HIT ME《Yoonmin》

7

JIMIN: A la mañana siguiente, salí más temprano que nunca hacia la Universidad.

En el camino, me distraje con mi móvil, entré a Instagram y vi una nueva foto de Jungkook.

Era tan jodidamente perfecto...¿como podía alguie de apariencia tan angelical ser tan cruel?
No lo decía por rechazarme, no, cualquiera lo habría hecho, pero, de ahí a humillarme, había un gran paso.

Sin pensarlo, mi dedo pulgar acarició dos veces seguidas la pantalla, y un corazón apareció sobre su cara.
Seguía contemplando su foto, cuando una notificación me llegó a los mensajes privados.

"@JJkook quiere contactar contigo, ¿deseas permitirlo?"

>Permitir     >Rechazar

Rapidamente pulsé la primera opción, y su mensaje se mostró en mi buzón.

"Maldito enfermo, deja de darle like a mis fotos, deja de seguirme en todas partes, pienso bloquearte, no quiero que veas mi cara más de lo necesario, me dan arcadas de imaginar lo que haces con mis fotos."

No. No no no. Él no podía bloquearme. Amaba todas y cada y una de las fotos que publicaba.

Contesté veloz que yo no hacía nada con sus fotos, cosa que era cierta, pero cuando pulsé enter, otro mensaje apareció en la pantalla.

"No puedes enviar ni recibir mensajes de este usuario porque te ha bloqueado"

-Mierda! - grité con rabia en plena calle, sin importarme que la gente pudiese mirarme como a un loco.

Apagué mi móvil y lo guardé en la mochila, ya no me daba ninguna utilidad, pues nadie me hablaba, y sólo lo usaba para poder contemplar lo bello que era mi tormento.

Llegué tres cuartos de hora antes de la primera clase, sólo alguien como yo vendría tan temprano.
O puede que me equivocase. El chico de cabellera negra azulada me esperaba en la puerta de mi clase, sentado en el suelo y con su cabeza apoyada en la pared.

Detuve mis pasos a unos metros de él.

-Es increíble. Que te sepas lugar y horario de todas mis clases y que hayas venido antes sólo por joderme la paz.

YOONGI: Lo miré de reojo mientras se acercaba por el pasillo. Casi me costaba mantener los párpados abiertos gracias al sueño que tenía.

-¿Cómo puedes venir tan temprano? -pregunté en un bostezo que creo que ni fue audible, porque Jimin había dicho algo que no tenía nada que ver.

Su frase tuvo algo de impacto en mi aún dormida mente. Creí que las cosas no habían acabado tan mal el día anterior, y de repente había aparecido con un humor de perros.

-Relaja esos humos niño -me levanté, palmeando mi trasero para limpiarlo-. Ni si quiera me ha dado tiempo a decirte algo, ¿por qué coño te pones así?

JIMIN:

-Tú has venido antes que yo.

Tiré mi mochila al suelo de mala gana y me senté en el sitio del que él acababa de levantarse.

-Eso, al igual que todo, no es de tu incumbencia.

YOONGI:

-Pero vine por ti -murmuré ante su humor.

Observé cómo tiraba su mochila y suspiré. No tenía ganas de repetir lo que le dije el día anterior de que sí era de mi incumbencia, más que nada, porque era capaz de ponerse a preguntar y no puedo darle ninguna respuesta aún, por ese motivo, decidí cambiar de tema.

-No me he levantado de ahí para dejarte un sitio caliente en el que apoyar tu culo -cogí su mochila y me la colgué en un hombro-. Levanta.

JIMIN: Cerré mis ojos un momento cuando tomó mi mochila.

-Mira, Yoongi, no sé si hoy voy a tener la paciencia para  aguantarte, suelta la mochila.

YOONGI: Alcé una ceja y me recoloqué la mochila, insinuándole con el gesto que no pensaba soltarla.

-Levántate -reiteré mientras empezaba a caminar por el pasillo.

JIMIN:

-¿Se puede saber a dónde coño vas? No pienso saltarme las clases por tu culpa de nuevo, Min Yoongi!

Vi que no se detenía y me levanté, corriendo para abalanzarme sobre él y quitarle mi mochila.

-Eres insufrible.

YOONGI: Me aferré a su mochila con la mano, tirando de ella para intentar que la soltara.

-¡¿Quieres tranquilizarte de una puta vez?! -protesté exaltado-. ¡Aún falta más de media hora Jimin, no pienso hacer que faltes a clase así que calmate!

Lo empujé con la mano libre, tratando que soltara la mochila que aún sostenía.

JIMIN:

-¿¡Y qué mierda quieres que hagamos tú y yo mientras, eh!? ¿¡Besarnos de nuevo!?

Di un fuerte tirón a la mochila, y el fino brazo de Yoongi tuvo que soltar su agarre

YOONGI: Mis dedos dejaron ir la mochila por sí solos y mi mano fue inmediatamente a frotar el hombro en que había llevado la mochila hasta que le había dado un tirón.

-¡¿Tantas ganas tienes de hacerlo que no dejas de pensar en ello?!

JIMIN: Oh, aquello si que no.
Le empujé sin cuidado contra la pared y apreté mis puños.

-Escúchame bien, porque ya estoy comenzando a cansarme de ti: Jungkook me ha bloqueado en Instagram y encima me ha llamado enfermo porque cree que me toco pensando en él, lo cuál, por extraño que parezca, no es cierto. Asi que - le agarré del cuello de la camisa- lo último que me faltaba por oír hoy, es que yo tenga ganas de comerte la boca como lo hiciste tú conmigo ayer.

Le solté de golpe y me alejé un paso atrás, sin retirar mi mirada de la suya.

YOONGI: Arrugué la naríz ante el golpe que recibí. Lo observé en silencio, tratando de buscar la calma con la que me había levantado, no quería volver a lo de antes, volver a pegarle para llamar su atención, pero viendo la situación, pintaba mucho peor que antes.

Suspiré.

-¿Por qué la has pagado conmigo nada mas verme? -pregunté manteniendo el tono-, yo no tengo la culpa se él sea gilipollas contigo.

Quizás lo que me calmó fue la puñalada de que hubiese pagado conmigo lo que le había pasado con Jungkook.

JIMIN:

-Porque estabas ahí para pagarla, siempre estás ahí, joder. Y Jungkook no es un gilipollas, no vuelvas a insultarle en mi presencia, sigue metiéndote conmigo, pero no con él.

De pronto me sentía triste, incluso cansado.

Me dejé caer al suelo resbalando mi espalda por la pared.

-Yo soy el único gilipollas aquí. -susurré.