-Capitulo 49-

8.2K 731 15
                                    

-Capitulo 49-


Angélica


— ¿Cómo lo haces? —el asombro en mi voz fue evidente.


Vi de reojo reír a Amy, mi mirada estaba puesta al frente nuestro, en una manta aparte, donde había dos bebes perfectos. Sonreí viendo a Ayten llevar su mano a la boca, mientras su hermano no dejaba de tocar sus pies.


Aiden y Ayten, eran unos bebes hermosos.


—Después de un tiempo le agarras la mano—contesto antes de inclinarse a besar el pequeño pie de su hijo.


—Aun con Ada—mire fugazmente al "huevito-trasportador" donde estaba ella—. Siento una sola, no me acostumbro son muchas cosas por hacer, la casa, Nathan, la comida, no quitarle el ojo, las reuniones con la manada, las visitas constantes a la niña, bañarla, alimentarla y miles de cosas más me vuelven completamente loca.


Amy me miro seria unos instantes antes de soltar una carcajada.


—Recuerdo esos días, sinceramente estaba paranoica y loca, aun no puedo creer que sigas soportando las visitas de esas mujeres—rodo sus ojos—. Recuerdo que la última vez que las vi fue cuando las eche de mi casa, son personas sin vida propia que están al pendiente de ti.


—Es cierto—observe el bosque a nuestro alrededor—. Pero hay muchos que aún no me aceptan como su Luna, así que intento aguantar.


—Alexander es quien te tiene que aceptar Ann.


—Lo sé—suspire antes de acostarme sobre la mana mirando el cielo—. Solo que quiero que todo lo que venga con él, me acepte.


— ¿Crees que nos estarán buscando? —cuestiono antes de imitar mi acción.


—No me sorprendería que todos los miembros de la manada nos estén buscando.


—Son muy sobreprotectores—señalo.


—Demasiados—mire el cielo despejado, pronto el sol se ocultaría.


— ¿Ann?


— ¿Si?


— ¿Te gusta tu nueva vida? —cuestiono.


—Soy muy feliz—sonreí—. No podría pedir más. ¿Y tú?


—Preferiría morir mil veces, antes de cambiar algo de mi vida.


Sonreí para mis adentros, recordando todo lo que ella vivió, lo que yo viví.


| ¿Cambiarias algo Ann? |


Nada.


—Me encanta cunado te pones en modo tierna, cariño—despeje mi mente escuchando era voz ronca llegar a nosotras—. Espero que las recuerdes cada vez que tengamos alguna confrontación—sonreí mientras nos sentábamos.


—Créeme cariño—Amy recalco la última palabra—. Lo recuerdo siempre—rio.


— ¿Les parece divertido hacer lo que hacen? —mi cuerpo se estremeció al escuchar esa voz.


—Cierto—Ethan se acercó y Alex imito su acción—. Algún día harán que empiece una guerra.


—No es bonito llegar a casa y ver que tu mujer e hijos no están—sonreí cuando Alex toco mi mejilla.


—Lo siento—susurre.


— ¿Por qué tu no los sientes? —reí escuchando a Ethan.


—Porque me encanta hacerte enojar—Amy se encogió de hombros.


— ¿Y Nathan? —Alex miro a nuestro alrededor.


—Está dando vueltas al bosque, ya regresa—murmure meditando el tiempo.


—Es hora de ir a casa—informo.


Le sonreí.


— ¿Por qué son tan aguafiestas? —la pregunta de Amy nos hizo sonreír.


—Créeme cariño, te encantara llegar a casa.


Reí escuchándolos.


Verdaderamente no cambiaría nada. 

Passion And DestinyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora