Y todo por una manzana...

El inició del desastre.

La mañana era calurosa y soleada, el sonido de la licuadora y el tintinear de una alarma era el único ruido presente en esa acogedora casa.

Sus cabellos grisáceos mas alborotados que nunca eran lo único que sobresalía de entre las mantas rojas. Un quejido y el remolineo del cuerpo bajo la tela fue la única respuesta al insistente sonido de la alarma.

Con molestia estiro su moreno brazo tanteando dar con el aparato de forma brusca e irritada.
-Maldición...-Masculló hastiado al no dar con dicha molestia matutina, enderezando su cuerpo. Provocando que caigan las sábanas que lo cubrían, dejando al descubierto su torso desnudo y pantalón de pijama con estampados de animales africanos -¡¿Donde putas esta el maldito aparatejo del demonio?!-Maldice por segunda vez mientras busca el dichoso reloj-¡Jo!, maldita porquería -Refunfuñea y saca de entre el buró y la cama al causante de su mala mañana.

-¡Eak, baja ahora que se hace tarde!-Suspira al escuchar la voz de su compañero y a paso aflojerado se encamina a la cocina, donde lo esperan unos hot cakes, con jugo de naranja, y el desalineado anormal de su amigo-Vaya, tardaste menos de lo que sopuce-Rie y rasca su cabellera castaña de forma despreocupada.

-El pinche reloj feo que compraste, es muy eficiente y fastidioso -Comenta y toma asiento dispuesto a degustar sus hot cakes- ¿Otra vez haciendo tus asquerosidades?-Replica mientras observa con desagrado el liquido verdoso en la licuadora.

-No es una asquerosidad, es un licuado verde, que por si no lo sabías. Es demasiado nutritivo, y bueno para la salud-Responde con incredulidad mientras vacía la sustancia en una botella y el restante en un vaso con popote- Deberías beberlo alguna vez, que tanta falta te hace-Lo mira de reojo sonriente y se sienta frente a el dispuesto a degustar sus hot cakes en compañía de su licuado recién hecho.

-No chingues carnal, se supone somos animales carnívoros, no comemos verduritas-Gruñe irritado y frunce los labios con desagradó-¿Cuando entenderás Town?

-... La pregunta aquí es, ¿cuándo entenderás tú que somos seres humanos?-Cuestiona mientras guía un trozo de hot cake a su boca.

-Sabes, no es correcto responder una pregunta con otra -Sonríe ladinamente y deja de lado el plato con medio desayuno-Te veo en la escuela-Sin más que decir se retira dejando al castaño solo en la mesa.

-... Te ayudaré a lavarlos a la próxima decía. Deja de joder Town, lo haré en la mañana decía. No te dejaré solo Town... Decían -Refunfuñea y seca sus manos después de haber lavado todos los trastes utilizados esa mañana-Bueno, que se le va a hacer- sonríe levemente y guarda su licuado en el lado izquierdo de su mochila para acto seguido salir de la casa cerrando todo con llave.
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Suspiro por enésima vez en el día mientras observaba con irritación y desepcion como sus dos mejores amigos, casi hermanos peleaban como de costumbre ante los recuerdos del pasado.

-¡Eres un imbécil Foxy!, ¡Un maldito traidor!-Chillo con indignación y enfado la oji-ambar mientras fulminaba con la mirada al pelirrojo frente a ella que mostraba hastío hacia la chica y cruzaba los brazos frente a su pecho con irritación ante las acusaciones lamentablemente hacertadas hacia su persona.
-¡Y con un carajo!, ¡basta ya de eso Mangle!, ¡Siempre me jodes con eso y ya me tienes hasta la coronilla joder!-Gruño y al ver la clara intención de asesinar en mi amiga es que decidí intervenir.
-Basta ya ustedes dos. Con un demonio, somos amigos...-Murmuré y los mire con decepción-Hermanos...-. Ambos apartaron la mirada de mi persona y soltaron maldiciones apenas audibles para mi.

-Él dejo de serlo para mi, en el momento en que decidió darme la espalda e irse como perro faldero tras la rubia esa-Acusó Mangle, provocando que el pelirrojo frunciera el ceño molesto.

-La rubia esa tiene nombre, y no te ha hecho absolutamente nada para que la odies de tal forma.
Si buscas apuntar a alguien, es a mí. Chica no tiene nada que ver-Defendió serio, mirando fijamente a la albina que apretó los labios y dando un pequeño grito de frustracion y molestia se retiro no sin antes dedicarle una mirada enfurecida al chico.
-¡Demonios viejo, un día de estos harás que explote!, ¡y que a mí me de un maldito ataqué!-Refunfuñé y volví a suspirar cansado de la situación.

-Lo siento Spingtrap... En verdad lo lamento, pero es que... ¡Carajo, Mangle si que sabe joderme hasta mas no poder!-Se jaló el cabello exasperado y aspiro profundamente intentando calmarse- Tengo que irme, llegare tarde a la escuela y no quiero más reportes.. Nos vemos-Sonreí levemente y asentí.
-¡No olvides lo de esta tarde!-Grité antes de que se alejara por completo de mi vista.
-¡No lo haré, descuida!-Sonrió y desapareció entre la multitud de gente. Mis amigos si que necesitaban arreglar las cosas, esta situación comienza a tornarse molesta e hiriente para ambos, aun que ninguno lo notase, y yo como buen amigo, me encargaré de ayudarlos.
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-Demonios Eak, por lo menos deberias lavar donde comes, ¿no?... Me dejas trabajo extra y créeme, no es agradable-Me quejé e hice un puchero una vez tome lugar a un lado del moreno que por lo visto ni atención a mis palabras... O si quiera a mi presencia ponia-¿uh?-Con curiosidad fijé mi vista en lo que lo mantenia absorto a su alrededor, y fue imposible ocultar la sonrisa en mi rostro al ver a la peliazul que platicaba amenamente con el chico asiático recién transferido- así que... Bombón, eh?- Lo codeé llamando por fin su atención que al caer en cuenta de mis palabras frunció el ceño y fijó su vista al pizarron.
-¡Oh vamos!, no soy idiota-Reí divertido de la situación y sonreí socarronamente al notarlo tensarse.
-No mames carnal, ¿yo fijándome en... Ella?, por todos los tacos al pastor, eso ni en tus mas fumados sueños -Roló los ojos y yo bufé, hacer que este canijo aceptara algo, es más difícil que hacer que el guitarrista de la banda de los Toy's dejara de alterarse cuando ve al chico de los animatronicos.. Pero bueno, sería interesante llevar a cabo lo que sería una misión suicida, porque... ¡Por todas las manzanas de don Toño!, Si Eak se enterase que meto mis narices donde no me importa... Seré león a las brasas.

Pero carajo que me importa un pepinillo, el amor me llama, y su llamado es... Muy gratificante y seductor.

Dedicado a LauraDeNeon
Esta historia es gracias a ti bebe :'3 con todo mi amorsh