Chapter Eleven: "Audrey"

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Alonso se movía tranquilamente al ritmo de la música; la clase de danza siempre fue su favorita, y cree suponer que todos esos chicos detrás de la puerta solo estaban ahí para observar a las chicas.

Su mente inocente no le da razones para dar con el hecho de que alguno de ellos estuviera detrás de él. Estaba tan equivocado.

Dejo la música fluir, moviendo levemente sus caderas. Elevo sus brazos hasta su cuello y los dejo reposar ahí... La canción llegaba a su final, él se deslizo sobre el pulido suelo de madera, girando levemente sus hombros, girando con gracia su rostro para apartar los mechones pelirrojos de su vista. Todos quedaban maravillados con los suaves movimientos del pequeño.

Para finalizar, sus manos de dirigieron a sus caderas, mantuvo la planta de su pie izquierdo en el suelo y paro en punta el derecho. Todo lentamente sincronizado.

La música dejo de sonar, muchos aplausos hicieron eco en el gran salón, tanto dentro como fuera. No pudo evitar sonrojarse al notar que, por primera vez, había bailado frente a toda su clases, además de la pequeña multitud de afuera.

Sonrío cohibido, enderezando su postura y caminando hacia las bancas del extremo izquierdo. Era el turno de otra bailarina.

Alguien de tez bronceada entro al salón de danza. Cabello castaño, lacio. Ojos profundamente oscuros. Una sonrisa radiante como el sol, acompañada de dos profundos hoyuelos. Su cuerpo ligeramente esculpido y, cómo no, el balón de baloncesto que siempre caracterizaba a Scott Denos.

Alonso sonrió al ver a su amigo.

Algunos se preguntaban, ¿Qué hizo él para ganar la confianza del pequeño?

Y, la verdad de ello, era relativamente sencilla.

Audrey era nuevo en la escuela, trasladado de Imperial School. Y, al contrario de todos, llego con una actitud tan relajada. Sin embargo, no pudo pasar por alto como todos murmuraban por lo bajo. Elevo una ceja, le resto importancia y se dirigió a su casillero. Saco los libros respectivos para su siguiente clase.

Pero de un momento a otro, escucho como la mayoría de los hombres suspiraba, aun mas confundido giro su rostro hasta tener en vista la entrada de la escuela.

Se le fue el aliento, tal vez como a la mayoría, simplemente no podía evitarlo. Pellizco levemente su brazo para saber si ese pequeño ser era un sueño o simplemente tenia a la persona más hermosa frente a sus ojos.

El pequeño caminaba con la mirada un tanto gacha, sonriendo tímidamente a algunos chicos, logrando sacar suspiros de parte de estos.

Audrey, sin darse cuenta, caminaba directamente hacia el pequeño. Y salió de su ensoñación hasta que sintió un pequeño cuerpo chocar contra el suyo. Por instinto tomo la cintura del pequeño, evitando así que callera. Sin embargo, lo soltó rápidamente al notar la tensión de su cuerpo el momento en el que lo tomo.

El pequeño elevo su mirada y se topo con unos oscuros ojos, le cautivaron en ese mismo momento. Y Audrey... Se quedo sin habla, aprecio esos hermosos ojos verdes de cerca, sus muy notables pecas y el lechoso color de su piel.

Audrey decidió hacer un nuevo amigo ese día.

Claro que Alonso no sabía sobre el pequeño enamoramiento de su amigo hacia su persona.

Sí. Fue relativamente fácil ser amigo de Audrey, pero aun así estaba agradecido de tener alguien con quien hablar a parte de Sofía y Jasen. Pero hablar con Audrey era tan diferente, parecía que había una gran química entre ellos.

Sweet Baby Boy [Jalonso Villalnela]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora