-Capitulo 11-

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-Capitulo 11-


Angélica


- Alex.- El que debía sónar como un quejido al sentir como mi espalda era estampada contra la pared, sonó como cualquier otra cosa.


Eche mi cabeza hacia atrás dejándole a Alex acceso total a mi cuello completo, mi piel se estremeció bajo sus besos, la humedad de estos pronto se hizo presente. Mis uñas rápidamente fueron clavadas en sus hombros, sentí como sus manos, en mi cintura, pronto se abrieron paso debajo de mi camisa.


Un suspiro de mi parte se hizo presente cuando sin dejar de sentir sus labios recorrer mi cuello, hasta llegar a mi hombro, una de sus manos soltó el broche de mi sostén. Rápidamente retirando todo rastro de el tocándome, sentí como sus manos se colocaron en mis muslos, en un salto pronto estaba con mis piernas rodeándole la cintura. Mi mirada chocaba con la suya. Mi respiración agitada estaba casi igual o peor a la de el.


Antes de siquiera pensarlo tenia sus labios moviéndose contra los míos, la movilidad de su cuerpo, solo me hizo anticipar lo sabido, pronto mi cuerpo fue trasladado al escritorio, retirando una que otra cosa con mis manos, me vi a mi misma con las piernas rodeando la cintura de Alex y su mirada en mi. Pronto el frio del ambiente se hizo presente. Tome al hombre frente a mi de la nuca acercándolo hacia mi, estaba a centímetros de besarlo, cuando lo escuche.


- Ya cometí este error, no lo hare otra vez.- Fue la advertencia de sus palabras las que me helaron, sin ser completamente consciente observe como Alex retirada mis manos de el. Como se alejaba dando tres pasos exactos.


Error.


Esa sola palabra me taladraba en lo mas profundo, un error fue casarme con Erick, un error fue abandonar mi vida, un error fue no ayudar a Amy, hubieron miles de errores en mi vida, pero esto no era un error, al menos no para mí.


Alex.


Lo deseaba, hoy, ahora y en este lugar.


- Alexander.- Mi respiración agitada me hizo solo llamarlo.


- Lo lamento.- Paso su mano por su cabello.- Pero no puedo, una vez esta, dos no.- Lo vi tragar.- Lo siento Ann, eres hermosa, pero yo ya tuve una persona especial y no estoy buscando otra. Esto.- Nos señalo a ambos.- No puede volver a suceder, somos amigos, solo eso.


Asentí lentamente sin mirarlo a los ojos.


Dolía.


Alex me provocaba dolor.


Tenia el dolor del castigo de la diosa.


Era mucho.


Es mucho.


[...]

Passion And DestinyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora