Usted decide

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—Hemos llegado caballeros, por favor sean amables de bajar del vehículo y seguirme—

La mujer los guio por una instalación que parecía ser alguna bodega sumamente grande y bien equipada, por todas partes había cubículos con monitores y máquinas que parecían sacadas de alguna película de ciencia ficción. Los que trabajaban ahí los miraban pasar, sus ojos eran calculadores y fríos como si fuesen un montón de lobos esperando atacar.

—Es de mala educación mirar de esa forma a los invitados—Hablo en voz alta Khan.

—Si señora—Respondieron todos a la par y regresaron a sus tareas.

—Disculpen a mi personal—Dijo—Hace tiempo que nadie nuevo viene aquí caminando por su propia cuenta—

—Deben sentirse muy aburridos—Dijo Mycroft.

—Lo están, muchos extrañaban a Jim ya que él les traía "juguetes" con los cuales podían divertirse—Indico la pelinegra—Eran buenos chicos pero les faltaba obediencia así que tuve que sacrificarlos—

—Que lastima—Comento sarcásticamente Mycroft.

—Lo es, pero ahora tengo chicos nuevos con lealtad impecable—

— ¿Cómo lo sabes? —Pregunto Sherlock.

—Tengo mis propios métodos de adiestramiento señor Holmes—

—Señora, la sala que solicito ya está lista—Indico una mujer rubia y de gran belleza. Vestía elegantemente y traía consigo unos papeles, parecía una mujer de negocios tranquila y formal pero a pesar de su rostro angelical sus ojos eran inexpresivos como los de un animal.

—Muchas gracias señorita Jones, ahora dirige a nuestros invitados a la sala y cubre sus peticiones—Ordeno.

—Si mi señora—Indico con la cabeza—Por aquí caballeros, Lady Khan regresara con ustedes en unos momentos—

Los tres siguieron a la rubia hasta la sala indicada que parecía un simple salón de conferencias con una larga mesa de cristal y sillas elegantes, los tres se sentaron en las sillas a la espera de la mujer mientras que la rubia se quedaba en la sala a la espera de alguna petición.

— ¿Cuánto les paga Lady Khan señorita Jones? —Pregunto Mycroft. — ¿Qué cifra tiene su lealtad?—

La mujer solo sonrió amablemente.

—Una gran suma señor Holmes pero ese pago no es para mi lealtad—Indico. —Ninguno de los que estamos aquí le somos leales a Lady Khan solo por el dinero—

— ¿Entonces de donde viene esa lealtad? —Dijo Sherlock. — ¿Por qué no serle leal a Moriarty? Él les daba regalos—

—Él era un buen jefe cuando tenía a Lady Khan a su lado pero después comenzó a ser irracional, nos abandonó—Indico—Lady Khan no, ella elimino todo aquel que se le interpusiese en su camino sin importar que tan grande o poderoso sea mientras que el señor Moriarty solo jugaba con ustedes los Holmes—

—Al parecer solo querían a papi para ustedes—Dijo Mycroft con burla.

—Solo esperábamos más de él, señor Holmes —Contesto la rubia—Si yo hubiese estado en el lugar del señor Moriarty el día de "La Caida" yo lo habría matado junto con su hermano y a todos sus conocidos sin dudarlo—

—Muy bien dicho señorita Jones—Felicito la pelinegra a la mujer— ¿Ya no tiene más preguntas señor Holmes? —

Khan camino y se sentó del otro lado de la mesa quedando enfrente de los tres hombres.

Hello Mr. HolmesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora