Hello Mr. Holmes

Bienvenido Mr. Holmes

Se puso su abrigo y bufanda y como un tornado tomo un taxi con rumbo hacia Scotland Yard.

Cuando llego a la oficina de Jake se encontró con Mycroft hablando con el inspector.

— ¿Cómo esta John? Tu hermano me dijo que lo encontraron herido en un parque—Se apresuró a preguntar Lestrade.

—Se encuentra bien, no recuerda como llego ahí pero está estable—Respondió Sherlock—Así que dime Graham...—

—Greg—Corrijo el inspector a Sherlock con algo de fastidio — "¿Cuándo llegara el día en que se aprenda su nombre?" —Pensó.

—Como sea, ¿Qué es lo que sabes sobre la baronesa Adeline Vetsera y el príncipe Charles Rudolf? —Pregunto Sherlock.

—Sobre eso ya me hablo Mycroft y también vi las fotografías y demás cosas que te entrego aquella mujer—Hablaba el inspector mientras se paraba para tomar las fotografías de unas cajas en su escritorio—Y note que algo no concuerda y no me mires así Sherlock, no soy tan estúpido como crees—

Sherlock solo soto un bufido y miro con más atención a lo que quería exponerle Lestrade.

—Tengo entendido que estos amantes no eran pertenecientes a Londres y que ellos murieron en alguna cabaña de Polonia o algo así pero el punto es que las fotografías que te dio la mujer donde estaba la escena del crimen no están en ningún lugar extranjero, esa cabaña está aquí en Londres—

Sherlock frunció el ceño y tomo las fotografías.

— ¿Realmente crees que tenga razón Jeff? —Dijo el rizado a Mycroft.

—No estoy tan seguro—Respondió con una mueca el mayor de los Holmes.

Greg solo miraba a ambos hermanos algo molesto por su falta de confianza y porque ora vez Sherlock volvía a llamarle por otro nombre.

— ¿Cómo puede el gobierno de Londres personificado no saber si esto está aquí o no? —Espeto el menor de los Holmes.

—Bueno tal vez por eso la mujer les dijo que todos teníamos algo que te ayudaría a resolver el caso—Dijo Greg molesto obteniendo la atención de los Holmes—Esa cabaña está a las afueras de Londres, el lugar ya está abandonado pero aún sigue ahí —

— ¿Cómo lo sabes? —Pregunto Mycroft.

—Un día fui a pescar pero en vez de hacer eso di una caminata por el lugar y encontré varias cabañas antiguas abandonadas, entre ellas estaba la de las fotografías solo que mucho más deterioradas—

Mycroft le dio un mal pensamiento. ¿Cómo la mujer sabía que Lestrade en algún punto de su vida llego a pasar por esas cabañas? En realidad ¿Desde hace cuánto tiempo esa mujer los había estado observando? ¿Qué tanto sabia ella sobre ellos mismos?

Sin duda serian incógnitas que debía responder en algún momento.

—No nos queda otra opción más que ir a ese lugar—Hablo Mycroft— ¿A cuánto tiempo queda ese lugar en auto? —

—En unas dos horas tal vez—Respondió el inspector.

—Es demasiado lejos ¿No hay otra ruta más corta o rápida para llegar ahí? —Dijo Sherlock mirando detenidamente al inspector.

—Es la más rápida Sherlock, técnicamente el lugar está en medio de la nada en una zona boscosa—Respondió— ¿Por qué la prisa? Según Mycroft tienes hasta la media noche—

—Las reglas del juego cambiaron. Ahora cada tres horas dos personas desaparecen—Dijo Sherlock—Ninguno de ustedes están a salvo, pudo llevarse a John en un instante estando yo mismo presente—