Bugaboo...

My Lady...

— ¿Adrien? — la voz de la azabache parecía un susurro.

— ¿Eh?— El joven Agreste no sabía cómo reaccionar ante su propio nombre

— Espera un momento, acabas de hablar. ¿Cómo es posible?— El joven héroe trató de cambiar el tema. — Un Akuma debe ser derrotado para que todo vuelva a la normalidad.

El joven tenía que hacer algo de tiempo mientras procesaba cómo era posible que fuera descubierto; sabía que Marinette no lo vio cuando se des-transformó ella no era esa clase de chica pero entonces porque lo llamo por su nombre. «Talvez no cambie lo suficiente mi voz» se reprochaba así mismo.

Estaba tan concentrado en averiguar lo que lo había delatado que no vio que la azabache estaba tomando su mano. — Sabes siempre pensé que eras perfecto, alguien con quien no me podía comparar y no me malinterpretes sigo pensando lo mismo— la azabache empezó a dejar salir todo lo que llevaba dentro de sí. — Siempre te vi desde lejos, fijándome en cada detalle de ti y reconocería tu anillo donde sea.

— ¿Te refieres a mi Miraculous?, lo siento My Princess pero estas equivocada. Este anillo es único en su clase así lo que significa que tu amigo "Adrien" talvez tiene uno muy parecido.

— Talvez cuando seas Chat Noir tu anillos sea único pero cuando eres Adrien solo es un anillo de color blanco cualquiera— Marinette parecía que había descubierto el mayor secreto de Chat.

— Necesitas lentes My Princess, mi anillo siempre es negro.

— Adrien o Chat, cuando tomaste el queso que me pediste vi tu anillo, el mismo anillo que lleva Adrien, puede que ahora sea negro pero en ese momento era blanco.

Chat Noir sabía que era verdad lo que Marinette decía ya que el mismo Plagg le explico que para mantener a los Miraculous a salvo a su portador lucen como un objeto común cuando el mismo no está transformado. Era por eso dejo de buscar a una chica que llevase los mismo aretes de Ladybug.

— Chat dime por favor ¿Eres Adrien Agreste?

El joven rubio sentía que un simple Si no hubiese sido suficiente ahora que había sido descubierto así que obvio las palabras y decidió mostrarle — Plagg, ya no necesito las garras— cuando termino de decir esto en el lugar que estaba el felino apareció Adrien Agreste, aquel chico que era el dueño del corazón de la azabache también era su compañero cuando era Ladybug.

— Vaya que te descubrieron niño— Plagg regañaba al rubio mientras daba vueltas por toda la habitación.

— Plagg no estoy de humor— El rubio sacó un pedazo de queso de su bolsillo para que Plagg ya no lo molestara. — ¿No quieres comer este Camembert por otro sitio?

— Esta bien pero no te olvides que ahora ella es NUESTRO problema así que más te vale ver como lo arreglas— dicho esto el kwami salió volando por el balcón de Marinette.

Adrien sabía lo que quería decir Plagg con lo de "problema", ahora que Marinette sabía su secreto debía hacer que prometa a toda costa que no se lo dirá a nadie. — Marinette prométeme que guardaras mi secreto. Nadie debe enterarse de quien es Chat Noir, talvez no lo entiendes pero esto es más grande de lo que te imaginas.

La azabache asintió la cabeza mientras miraba con seguridad a Adrien, después de todo ella también tenía el mismo secreto que ella.

— Y dime— decía mientras se movía un poco para que Adrien se sentara. — ¿Qué se siente ser un héroe?

— Pues... no sabría que decirte. Al principio pensé que era una manera para escaparme de todo lo que me rodeaba pero después aparecieron los Akumas y vi que también tenía deberes que cumplir con el traje.