XYZ and The Hall of Fame

Capítulo 13 "Mew"

Al escuchar la pregunta hecha por la reina, Ash levantó la mirada hacia el sujeto un tanto lejano a su perímetro de vista clara, pero no pudo evitar sentir como su pecho creaba un nudo por dentro, dificultándole la respiración, mientras sus pupilas temblaban incrédulas ante lo que reflejaban.

POKÉMON

XYZ AND THE HALL OF FAME

Capítulo 13 "Mew"

Aquel mismo sentimiento lo invadió entonces, sentirse arrastrado por la fuerza que emanaba aquel Pokémon oscuro, como si nublara sus pensamientos y llenara su corazón de dudas. Apretó fuerte los párpados y se llevó una mano al pecho sujetando la tela de su camisa con gran fuerza. Dolía... Dolía... Dolía tanto... ¿De qué se trataba todo eso? De un momento a otro, todo su cuerpo se encontraba en llamas, la sensación de ser abrazado por las corrientes eléctricas una y otra vez, de manera constante y terriblemente dolorosa.

-¡Aaaagghh! -se curvó sobre sí mismo tratando de resistir aquella sensación que lo consumía. Al escucharlo Serena de inmediato se volteó, encontrándolo en aquel estado, acelerando su corazón en un segundo, lo que la llevó a correr a su lado, dejando al hombre parado observándolos a ambos.

-¡Ash! ¡Ash! -aunque lo llamara no era capaz de reincorporarse, la presión en su ser era tanta que la sangre había comenzado a brotar por los orificios de su nariz, asustándola.

-Es sólo la conexión... -la voz profunda del otro Ash se escuchó en medio de los gritos del más joven.

El Raichu bajó la mirada y asintió, al mismo tiempo que elevaba la cola y la enrollaba de a poco en el brazo derecho de su entrenador.

-No podemos evitar que la conexión con Greninja se establezca al usar el vínculo... -volteó entonces hacia su Greninja oscuro, -sin embargo... Mi Greninja ahora es incomparable con lo que alguna vez fue... puede que su propio vínculo termine por consumir la vida de ese desecho.

-¡Detentee! ¡Páralo! ¡De seguir así Ash! -le gritó con la desesperación estampada en el rostro la pelimiel.

-¿Se morirá?... -sonrió de lado por un segundo. -Tal vez sea lo mejor. -Ante sus palabras los ojos azules no paraban de temblar, la sola idea de perderlo... la llevaban a pensar en las mil formas de salvarlo que no se le ocurrían.

-¡¿Qué es lo que pretendes?! ¡¿Qué es lo que quieres?! ¡¿Por qué haces esto?!

-¡Lo que está pasando, no es algo que no haya pasado antes! -le esclareció molesto, al ver la preocupación y lo abrumada que estaba. Aunque él mismo lo salvara de ese destino por el que él mismo pasó antes... el deseo de hacerlo pasar por lo mismo lo dominaba.

-¿Algo que pasó ya?... -Fue entonces cuando comprendió el significado de todas esas palabras pronunciadas. Efectivamente era Ash... de algún modo... y había pasado por algo tan terrible como ese reflejo que ahora llegaba a su Ash.

-¿Qué fue... lo que te ocurrió?... -preguntó sintiéndose extraña por la empatía que le despertó.

Los ojos opacos la centraron en su mirada entonces, siempre dulce, siempre ella... -Te lo contaré cuando nos vayamos...

-¿Irnos?... -abrió grandes los ojos del impacto que causó en ella aquella frase.

-...Sere...na, no lo... escuches... -levantó el rostro reuniendo toda su valía el entrenador de Pikachu.

-Ash... -asintió sin vacilar.

-Eso está por verse... -los miró altivo, pero extrañado que resistiera a la conexión, el Maestro Pokémon. Levantó su brazo en señal de orden. -Shuriken de agua... -pronunció entre dientes molesto.