO)
Teen FictionDicen que un diario intimo, guarda los secretos más profundos, de aquella persona que lo escribe... También dicen que las personas que los escriben son personas incapaces de comunicar en palabras lo que le sucede o que no tienen a quien más confiar...