Tentación 1:1

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 Se había formado un caos en la vivienda reservada para los muertos, y también el lugar de los poderes malos en el que se originan los ataques al altísimo. Mejor conocido como el sheól.

   Todos los demonios hablaban de una sola cosa. Una mujer idéntica a Eva andaba por la tierra. Decían que había resucitado por la exigencia de quien los había creado. Así que andaban como locos buscándola por toda la tierra para saber si eso era verdad, ya que no entendían los motivos de su aparición. Y aún más temían que fuera una mala señal para ellos.
   La búsqueda duro varios meses hasta que el rumor llego hasta los oídos del príncipe del engaño, mejor conocido como satanás, finalmente se enteró que la persona que estaba creando todo este caos, era la muerte. Por lo que reunió a un grupo de demonios explicándoles que tal rumor no podía ser tomado en cuenta por el simple hecho de venir de un traidor como la muerte.
   Pero los demonios sostenían que esta humana podría ser peligrosa para ellos si estaba siendo protegida por los ángeles, así que para calmar a los caídos, satanás les pidió que fueran testigos de su entrada en el sheól para comprobar que Eva aún seguía dormida en su forma espiritual. Pero ya en la entrada del lugar, los dos caídos que cuidaban el sheól estaban batallando para evitar que otros demonios cruzaran, todos querían comprobar que el espíritu de Eva se encontrara en su tumba.
   Sin embargo, solo satanás pudo entrar al sheól. El lugar estaba oscuro y lo cubrió una densa niebla que impedía poder mirar lo que se encontraba alrededor. Cosa que no era ningún problema para satanás porque conocía bastante bien la ubicación de aquella tumba. Se adentró a la densa y oscura profundidad del sheól hasta ver algunas sombras, siervos de la muerte, llevar el espíritu de un hombre a una tumba de descanso.
   Entonces se aproximó a una de las sombras y le pidió que le mostrara la tumba de descanso de Eva. La sombra lo llevo aún más profundo, hasta unas cajas tan viejas que parecía que estaban a punto de romperse. Abrió una de ellas y le indico que se acercara.
   Entonces un gran alivio atravesó el ser de satanás. La mujer seguía dormida bajo el poder que otorga la muerte, más calmado le pidió al siervo que la sellara de nuevo, y emprendía el regreso, cuando una risa inundo el silencioso del abandonado lugar.

  — ¿Qué haces imbécil? —Exclamó satanás, reconociendo la voz— deja de intentar engañarnos. No te va a funcionar.

  —Te hice venir, después de todo—respondió la muerte a gran distancia.

  —Si este es un intento para que te deje salir. Sigue soñando. Aquí te vas a quedar, después de todo están las sombras para que hagan el trabajo.

   La presencia de la muerte se movió nuevamente pero esta vez tan cerca para ver a su creador como primer espectador. Satanás se mantuvo inmóvil por un momento, y después se giró de manera natural para darle la cara a la muerte. Se sorprendió al ver que lucía sereno. Sus cabellos dorados tenían un brilló fantástico y su piel era clara, además de parecer de porcelana. Sus ojos entre grises y plateados mostraban algo de misterio en su ser y las ropas elegantes y oscuras que llevaba lo hacían ver tan impresionante que sintió un golpe de decepción. Esperaba verlo desesperado y moribundo.

  —No juegues conmigo—lo amenazo, satanás.

   —Solo quiero salir de aquí— Su tono era inexpresivo.

   —Tu relato no te va a sacar de aquí, imbécil.

  —Lamento decirte que esta vez no estoy mintiendo. —una sonrisa brotó del perfecto rostro de la muerte. —La chica podría ser la "nueva Eva".

   —Sí que estas desesperado— satanás sonó burlón.

  —Admito que use a mi favor el rumor que ronda sobre el ángel, pero la chica si existe. 

Felony (la tentación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora