El Testamento | Linaje Jewelry #1

Todo Sale Mal

Una joven de no mas de 23 años se dirige a Cheltenham, Inglaterra; el pueblo donde vivió casi toda su vida, excepto en estos últimos cinco años que ha estado estudiando la licenciatura de Leyes, en la universidad Oxford, que esta a una hora de su casa en camión.

La joven de tez blanca pálida, como casi todos los ingleses, ojos azules verdosos, cabellera negra lacia y amarrada en una coqueta cola de caballo que apenas le llega un par de centímetros abajo de los hombros, mira por la ventana esa carretera llena de arboles a los lados, un bosque.

Perdida en sus recuerdos y pensamientos, estos que incluyen la decepción por no poder asistir a la fiesta de graduación de toda su generación en la carrera de leyes, todo por la muerte recién de su tío y única familia que la unía a su padre. Apenas si pudo asistir a la ceremonia de graduación dejando a sus amigos, amigas y ahora exnovio sorprendidos por su decisión; pero lo que ellos no saben es que su tío fue la persona que siempre la apoyo toda su vida, aun que ella nunca se lo pedía.

Voltee hacia atrás del camión buscando el baño, en eso distinguí que esta vacío, me levante caminando con pasos torpes a este, entre lavándome las manos y humedeciendo con el agua de estas mi cabeza, ya no puedo mas con la incertidumbre que me invade, necesito llegar a mi casa ya, sin más tiempo que perder salí del baño, camine un par de pasos, pero en eso el autobús hizo un movimiento brusco, demasiado brusco, tanto que caí en uno de los asientos.

Abrí los ojos encontrando otro par pero de color gris con un leve, muy leve tono de azul, de inmediato una sonrisa se apareció en mi campo de visión. Pestañe varias veces para reaccionar, al recobrar mis cinco sentidos pude saber que estoy sentada en sus piernas, pero lo peor es que caí sobre el individuo mas despreciable de Oxford, para ser exacta del mas despreciable que estudio Veterinaria, me levante con las mejillas calientes, por la vergüenza y el enojo que me provoca verlo a el ¿Qué hace aquí? ¿Acaso me esta siguiendo?

- Mucho gusto en verte otra vez, Zafiro- se levanta con una sonrisa burlona.

- No digo lo mismo Gerrett- cruza los brazos- ¿O prefieres que  diga gato?- se dibuja una sonrisa en su rostro.

Alza una ceja- Zafiro, si yo fuera tu me sostenía bien de los asientos- ignora su comentario- por que en cualquier momento el autobús puede sufrir una turbulencia y no quieres caer otra vez en mis piernas- sonríe.

Ella soltó un gruñido y abrió la boca pero antes de decir algo el autobús volvió a sufrir una turbulencia, haciendo que esta vez todos los pasajeros dentro se sacudieran, de inmediato Gerrett abrazo a Zafiro sentándola junto con el en sus piernas; al pasar la turbulencia ella intento zafarse de sus brazos pero el no se lo permitió, y antes de poder decir otra cosa un fuerte ruido hizo que ella lo abrazara terminando así ambos acostados en los asientos.

Abrí los ojos encontrando su playera azul cielo, alce mi rostro buscando con algo de preocupación sus ojos, el me miro a los ojos y en ese instante su cabellera castaña tomo un tono dorado por unos rayos de sol que atravesaron por la ventana.

- ¿Estas bien?- la mira preocupado.

- Eso creo- se sienta- ¿Qué paso?
Ambos miraron por arriba de los asientos encontrando a varios pasajeros levantados con caras de espanto, en seguida el conductor se levanto mirando a todos los pasajeros y tratando de calmarlos.

- Acabamos de sufrir un pequeño choque, intente prender el autobús pero este ya no funciono, les pido un disculpa enorme- arrepentido- pero la buena noticia es que estamos como a cinco kilómetros del pueblo mas cercano. Así que los que gusten pueden bajar e irse caminando- sugiere el chofer.

Mire a Gerrett el cual me pidió permiso saliendo de inmediato de los asientos para tomar sus maletas, este se coloco la mochila y la maleta mas grande la coloco en el suelo jalándola por el pequeño pasillo.