13. Una llegada... un poco extraña

1K 175 14
                                    

-¿Yuuri? ¿Vas a atender?- gritó Pitchit desde el segundo piso.
-¡Ya voy!

Yuuri se acercó a la puerta y se asomó.

¿Quién estaba allí? Un joven, pelinegro con una maleta.

¿Dónde lo he visto antes?

-Ehm, Yuuri ¿Quien es?-dijo Viktor, impaciente.
-E-Es... E-Es
-Haha, mucho gusto. Soy el patinador Jean-Jacques Leroy, mejor conocido como...
-JJ.
-Oh, vaya, un fan.

JJ le guiñó un ojo, lo que hizo que Yuuri se sonrojara.

Viktor estaba que echaba humo de tantos celos que sentía.

Sus manos temblaban.

-Ugh, ya desperté... ¿Pero que...? ¡KYAAAAAAAAA! ¿¡HAY REUNIÓN DE PATINADORES AQUÍ!? ¡Y PARECE QUE HAY YAOI!

Y Mila se desmayó, captando la atención de Viktor.

Él, antes de que ella volviese a caer en el suelo, la tomó en sus brazos y la cargó hasta el segundo piso, al estilo de recién casados.

-Hmm...-pronuncio Yuuri, un poco molesto.
-¡Ejem! ¿Podrías mostrarme dónde puedo dormir?
-Oh, s-si, claro.

Yuuri acompañó a JJ, por toda la casa.

-¿Dormiré aqui? Es muy bonito.
-Gracias- dijo y acomodó las cosas de JJ en el piso.
-Y bueno... ¿Tu donde dormirás?
-¿¡E-EH!?
-Haha, tranquilo. No haré nada impertinente... al menos no está noche- guiñó un ojo.
-N-No creo que sea bueno decirlo ahora.
-No pienses mal, que lo digo bromeando.
-N-No entiendo como eso puede ser una broma...
-Veras... mi prometida está en Canadá y me he decidido quedar en Japón ya que todos estaban aquí. ¿Creías que me gustabas?
-¿E-Eh? ¡N-No! ¡Que va!- dijo Yuuri, algo incómodo.
-¡Tock Tock!
-Pitchit, ¿Qué pasa?
-¿Vamos a comer?
-¡Claro! ¿Vienes JJ?
-En un momento voy, me voy a cambiar.

Yuuri salió de la habitación, junto con Pitchit.

-Yuuri, eres un pillin.
-E-Espera ¿Qué?
-Primero Viktor y ahora JJ ¿No puedes esperar hasta encontrar a Sol?
-Y-Yo no quería...
-Sólo estoy bromeando, tonto.

Pitchit le revolvió el cabello.

-¿Vamos a comer?
-¿No vamos a esperar a JJ, Viktor, Christophe, Yurio y a Otabek?
-Pues... no se si quieran ir a comer.
-Podemos preguntarles.
-Tú con Viktor, yo les aviso a los demás.
-¿Q-Qué? ¿Por qué?
-Tienes... algo que charlar con él. Y tienen que ver como acomodarse para dormir.
-E-Es cierto, pe-pero...
-¡Nada de peros! Vas a ir, enlazarte con tu entrenador, bajar de peso y encontraremos a Sol.

Sol... cariño mío.

-E-Está bien, ¡más te vale no andar con tus cosas raras!

Pitchit rió a lo bajo.

-Trataré de no.

El Sol y La Luna ✨En Remodelación✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora