Cazadora Híbrida

capitulo 13

EMMA

Llego a la entrada de la gran plaza. Wyatt se encuentra allí observando a todos lados, como si buscara algo. Al verme llegar, corre hacia mi.

— ¿por qué llegaste tarde? — carraspeo tratando de pensar una respuesta.

— tuve un inconveniente, además que me distraje un poco y me salí del camino. Eso es todo. — me ve sin creerme, expectante evaluando cada movimiento que doy.

— ¿por qué tienes una mancha de sangre en tu hombro? — tapo instintivamente la parte
de mi hombro. Avanza hasta mi, tratando de quitar mi mano de esa zona. — dejame verla.

— no. — me corro otra vez de su intento de quitar mi mano de esa zona.

— Emma. — me riñe. Ruedo los ojos y quito mi mano, dejando al descubierto mi camisa azul manchada con sangre. — ¿qué fue lo que paso? — evito mirarlo. — Emma, dime la verdad.

— una flecha llegó a mi hombro. Nada nuevo.— toca la zona, verificando que todo está perfectamente y solo es la ropa manchada.

— ¿cómo lograron entrar al territorio vampírico? — aprieto los puños. — ¿cómo puede Vald permitir esto?.

— no lo sé.

— hablaré con él. — esta dispuesto a regresar el camino, lo tomo del brazo. — sueltame Emma. Tengo que hablar con ese vejete.

— tranquilo Wyatt. No hay nada malo, despues de todo mis heridas se curan rápido— Vlad se enojaría mucho y provocaría un guerra por esto.

Suelta un suspiro pesado. — ¿por qué eres tan cercana a Vlad?

— son asuntos que no necesitan de tu incumbencia. — hablo mientras camino a la palaza. Muchos vampiros caminan por aquí, al igual que novicios. Los novicios, humanos convertidos por vampiros. No son muy fuertes pero, son vampiros y bienvenidos aquí.

— no olvides que tenemos una relacion que nos une. — ¿qué? Volteo a verlo, siento un agujero en el estómago. No puede ser que se haya enterado, no di ningun indicio de ello.— el instituto. — suspiraría aliviada si él no estuviera aquí. — Puedo hacer que hayan rumores muy malos Emma.

— no serías capaz de eso. — es un imbécil.

— ¿quieres probar? — aprieto los labios y veo al bosque. ¿qué debo hacer? No es me importe mi reputacion, pero quiero pasar desapercibida en la escuela. — tengo muchas pruebas, puedo hablar sobre la relacion tuya y de Vlad.

Cierro los ojos y suelto un suspiro mientras él tiene una sonrisa en su rostro.— de acuerdo. Acompáñame.

Lo guío hasta un "cafetín" se le podría decir, se encuentra en medio de la ciudad y es muy conocido. Ambos llegamos y escogo la mesa mas lejana posible de los vampiros presentes.

— ¿y bien? ¿me lo diras? — asiento, la mesera llega dejando la carta del menú. Solo pido un pastel de piña. El chico frente a mi pidío un jugo de limón. — me sorprende que haya otros tipos de comida ademas de la sangre que beben.

— estas cosas es lo ¿único? Tal vez. Que nos hace sentir humanos y no como un ser muerto y a la vez no. — tomo aire tratando de quitarme las ganas de vomitar que tengo. — sobre Vlad. Soy su nieta. — un ataque de toz lo invade, lo veo expectante.

Que drama.

— ¿S-su nieta? — asiento. Un plato es puesto frente a mi, con un pedazo de papel al costado del trozo de pastel. Levanto la mirada... es el chico de la foto que estaba con Grace. Me guiña un ojo y se va.
Tomo el papel, hay un numero escrito en él. Una mano me arrebata el pedazo de papel.

— ¿qué haces? — rompe en miles de pedacitos el papel.

— cree que tiene una oportunidad contigo. No hay que hacerle esperanzas a ese chico.

— ¿y tu qué sabes si tiene una oportunidad conmigo o no? — su ceño se frunce. Está molesto.

— continuando con el tema. ¿eres su nieta?

— no sabes que responder ¿verdad? — tomo un trozo de mi pastel y lo meto a mi boca. Hace mucho tiempo que no pruebo esto.

— no quiero enojarme eso es todo. Tenía entendido que Vlad tenía dos  hijas, las cuales fallecieron junto con toda su familia. — toma un sorbo de su limonada. Me gustan sus ojos.

— ¿por qué te enojarías?. Él quiso ocultar la historia completa. Solo mis padres y tíos fallecieron, nosotros no. — tomo otro pedazo.

— me enoja que coquetees con chicos frente a mi. — ahora hablamos de un solo tema.

— No estaba coqueteando, el solo me dio su número. Ademas no es un delito si lo hiciera, estoy soltera y no le hago daño a nadie. — me cubre un dolor de la sien.

Kiara.

— ¿y tu mate? — su mirada me muestra sufrimiento. ¿qué lo puedo responder? No puedo pensar una respuesta viendo como sufre.

— él... simplemente no lo sabe. — ¿por qué dije eso?. Otra punzada llega a mi cabeza.

— ¿por qué? ¿por qué no se lo dices? ¿sabes cuanto puede estar sufriendo esa persona por no encontrar a su mate? ¿cuanto tiempo se preguntó si había sido maldecido por no encontrar a su mate? ¿sabes cuanto anhela tener a su mate cada día, cuando despierta o anochece?. — se levanta de la mesa sobresaltado, llamando la atención de los demás comensales. — no sabes nada de lo que está sufriendo.

Y sale del local molesto apretando sus manos en puño, estoy en shock. Y el comportamiento que tuvo me hace dudar... ¿Wyatt sabé que yo soy su mate? Y si fuese así ¿cómo se entero?