La Pequeña Sharon Y La Invasión Del Rock

Las dos nuevas

–¡Boluda! –gritó la Cheni. –¡No sabes! ¡Viene La Zorra!

–¿¡¡Eh!!? –gritó Sharon.

–¡LA LICUADORA! –respondía Juana desde su cuarto. Firulais ladró desde afuera. Sharon estaba recontra re podrida.

–Si boluda –siguió hablando la Cheni–. Va a venir Jackita La Zorra, viene dentro de unos días, va a estar de más. Yo ya compré mi entrada. Valen $45.

–¡Ay que caro! –Exclamó la Sharon –pero va a valer la pena.

Sharon encendió la computadora. La cara Pentium III de Sharon comenzó a hacer sus típicos ruidos. Aquella computadora le había valido unos 60 dólares a Sharon. Nunca supo cómo la había comprado su madre, pero sabía que el internet se lo robaban al vecino, Mateo. Sharon entro a su Facebook. Recorrió la página de inicio, comento algunas fotos y acepto algunas solicitudes de amistad. Sharon tenía un mensaje privado. Lo abrió.

Hola Sharon. Te mande la solicitud, acéptame. Saque tu nombre de una terminal de bondis.

Sharon recordó que hace un año, cuando su aventura hacia Buenos Aires había comenzado, Sharon había anotado su nombre en un baño público de una terminal de Montevideo. Sharon pensó quien sería aquella persona, que tenía de foto de perfil una foto de Jackita La Zorra y su nombre era JochezkasntuRnalO OpartiNamuKishuna. JochezkasntuRnalO tenía 134 amigos, poca cantidad. Sharon gozaba de 5000 amigos y 230 suscriptores. Sharon era muy famosa.

–Che, gorda –le dijo Sharon a la Cheni–, acá hay un tipo que se llama JochezkasntuRnalO y que me agregó. ¿Nunca te agregó a vos? ¿No lo conoces?

–No amiga, no sé quién es.

Entonces, se escuchó el típico “¡Pump!” de la notificación del chat de Facebook. JochezkasntuRnalO le había hablado a Sharon.

“Hola” escribió JochezkasntuRnalO. “¿Cómo andas bonita?”

“Quien sos” contesto Sharon.

“No importa quién soy. Adónde Voy. De donde vengo. Préstame atención, tengo información muy importante de los Pizza Cruda” A Sharon le latió el corazón salvajemente. Otra vez, los Pizza Cruda se interponían en su vida. “Van a sacar una canción, un sencillo que va a salir para Septiembre. Se llama “The Death Song” y por lo que se, será un sencillo muy exitoso. Las ventas de los CD de cumbia peligran. Sharon, anota este número y llama cuando puedas. Vas a encontrar el resto de lo que necesites saber ahí. 094 80 45 67. Me voy. Adiós. ”

Sharon leyó el mensaje dos veces. Luego cerró su Facebook. Muchas cosas estaban sucediendo, y Sharon no podía evitar pensar en el poema que su vecino le había recitado hace un año. Sharon miro por la ventana. Mateo estaba lavando su auto. Había llegado la hora de mantener una conversación consiente con su sexy vecino, nada de pipas de crack por entre medio.