Sweet Baby Boy [Jalonso Villalnela]

Chapter fifteen: "Gran sorpresa"

Moscú, Rusia.
21 de Febrero del 2017
2:39 p.m.
C- Brothers Imprint.

Fue una sorpresa viajar a Rusia, fue algo imprevisto en realidad, contando que había recibido noticias sobre su nana, la cual despertó hace una semana y estaba en un buen estado de salud, junto con el hecho de que Jos tenía que atender algunas juntas ese día, pues la importación de alimentos no estaba dando exactamente los resultados que él esperaba.

Y la editorial estaba atrasada unos días de entrega, por lo tanto trataba de no estresarse, así como tampoco enojarse, para mantener la calma y atender como se debe su trabajo.

Así que ahí esta él, hablando con la asistente del famoso escritor Joshua Damint, y planteaban un plan para lograr tener un buen manuscrito, además de tenerlo a tiempo, y sacar de su depresión al escritor.

"Espero que el manuscrito esté listo pronto, el plazo consiguió extenderse dos días más pero no creo que se pueda esperar más" se encontraba sentado en su gran silla de cuero, su porte firme mientras sus manos se encontraban entrelazadas sobre el escritorio de madera ", soy comprensivo, han pasado muchos problemas en este tiempo. Además, creo que se merece un descanso, ya ha publicado cinco libros" murmuro, mirando hacia el gran ventanal ". Es bueno esforzarse, pero estoy seguro que él ya casi llega a su límite... Si es que no lo ha sobrepasado"

"¿Esta seguro?" pregunto, insegura. Jos se levanto de su silla y comenzó a caminar hacia la salida, seguido por ella "Tal vez no sea un problema muy grave"

"¿Qué es exactamente lo que perjudica al autor?"

"Tiene depresión, o algo parecido"

Caminaron por unos de los pasillos, los trabajadores de la editorial moviéndose de un lado a otro, saludando cordialmente a Jos mientras este les devolvía el saludo.

Le gustaba más la editorial porque ahí podía sentirse en un estilo más relajado, aunque pareciera todo lo contrario, ya que de vez en cuando debía revisar los manuscritos de los escritores más reconocidos, dar su punto de vista bueno para saber si en verdad merecía ser transformado por su editorial.

Ahí podía tener una sonrisa relajada cuando de asuntos simples se trataba, era fácil, y era algo que le gustaba en verdad.

"Principalmente no es el problema su depresión, es que no encuentra inspiraci-" se corto ella misma, frunciendo el ceño mientras negaba lentamente con la cabeza y parecía contar hasta diez en voz baja.

Jos frunció el ceño, giro sobre sus talones para observar al señor Daminit boca abajo tirado en el suelo de la oficina...

"Permítame cuestionar, ¿qué está haciendo el señor Daminit?" La joven mujer frente a él forzó una sonrisa.

"Eso mismo tratare de averiguar" respondió entre dientes, camino hasta la persona que, al parecer de Jos estaba muerta, ó inconsciente, y tambaleo un poco sus hombros "¡Señor Daminit deje sus tonterías y realice su trabajo!" grito ella, sobresaltando a Jos y todo aquel que pasaba por el pasillo.

"No creo que se-" lo corto con otro grito.

"¡Levante su trasero de ese lugar!" el autor parecía verla confundido, casi neutral como si esa escena la presenciara todos los días "¡No me observe así y levante su gordo trasero!"

Jos se contenía de reír, cubrió su boca con su mano para ocultar su sonrisa de medio lado, ahora observando como la asistente del Señor Daminit trataba de levantarlo pero fallaba estrepitosamente.

Aclaro su garganta, un tanto fuerte para llamar la atención de la asistente.

"Podemos hablar esto en otro momento, ¿le parece?" ella asintió, parecía un poco aliviada, y Jos se sintió mejor al notarlo.